Wigetta | Un secreto a voces...

Capítulo 11

-Narra Willy-

No me lo puedo creer, esto no puede ser cierto, es demasiado bonito para ser verdad, voy a despertar de un momento a otro y no quiero. Estoy tumbado al lado de mi compañero de piso Vegetta, que ya no es mi compañero de piso únicamente, él y yo guardamos otra relación ¿somos novios? puede ser, a veces la vida da una serie de giros y vueltas que te cambian radicalmente, quién pudo imaginar que el amor de mi vida iba a estar conviviendo conmigo, llamándolo amigo, nunca hay que dar por hecho algo que consideras obvio puesto que sin comerlo ni beberlo, todo lo que pensabas acerca de tus gustos se puede ver influenciado por una persona, quizás no sepa lo que es amar, pero seguro que tiene que ser algo parecido a lo que siento por Vegetta, al principio puedes que te sientas confundido y es lógico, es algo nuevo en tu vida y la sociedad en la que vivimos lo tacha de "asqueroso e inhumano" a esas personas retrógradas las invito a que se enamoren, pero que no se enamoren de una persona por lo que tenga entre las piernas, que se enamoren por cómo es y cómo siente, por como te mira día a día, por cómo se preocupa cuando te sientes mal, por como te hace sentir que existes y importas a alguien. Además no es algo que se elija o no, si te llega, te llega y creedme que es mejor abrir la puerta que cerrarla puesto que no sabes cuando volverán a llamarla. Es por eso que no me gusta llamarlo novio, sí lo es, pero para mí es mi vida, mi sonrisa de cada día como también mi enfado. Ahora entiendo mejor lo que es amar, es probable que ninguno de los dos estemos preparados para esto pero no tomamos decisiones según nuestras conveniencias, las tomamos en función nos dicta nuestro sentimientos.

Ambos estamos en boxers y él me tiene agarrado por la cintura. Puedo sentir su respiración en mi cuello. Los dos estamos agotados por lo de anoche, estoy flotando sobre una nube de dónde nunca quisiera bajar. Observo como mi compañero despliega los ojos y sonríe, este tipo es jodidamente sexy aún recién levantado. Se acerca a mis labios y los une con los suyos, era algo esperado por los dos, nos despegamos para poder abrazarnos. Vegetta se acercó a mi oído y susurró:-¿Has dormido bien chiqui? Me hizo gracia que me llamase chiqui, sonaba ridículo pero me hacía sonrojar. Yo le respondí: -No podía haber dormido mejor. Comenté a la vez que le dedicaba una sonrisa. Vegetta volvió a besarme una vez más y acto seguido se levantó de la cama, no quería que se marchase pero era cierto que teníamos muchas cosas que grabar para nuestro día a día en youtube. Me dirigí a la cocina para desayunar cuando vi a Vegetta con ropa deportiva, esa camiseta extremadamente estrecha hacía que se me hiciese estrecho a mí otra cosa, me giré para que no lo notase y abrió la puerta de casa: -Voy al gimnasio compañero, enseguida regreso. Dijo mientras agarraba las llaves de la mesita que se encuentra junto a la puerta. -Tampoco hace falta que regreses. Comenté en plan burlón, no quiero perder nuestra confianza de amigos a pesar de que fuésemos una ''pareja'' que extraño me resulta llamarlo así. -¿Qué harías sin mi chaval? Me voy anda... Ambos nos lanzamos una sonrisa y yo continué preparando los cereales. No sé si podría soportar que estuviésemos todo el día grabando sin poder vernos y tener contacto, es tan triste que tengamos que hablar a través de Skype teniéndonos a tan solo dos pasos. 

Estaba listo para continuar con mis que haceres cuando escucho un teléfono sonar, miré mi móvil y comprové que no pertenecía a mí la llamada, el sonido provenía del cuarto de Vegetta, vaya se había dejado el móvil aquí. Se que no debería coger las cosas personales de él pero lo cierto era que tenía bastante curiosidad por saber quien era. Me acerqué hacia la cama agarré el movil y ponía: Llamada entrante de Rachel <3. Se me cayó el móvil al suelo y yó caí junto a él.