Pov Ana
Te odio Katherine Kavanagh. En este momento podría estar en el sofá con un libro en la mano, estudiando para mis exámenes y no alistandome para conducir durante horas hasta Seattle para entrevistar a alguien que no conozco. No sé cómo haces para salirte con la tuya siempre. Tal vez fue la pena la que hizo que acepte esto. No soporto verte enferma y cuando lo estas siempre me convences de hacer cada cosa.
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Estoy camino a Seattle en el auto de Kate, llevo dos horas manejando. Creo que después de todo no será un viaje perdido. Luego de entrevistar a ese tal Grey iré a ver departamentos en renta, he aplazado mucho el tema de mi mudanza y estoy a menos de un mes de graduarme y no tengo donde vivir cuando venga a trabajar a Seattle. Creo que compartiré apartamento con Katherine pero no me gustaría estar mucho tiempo así. Me quiero independizar y tener un lugar propio y no estar arrimada con otra persona. Ya se verá todo a su tiempo. Por ahora me limitaré a conducir...
Mi celular suena y es mi madre. Pobre de ella debe de estar preocupada por mi. Siempre ha sido muy paranoica respecto a los autos, aunque la entiendo, perder a tu esposo y quedar en coma durante dos años por culpa de un ebrio que choca tu carro debe ser traumante. No?
-Ana, que bueno que me contestas, no podía con la preocupación.
-hola mamá, buenos días ¿como estas? - contesto sarcásticamente-
-lo lamento Ana pero sabes muy bien que no me gusta que manejes, te puedes accidentar.
-lo se madre, pero tenía que hacerlo. No podía dejar a Kate, lleva más de un mes tratando de obtener la entrevista y cuando la obtiene enferma - pobre de ella, pero se lo merecía le dije que no comiera helado después de haber hecho ejercicio- mamá, llegare un poco más tarde, quería ir a averiguar departamentos en Seattle.
-no te preocupes hija, pero yo creo que deberías quedarte aquí
-pero mamá, en Portland no hay editoriales.
-lo se hija, pero temo perderte.
-y yo a ti mamá. Me tengo que ir ya de me hizo tarde.
-suerte cariño
- gracias madre
Minutos después retomo mi marcha un poco más tranquila, ya que mi madre no puso objeciones. Pero ya no me queda tiempo para desayunar. Creo que primera haré la entrevista y luego desayunare.
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Pocos minutos después llego a mi destino: Grey enterprises House. Es un edificio muy moderno y a séptico. Es en este momento en el que me arrepiento no haber investigado nada sobre el señor Grey. Como puedo hacer una entrevista si no se nada de él. Esto será un desastre. Respiro hondo y tomo fuerza y valor para ingresar. Dejo de lada el mal presentimiento que atenaza mi corazón.
Luego de preguntar por en un modulo por el lugar donde será la entrevista, me dirijo a los ascensores. Veinte pisos después me encuentro frente a una estancia muy amplia pero un poco aseptica. Como quisiera que Kate me hubiera avisado con tiempo, no se nada del empresario al que voy a entrevistar. Me da miedo que todo quede mal y la entrevista se cancele. Kate estaría destrozada, lleva meses luchando por esta entrevista, como para que yo la venga a malograr. Cuando doy unos pasos en el salón, aparece una rubia que me toma por sorpresa. Lo que ocasiona que de un pequeño respingo.
Buenos días, ¿la puedo ayudar en algo?
Si, tengo una entrevista pautada con el señor Grey.
Me podría decir su nombre señorita...
Steele. Anastacia Steele. La entrevista esta pautada con Katherine Kavanagh. Pero ella no ha podido venir hoy. Y me ha enviado como reemplazo.
OK. Tome asiento
Luego de dirigirme a uno de los sillones en la sala, al parecer de espera. Puedo notar que desde mi ingreso, todas las secretarias son rubias, y todas bien vestidas. No encajó aquí. Mi falda y mi blusa parecen tan informales. Soy un desastre.
Cinco minutos después, la rubia secretaria me indica que puedo pasar a la oficina. Mis nervios ya alterados se incrementan más. Que voy a decir, si fallo la entrevista que le diré a Kate. Que va a pasar. Dios, Ayúdame.
Estoy tan sumida en mis pensamientos que no noto un pequeño escalón en la puerta de la oficina, hasta que estoy de bruces en el liso piso de mármol. Juro que si salgo viva de esta entrevista, voy a matar a mi amiga.
Cuando estoy tratando de incorporarme luego de mi aparatosa llegada, siento unas manos firmes que me toman por los hombros y me ayudan a ponerme de pie. Siento que mis mejillas me queman. Seguro que toda mi cara debe de estar roja.
Un momento después, decido levantar mi vista, antes fija en el suelo, y ver a quien me ayudó. Lamentablemente sólo puedo notar a un hombre de espaldas a mi, que mira atentamente el paisaje de Seattle. Creo que se da cuenta de mi mirada y voltea hacia mi. No parece ser mayor de treinta años, es muy apuesto, y es mas alto que yo. Este será el señor Grey?
Buenos días, señorita Kavanagh dice tranquilamente.
Buen día, señor Grey. No soy Katherine Kavanagh, mi nombre es Anastacia Steele. Estoy aquí en reemplazo de Katherine, que esta indispuesta hoy.
Mmmm entiendo. Tome asiento, creo que tiene una preguntas que realizarme.
Si. Le importa si grabo la entrevista.- digo con un tono bajo, este hombre es intimidante
No, puede grabar, no hay problema.
OK. Gracias- que nervios- que es lo que lo ha llevado tan ,lejos?
El apoyo de las personas que trabajan fielmente conmigo, la capacidad de relacionarse con otras personas que tiene mi mano derecha, mi capacidad de ver oportunidades en las empresas. En fin, es el conjunto de los conocimientos y experiencias de todas las personas que trabajan conmigo.
Mmmm. Interesante respuesta señor- es notorio que le tiene estima a sus trabajadores- ¿cuales son sus pasatiempos favoritos?
Pasatiempos. No tengo muchos. Pero consideraría que planear y navegar son los más importantes.
Planear?, ¿es que acaso usted sabe conducir un avión?
Si. Soy piloto de planeadores y helicópteros, Anastacia.
¿cree que la adopción durante su infancia, influye en su interés de ayudar a los niños del mundo? - fue adoptado?- dije en un susurro, pero me escucho.
Todo el mundo sabe que fui adoptado a los 4 años, señorita Steele. Y respondiendo a su pregunta, si. Si influye en mi decisión de ayudar a los niños. Viví en carne propia llama pobreza, el abandono y el hambre. No quiero que otros niños tengan que sufrir eso.
Oh.. perdón por mi pregunta, no lo sabía. ¿es usted gay señor Grey? - espera que dije. Releeo la hoja y mis mejillas, no mí cara completa esta ardiendo.- lamento preguntar, pero esta en la lista de preguntas- seguro que ahora me sacan de su despacho. Rayos Kate, por que debes preguntar eso.
No, no soy gay, Anastacia- esta serio, oh que hago ahora-
Señor Grey, su reunión empieza en dos minutos.
Salvada por la campana- Andrea, cancela la reunión, aun no termina la entrevista. - o no
Gracias señor Grey, por concedernos esta pequeña entrevista.
No, siéntate, aun no terminamos,
Qué rayos! No puede ser. Ya hice las preguntas, pero no me deja ir. Y si, y si me pregunta sobre mis conocimientos sobre el o lo que haya investigado. No se nada.
Quiero saber de ti Anastacia- se expreso luego de unos minutos.
Claro, que desea saber?
Contáme de tu vida, que estudias, tus gustos.
No hay mucho de que hablar. Estudio literatura inglesa en la USW, soy compañera de piso de Kate, y en lo referido a mis gustos, bueno solo me gustan los libros
Interesante. Quisieras conocer la empresa?
Ah.... no le estaría quitando el tiempo.
No, claro que no. Quieres?
Bueno, claro
El señor Grey no es tan frío como pensé, es amable, pero estricto. Pero eso se entiende, no. Es el dueño de una gran compañía, debe ser estricto con sus trabajadores. Al final del día, no pude ver ningún departamento. Luego de recorrer la compañía, el señor Grey me comenzó a explicar sobre las plazas de trabajo y prácticas en su empresa. Fue una gran oferta, que aún estoy considerando. Pero desde el lado bueno, Kate esta feliz por su entrevista.
Son la una de la mañana y desperté de un sueño raro, muy raro. Grey apareció en el, pero también fue un recuerdo, pero eso es imposible. O ya lo, conocía antes, lo dudo. Buenos a seguir durmiendo
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Encontrando el pasado
RomanceAnastacia una joven estudiante de literatura. Este año termina su carrera y ha decidido viajar a la capital del estado para trabajar. Christian es un empresario muy conocido en las telecomunicaciones. El destino los unió un vez, pero ahora sus vida...