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Mantuvo el cuerpo del alfa apegado al suyo dándole su calor corporal, había sido difícil acomodarse de manera en la que MinHo pudiera estar cómodo al tiempo que el menor pudiera estar recostado en el sofá, el omega no se rindió hasta lograrlo.

Ahora el alfa estaba casi dormido ya superando el momento de crisis, entre los brazos del omega mientras soltaba algunos quejidos muy bajitos que solo eran audibles, YongBok apenas los podía escuchar por la cercanía que mantenían.

Estaba preocupado, el estado de alfa a pesar de estar tranquilo lo preocupaba. Cada vez quería más a ese dulce, pero algo rudo chico. Si bien a veces no decía los mejores comentarios para la situación, o no sabía cómo reaccionar a ellas, su corazón es verdaderamente dulce.

El cuerpo del alfa se movió un poco buscando más conforte, casi buscando el aroma natural del omega aunque no pudiera sentirlo. YongBok lo estrecho más en sus brazos dejando suaves caricias en el cabello de MinHo, logrando que volviera a estar calmado.

— Hyung, hay muchas cosas de las que no le he hablado ¿Sabía usted que mi lobo lo adora mucho? Tanto a usted cómo a Dante, Lix tiene algo con ustedes —quitó algunos mechones del rostro de MinHo haciendo posible que la cicatriz del alfa fuera visible, no pudo evitar acariciarla suavemente con su dedo— Literalmente le debo mi vida a usted, mi nana decía que si le debías la vida a alguien entonces le debías todo hasta que le puedas devolver el favor —abrazó con cariño el cuerpo del alfa— Nana sabrá qué hacer con usted, estoy seguro de ello.

Su nana es una señora muy adorable, había cuidado de él muchas veces cuando escapaba de las garras de sus hermanos, también es la única persona que sabe su secreto, sabe que es cambia formas.

Esa señora le había enseñado cosas, cosas que nadie más le habría podido enseñar y fue la única persona en dar la cara por él cuando se presentó como omega. Ella es la única persona a la que extrañaba verdaderamente.

Durmió un tiempo antes de ser despertado por MinHo quien también había despertado. El mayor se veía desorientado y un poco atolondrado, ciertamente algo tierno para la imagen en general del alfa.

— ¿Qué pasó? ¿Cómo llegué aquí? —habló sentándose correctamente en el poco espacio que sobraba en el sofá.

— Pasó otra vez, ChangBin hyung lo trajo aquí —explicó YongBok sentándose igualmente— ¿Cómo se siente?

— Ya puedes hablarme sin honoríficos, Bokkie —se estiró en el sofá, causando que su espalda crujiera— ¿Cuánto dormí?

— Unas seis horas.

— Diosa luna...

— ¿Tienes hambre? —MinHo asintió con los ojos a media asta luchando por mantenerlos abiertos— Te prepararé algo ¿Bien? Luego tenemos que hablar sobre algo.

— ¿Te lastimé? —preguntó repentinamente despierto. No recordaba nada de lo que hubiera hecho antes de llegar ahí, no quería imaginarse que lastimó al omega sin saberlo.

— No, tranquilo —YongBok se levantó del sofá fue directamente a la cocina.

Cena que ya se podía contar cómo un desayuno pesado por las horas, MinHo no tenía más sueño, seguía un poco confundido por todo lo que había pasado. YongBok por su parte hablaba con su lobo para ver si su idea sería buena o tendría que abandonarla.

— Gracias por cuidar de mí —admitió el alfa mirando al omega directamente a los ojos— En serio, muchas gracias.

— No pasa nada, hyung —Yong le mostró una sonrisa para aligerar el ambiente.

Esperó hasta que el alfa termine de comer, luego de limpiar entre ambos y darse una ducha, fue entonces cuando se sentaron en la barra, cada uno de un lado. MinHo aún confundido y YongBok buscando el valor para hablar.

Broken TieDonde viven las historias. Descúbrelo ahora