Blood Moon

La familia Shadow

El padre de Callum, James Shadow, era doctor y sabía mucho del mundo de los vampiros. No podía creer que estuviera en su casa.

-¿Qué ha pasado?- pregunta James.

-Íbamos corriendo y nos chocamos, se hizo una herida con la rama de un árbol- explica Callum entrando sin llamar.

-¿Es eso posible?- pregunta Grace, James estaba en shock.

-¿Puedes hacer algo? Estoy viendo algo más allá que las estrellas- me quejó, James asintió saliendo de su shock y me cogió, me llevó a su despacho. Me levantó la camiseta y me curó la herida. ¿Lo malo de todo esto? Que Callum estaba mirando.

-Ya está

-Gracias- el ambiente se había calmado, al menos en esa habitación. Salimos y la tensión fue diferente, más todavía cuando ví a alguien que pensé que jamás volvería a verla.

-¿Aura?- pregunto asombrada al verla allí parada, mirándome atónita.

-¿Aisha?- pregunta ella, ambas sonreímos con la felicidad por las venas y nos abrazamos con fuerza, abrazo que duró muy poco nada más notar lo que ambas éramos.

-¿Eres...?- preguntamos a la vez, no podía creer que fuese un vampiro.

-Hablaréis luego, necesitamos saber quién eres y qué haces aquí- dice Dream enfadada, daba un poco de miedo.

Toda la familia y yo, nos sentamos en el salón.

-Soy Aisha...en el mundo humano me conocen como Evenson, pero todos vosotros deberíais conocerme como Aisha Hawk

-¿Eres tú de verdad? ¿La princesa Aisha? ¿Aisha Hawk?- pregunta Devon.

-Sí, soy yo

-¿Por qué la gente dejó de hablar sobre tí como si hubieras desaparecido?- pregunta Jason.

-Huí, de mi padre y de todo lo que le rodeaba

-También por la muerte de tu madre- acaba uno de los gemelos, que por cierto se llamaban Oliver y Nash.

-No me leas los pensamientos- me quejo.

-Lo siento, es que eres muy fácil de leer- dice avergonzado.

-¿Por qué yo no he notado nada cuando la he tocado? ¿Por qué no puedo escuchar sus pensamientos?- pregunta Callum.

-De eso no tengo ni la más remota idea. Lo que sí sé es que estás sola, sin nadie protegiéndote, que eres especial y que por eso mucha gente te está buscando- responde James.

-¿Eso que significa?- pregunta Arial, la madre de Callum.

-Que viviendo sola, solo está en peligro. Deberías quedarte aquí, con nosotros, te protegeremos- propone James.

-No necesito protección, me sé cuidar yo sola. Además que si accediera, os traería muchos problemas. Como tú has dicho, soy especial y diferente, no soy como cualquier vampiro, vosotros mismos lo habéis visto

Tres semanas después no pude decir lo mismo, no puedo explicar lo vergonzoso que fue para mi que los de seguridad me tuvieran que sacar del instituto a rastras porque no había llevado a un tutor legal para que firmara mis datos. Y todavía más vergonzoso fue que apareciera James a firmar aquellos datos.

-Soltarla, yo soy su tutor legal- ordenó, ello me soltaron y después de volver al despacho de la directora le di las miles de gracias.

-Muchísimas gracias, de verdad, no podría haberme quedado aquí sin ti

-No las des, aunque a cambio podrías pensarte lo que te dije hace unas semanas, lo de la protección que te puede dar mi familia

-Papá, ¿todo bien?- dice Callum acercándose a nosotros preocupado.

-Sí, percibí que algo iba mal con ella y la ayudé, ahora soy su tutor legal- responde antes de irse.

-Siento daros tantas complicaciones, soy un estorbo para vosotros

-No te preocupes, no lo eres. Mi padre y tu padre se conocieron y a mi padre le queda una deuda por pagar con él. Qué mejor que hacerlo con su hija

Sonreí y fuimos a clase juntos, aquella misma tarde fui a la casa de los Shadow.

-Que grata sorpresa- ironiza Dream, al parecer no le caigo muy bien.

-¿Vienes por lo que te he recordado?- pregunta James, yo asentí con la cabeza.

-Lo único que necesito es una cama, grande si puede ser. Debéis saber que yo duermo como un humano, y también debéis saber que ninguno de vosotros podrá calmar mis pesadillas

-¿Pesadillas? Como las que tuviste en el último campamento de verano al que fuimos?- pregunta Aura, yo asentí y ella pareció preocupada.

-¿Por qué has cambiado la cara tan de repente?- le pregunta Nash a su hermana, porque sí, ahora Aura era de la familia Shadow.

Por la noche, cogí todas mis cosas y me trasladé a su casa, era hora de que yo durmiera ya que estaba bastante cansada aunque fuera viernes.

-Venía a ver si necesitabas algo- dice Arial asomándose a la puerta.

-No, muchas gracias

-Solo quería decirte que te sientas como en casa, como si fueras parte de esta familia, no queremos que te sientas incómoda

-Gracias por esto, no podría sentirme mejor con gente como vosotros- Arial iba a apagar la luz- No, no lo hagas- la pido.

-Está bien, descansa- dice antes de irse.

Todo a mi alrededor era oscuro, a lo lejos veía una luz muy fuerte. Corrí hacia ella, como si me indicara el camino. Cuando llegué a ella, se fue a lo alto del cielo y lo iluminó haciéndome daño en todo el cuerpo, incluída la cara. Estaba en el lago que había en mitad de las montañas, solo que este estaba congelado y yo podía andar por encima de él, mala suerte que este no aguantara más y comenzara a romperse bajo mis pies. Cuando se rompió del todo, me sumergí en el agua helada, que sentí como si me apuñalaran. Grité, pero nadie me escuchaba. Sentí dolor, pero nadie estaba ahí para socorrerme. Intentaba salir del agua, pero nadie me ayudaba...