¿Qué le pasa?

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En el camino en coche, todo era silencio. Ninguno de los dos decía nada y manteníamos las distancias, al menos de mi parte. En el avión, todo era prácticamente igual.

Llegamos a Alaska en menos de una abrir y cerrar de ojos, la familia nos recibió preocupados por mí.

-Estoy bien, tranquilos

-Hola Aisha, ¿cómo te encuentras?- dice James saliendo de su despacho.

-Físicamente bien- digo indirectamente mirando a Callum, él pilló el mensaje enseguida.

-Bien, acompáñame- le seguí hasta su despacho y me hizo unas pruebas, cuando me dio la respuesta de lo que todos nos estábamos preguntando, no pude más que echarme a llorar. James me abrazó, me dio la enhorabuena, y yo sonreí. Estaba llorando de alegría y tristeza a la vez, me encantaría tener un hijo con Callum pero él no quería.

Y hablando del rey de Roma... Callum abrió la puerta de par en par y entró agitado al despacho.

Yo le miré, él me miró a mí y luego a su padre.

-No puede ser posible- dice él.

-Sí lo es Callum- responde su padre, Arial, Grace y Dream entraron en la habitación y me llevaron con ellas al salón mientras padre e hijo hablaban.

-No te preocupes por Callum, está preocupado, no es que no quiera tener un bebé contigo- dice Grace conociendo a su hermano.

-¿Y si es verdad que no quiere tenerlo?

-Pues nosotras te ayudaremos con el bebé, tendrá el hogar y la familia que se merece- dice Dream.

-Cariño, no te preocupes por eso ahora- dice Arial, minutos después sale Callum del despacho de su padre con los humos por el cielo.

-Callum- llama Jason a su hermano, mientras él salía de la casa como una bala.

-Es tonto, no pienses en él- dice Devon antes de correr detrás de su primo.

-No creo que no quiera tener un bebé contigo, averiguaremos por qué actúa de esa forma- dice Nash dándome un beso en la mejilla.

-Sé fuerte- dice Oliver dándome otro beso en la otra mejilla.

-Arial, déjame decirte que James y tú tenéis a los mejores hijos del mundo- le digo sonriendo, esa familia era una de las mejores que había conocido en siglos.

-¿Necesitas algo en especial?- pregunta James.

-Tal vez una manta, estoy empezando a tener frío- aunque se extrañaron, James me dio una manta.

-Si tienes sueño puedes dormir aquí, no te molestaremos- dice Dream.

-No, quiero ver una película con vosotras, como hacíamos antes- digo feliz recordando el pasado.

-Está bien, voy a por la película- dice Arial.

-Yo voy a por la sangre- grita Dream desapareciendo por la cocina.

Miré a Grace y ambas reímos, ella se acercó a mí.

-Te sigo viendo preocupada, es normal pero no le des mucha importancia a lo de Callum, disfruta de lo que vamos a hacer ahora sin pensar en él- me anima, sonreí y Arial y Dream llegaron, en esos momentos extrañaba a Aura.

Se hizo muy de noche y yo acabé durmiéndome, sé que los chicos llegaron a las tantas por haber estado distrayendo a Callum por la ciudad. Yo estaba medio tumbada en el sofá, completamente dormida. Callum se acercó a mí, se agachó y me apartó el pelo que caía por mi cara, lo que hizo que me despertara perezosamente.

-Vamos a la cama- me dice suavemente, yo gruñí y me tumbé del todo en el sofá.

-No quiero- digo con la cabeza metida entre los cojines, Callum suspiró y me cogió poniendo mi cadera en su hombro derecho, quedando así boca abajo en su espalda- ¡Callum suéltame!

-No- yo intentaba soltarme de su agarre, pero de esa manera me fallaban los poderes.

Me soltó en la cama de golpe, y yo me quejé.

-Eres un bruto

-Vamos a hablar- dice cerrando la puerta de la habitación.

-No quiero hablar ahora

-Vamos a hablar quieras o no, y toma- dice dándome mi corona, se me había caído mientras dormía en el sofá y él la había cogido.

-¿De qué quieres hablar?- pregunto levantándome de la cama- ¿De que no quieres tener un bebé conmigo?

-¡Ni siquiera sabes cómo va a ser! Si va a ser malo, bueno, vampiro de tu origen, de otro origen, o si ni siquiera va a ser un vampiro

-Pues, quieras o no, yo voy a tener a ese bebé porque se merece vivir. Me da igual si piensas que ha sido un error, me da exactamente igual que no lo quieras y me da igual cómo será. Si tú no quieres tenerlo, yo lo haré, yo me haré cargo de él y créeme que será feliz por no tener a alguien como tú a su lado, y...- me cogió la cara con sus dos manos y me besó, pensó que así me callaría. Cuando nos separamos, aunque seguíamos manteniendo los labios casi pegados, iba a seguir hablando, pero él me cortó.

-Yo no he dicho en ningún momento que no quiera tener a ese bebé contigo- sus palabras me dejaron a mí sin palabras.

-¿Entonces?

-He sido un tonto, pensé que...pensé que te arruinaría la vida, pensé que no querías tenerlo conmigo, que no estabas preparada y que te negarías a tenerlo porque te arruinaría la vida, lo siento mucho- se disculpa, me relajé y le abracé.

-¿Cómo narices has podido pensar que me arruinarías la vida trayendo a un precioso bebé al mundo?

-No lo sé, sé que soy estúpido, lo siento

-Deja de disculparte anda, entiendo que hayas pensado así

-Gracias

-¿Entonces...quieres tener ese bebé conmigo?

-Me encantaría señora Shadow- dice mirándome a los ojos antes de besarme, sonreí en medio del beso.

Dormí en brazos de mi marido como un angelito. Al día siguiente me desperté con una molestia en el estómago, abrí los ojos y Callum no estaba a mi lado, pero la puerta de mi habitación estaba abierta de par en par. Segundos después aparecieron Callum y James con los ojos como platos, me extrañé y miré a mi estómago. Estaba más grande que una sandía.

-¿Qué...?

-Sabía que esto pasaría, lo he descubierto hace apenas dos horas y no quería despertarte, pero Callum me ha venido a avisar cuanto antes- dice James entrando a  la habitación.

-Ha crecido de repente- me informa Callum.

Blood MoonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora