____ levantó la cabeza confundida y miró fijamente la puerta. El pecoso suspiró sonoramente y aflojo el agarre de sus manos en la cintura de la muchacha
"Son tus amigas" comentó
La castaña se volteó a verlo, sus mejillas estaban rosadas y sus labios hinchados y tan rojos como la sangre, con sus manos cubrió sus pechos rápidamente al darse cuenta que no traía brasier, ya que su amigo la muerte lo había lanzado a algún lado del departamento. Finn chasqueó los dedos suspirando y ____ ya tenía su brasier color negro sobre sus pechos, perfectamente acomodado
"Iré a abrir"
"¿Tienes un baño en tu dormitorio verdad?" preguntó poniéndose de pie y caminando a la habitación de ella, afirmó poniéndose la playera "Me daré un baño"
Ella solo lo miró hasta que desapareció de su vista, por fin había logrado dar un paso con la muerte y sus amigas aparecían. Camino hacia la puerta principal y justo antes de abrir sintió el sonido de él agua caer desde su habitación, giró el picaporte y la imagen de sus dos rizadas amigas sonriendo notoriamente felices se presentó ante sus ojos
Finn gruñó mientras untaba shampoo en su cabello, siempre lo interrumpían cuando estaba con ella, con brutalidad fregó con sus dedos el líquido en su cabello, estaba enojado, muy molesto para ser verdad. Había tenido que tomar una ducha con agua fría para bajar su erección, porque por mucho que fuera la muerte tenía ciertas peculiaridades de los seres humanos.
Primero había sido ese muchacho Timothée y ahora sus amigas, las rizadas le caían bien pero en estos momentos quería interferir en sus porcentajes de vida y follar con ____ tan duro que ninguno de los dos podría caminar en días. Pero luego pensó en su inexperiencia con respecto al sexo, nunca lo había tenido, y nunca había tenido la necesidad que tenerlo, creía que era algo estúpido y cursi en algunos casos que hacían los mortales, pero Dios sabe cuánto lo necesitaba ahora
Mierda, mierda y más mierda
Debía hablar con Jack ahora mismo, antes de que él apareciera de sorpresa en la sala de ____ con sus dos amigas allí. Con rapidez enjuagó el shampoo y salió del baño, secó su cuerpo rápidamente y se vistió con unos jeans ajustados y un suéter
Chasqueó los dedos y ya estaba en el infierno. Pudo sentir de inmediato el aire pesado y denso moviendo su cabello oscuro, caminó hasta la casa gigantesca color rojo y entró
