Sin límites (Riren)

Capítulo 14

Al parecer el ¿Deseo? Bueno, la idea de hacerlo todos los días a cualquier hora se cumplió.

Desde hace unos días, ambos lo hacían ya sea en la mesa, suelo y más a menudo era en cada baño juntos. Ambos habían olvidado el asunto de que Eren podría quedar embarazado.

Tampoco sabían sus dias fértiles así que lo hacían de todas maneras, una vez luego de esa semana "loca" salieron, vaya que Levi no perdió oportunidad.

Ellos salieron a comprar su ropa ya que se acercaba la navidad.

Para ver si le quedaban tenían que ir a los vestidores ¿No? En ese entonces Levi se metió a uno, Eren estaba a fuera esperando pero el azabache lo  llamó por lo cual tuvo que acercarse...

En el momento que se acercó, Levi sujetó su brazo y lo jaló hacia dentro cerrando la puerta. De suerte había "seguridad".

-¿Que sucede? -Preguntó el castaño atento al azabache.

-Nada en especial... -Le contestó acercándose a el y le sujetó los brazos prisionandolos contra la pared.

-M'me duele... -Se quejó levemente mientras forzajeaba para que lo soltara.

-¿Y? -Respondió el azabache cerca a sus labios y prosiguió a besarlo con delicadeza. Su pierna estaba entre las del castaño así que se apegó más a el prisionando la entrepierna del otro.

-E'espera... -Musitó.- Aqui.. no.. -Susurró sonrojado y observando los ojos grises del contrario.- L'Levi...

-Sh, nadie molestará.. -Lo dijo de lo más normal, le soltó las manos para mandarlas a la camisa del castaño y luego se le quitó "E'eso es mentira.." Había dicho el castaño, pero el azabache lo ignoró, empezó a besar su cuello varoas veces y mordía cada vez que quería.

Leves quejidos escaparon del castaño, su cuello era una de sus partes sensibles por el cual provocaban jadeos en el.- Y'ya... basta -Dijo el castaño intentando apartar al contrario.

Fue en vano, las mordidas y lamidas por parte del pelinegro lo hicieron "encenderse",  y para su suerte, para la suerte de ambos poco a poco iban llegando más personas. Bueno eso no importaba en ese momento.

Las manos del azabache de dirigieron a los hombros del castaño y lo impulsó hacia abajo dejándolo de rodillas,  el castaño sabía que hacer, puso sus manos a la "obra".

Bajó la bragueta del pantalón del pelinegro y acto seguido bajó los boxers.. tomó aquel miembro en sus manos y empezó acariciar levemente, minutos después lo introdujo en su boca empezando a moverla de atrás hacia delante simulando pequeñas embestidas aquello no le entraba por completo debido a su tamaño pero cada movimiento hacia gemir con levedad al pelinegro.

Unas voces molestas se escuchaban a fuera pero ambos lo ignoraron,  estaban demasiado "ocupados" como para preocuparse por lo demás.

El pelinegro sujetó la cabeza del menor y la apartó jalandolo, si seguía así acabaría en su rostro y luego no habría como limpiarse..

El azabache puso de pie al castaño y besó sus labios sutilmente, después le dio vuelta dejándo su rostro contra la pared, sobre el espejo en todo vestidor había uno asi que nada se podía hacer "¡Hey! ¿¡No te entra o que!?" Y varias cosas similares decían las personas que estaban a fuera. En ese instante el castaño entró en razón y se miró en el espejo.- E'esto es... peligroso, no siga.. -Pidió suplicando pero bien que disfrutaba.- Sh, no hagas tanto ruido -Le ordenó el azabache y prosiguió a introducir su hombría en el interior del castaño, un gemido se escapó de sus labios pero cubrió su boca con ayuda de su mano.- No tan... brusco.. -Le pidió el castaño, el azabache tan obediente le hizo caso... caso omiso claro, empezó a embestir al castaño con gran fuerza,  varios gemidos fueron reprimidos de los labios del oji-verde pero no duró por tanto tiempo, el pelinegro ya conocía perfectamente el punto débil del castaño así que lo "acarició", en ese momento el castaño apartó su mano para colocarla sobre el espejo, sus piernas estaban temblando sentía que caería pero no le importó, gemidos un poco altos se escucharon dentro de ese pequeño lugar pero estaba demasiado excitado como para preocuparse por si lo oyeran o no. Una voz femenina se hizo presente "¿Todo en orden?" Había preguntado mientras golpeaba la puerta, "Todo bien.." contestó el pelinegro de lo más natural,.bueno hizo el intento perl logró convencer al chica.