Inocente Prostituta

Desesperación

Camino por la sala hasta la cocina donde su madre se encontraba, para después jalar su pantalón y llamar su atención.

Mama - esté lo miro preocupado estiró sus bracitos para que lo cargara, había una tormenta eléctrica y el les tenía miedo.

Se recostó en su hombro, cerró sus ojitos cuando los truenos se dejaron escuchar, su madre se acostó en la cama y lo acunó como el bebito que seguía siendo para el, este solo se acomodó para poder dormir mientras la suave voz de su madre le cantaba.

Despertó un poco exaltado, había escuchado claramente la voz de su madre cantándole.

No entendía por qué había comenzado a tener esos vagos recuerdos, unos lo ponían feliz, pero otros lo sumergian en la tristeza y el miedo.

Se acostó nuevamente tratando de conciliar el sueño, solo para darse cuenta que Kanda no estaba.

Kanda- su suave voz se dejó escuchar para que esté le contestará, pero no.

Entro al baño y tampoco estaba, por un momento creyó que este lo habría dejado que todo había sido un sueño, pero seguía en la habitación, seguía en londres.

Salió con la intención de buscarlo, no quería estar solo, pero no sabía a dónde ir, a sí que mejor se dirigió a la habitación de sus padres.

Tal vez se podía quedar con ellos mientras esté regresaba. No sabía las razones pero se sentía desesperado, como si tenía que ir a algún lugar, pero no sabía a dónde.
Se detuvo viendo al lado contrario del pasillo, pero solo negó y siguió su camino.

Llegó a la habitación y tocó suavemente, para ese momento ya no solo era desesperación lo que sentía el miedo se reflejaba en su rostro.

Sire no sabía que hacer si consolar a Mana o abrir la puerta, pero la voz tras está la hizo moverse rápido.

Cuando la abrió Allen se lanzó a sus brazos, ella solo le correspondió el abrazo para darse cuenta que el niño temblaba.

Kanda se acercó rápidamente para ver que era lo que pasaba.

Moyashi ¿que pasó?- este alzo su rostro y está vez fue a el al que abrazo, restregó su rostro en el pecho de este para luego suspirar.

No, no lo sé, solo no te vi - su voz se escuchaba rota, quería llorar lo sabia.

Acarició su cabello tratando de que se calmara un poco.

Sire se acercó a Maná y Marian estos no sabían que hacer o como actuar, tenían a sus sobrino ahi en esa habitación.

Por qué no había duda que era hijo de Neah y Liam.

Marian que lo había visto encontraba el parecido en su hermano, tenían el mismo carácter.