Prólogo.
♫La primera vez♪
Alexander.
“Ella me gusta porque lleva un ángel en su sonrisa y mil demonios en su cabeza.”
Y sí, me rompieron el corazón.
¿La responsable del crimen? Emily Lauren.
El día en que la encontré, ella no estaba muy bien, y no, no hablo de su apariencia (En sí, era hermosa), estoy hablando de su autoestima, o mejor dicho, de su vida en sí. Estaba sentada en una silla, parecía como si estuviera a punto de llorar, pero hubo algo que me llamó la atención, tenía a Trent delante de ella, y se notaba que se sentía incomoda con su presencia, así que decidí salvarla. No, no te rías, fue su héroe, bueno, creo. De pronto fue un error, o lo mejor, pero lo hecho, hecho está. Por esa razón, estoy pagando las consecuencias de un gran malentendido.
Nunca fue mi intención enamorarme, siempre había tenido muchas detrás de mí, aunque nunca duraba más de una noche, no querían nada serio, y bueno, yo tampoco les iba a rogar. Mi mamá me enseñó que la mujer de mi vida llegaría en el día menos esperado y de la manera más extraña que pudiese imaginar, y en eso, sí que tenía razón mi madre. Esos típicos consejos de madre que nunca crees, y que al final de todo notas que siempre han tenido la razón.
Después de conocer a Emily, después de ver los ojos más hermosos, escogí una de las mejores excusas para seguir con ella, a su lado, había algo en mí que hacía que la anhelara en mi vida, mi corazón saltaba de alegría cuando notaba que sonreía, era la única que lograba sacarme esas sonrisas estúpidas de enamorado, y hasta algunas veces llegué a sentir las tan nombradas mariposas. Siempre hay un punto del hombre, que la encuentras, te enamoras de verdad, lo sientes tan cerca, el olor, el sentir que tu mente la necesita, sentirse amado siempre ha sido una de las mejores que ha podido existir, el problema está en que cuándo esa persona se va, deja un vacío tan grande que nada nunca te va a poder completar de la única forma en que ella podía, la vida no es máquina de deseos a tu antojo, me dejé llevar por sus palabras bonitas y sobre todo por lo que sentía por ella, me ilusioné con verla todos los días, nunca me imaginé lo que nos esperaba en este mundo de injustos, es tan difícil superarla, no puedo describirlo, es como quitar una parte de mi corazón que ya se había acomodado de tal manera que me hacía feliz, fue la primera vez que me traicionaron, y la única vez que sentí que era la indicada, cumplió mis expectativas, era todo lo que puedes pedir en una mujer, era una mujer que a la vez era una niña consentida, una niña que buscaba su camino en la vida, que luchaba contra miles de cosas diarias, que creía que era débil, cuándo era mucho más fuerte que yo, la mujer con la más hermosa sonrisa que pude ver en mi vida, y también con la peor autoestima que conocí, tenía tantas cosas que era difícil ver porque no se quería ella misma, los hombres que amamos de verdad, los que existimos en esta faz de la tierra sin estar mirando en físico, entonces nos dan una puñalada por la espalda, y ya jamás volvemos a ser los mismos, cuándo te traicionan te queda una marca de cómo se siente el dolor, y ya nunca quieres volver a sentir esa cosa, te alejas tanto, que ya no piensas en enamorarte, sino que piensas que nada vale la pena, tal vez cuándo yo me rinda buscando a esa persona, en ese momento al fin la encuentre, o de igual forma puede ser, que solamente fuese Emily. El amor de mi vida que se esfumo de mis manos como el humo, que se va, deja una marca en tu vida, pero que se va porque tal vez no le di lo que ella merecía realmente, ¿Sería esa la razón?, desapareció de mi vida, se fue, simplemente cogió otro rumbo sin siquiera dejarme con algo, me quito todo lo que tenía, se llevó lo más valioso que tenía en mi vida, ella misma.
Cada día era peor, me enamoraba más y más, hasta que Emily se convirtió en lo único que quería en toda mi vida, la quería ver a toda hora, quería hablar con ella durante horas, y sobre todo, quería cuidarla de lo que fuera que la estaba persiguiendo. Siempre he tenido un genio complicado, en un momento estoy bien, y al otro ya estoy gritando a todo el mundo, no poseo autocontrol, y normalmente me estresa cualquier cosa que no pueda controlar por mi cuenta, a pesar de todo lo que le hice, se quedó a mi lado, por eso me extraño cuándo se fue de mi lado, fue lo último que me esperaba de ella.
Yo era su ángel, el que la cuidaba de cualquier idiota que intentara acercarse a ella, el que estaba con ella es las buenas y en las malas, le jure que la amaría para siempre, y en verdad que lo voy a cumplir. ¿Esto es masoquismo? Mira, llámame como quieras pero tú no te enamoraste, y si lo has hecho entonces comprenderás que a veces el amor te vuelve algo estúpido. Sin embargo, el amor en sí, en necesario, así que todos somos estúpidos, si a eso quería llegar, todos han sufrido por amor, pero ellos mismos han buscado enamorarse. Todos pensamos lo mismo cuando vemos a una persona enamorada o cuando tenemos que aguantarnos a nuestros amigos enamorados, pero cuándo tú eres el enamorado, las cosas son diferentes, ¿No?, mis amigos estaban cansados de tanto escuchar de ella, pero es que era difícil sacarla de mi mente, es como si más se aferraba a mí. Como si me necesitara.
Todo lo que empieza bien, no siempre termina bien, yo creía que ella me amaba de verdad, es más fue la primera vez que yo amaba una mujer de tal manera, la primera vez que toqué sus manos me di cuenta de que era ella, no había más por hacer, ya era otro estúpido en el mundo. No había marcha atrás, había empezado algo hermoso con un final devastador.
Emily, me dejó sin siquiera decirme por qué se iba, le pedí una explicación, sólo supo decir que era lo mejor para los dos, y el problema es que ya jamás sabré si en verdad yo era el único enamorado. Todos los días me levanto pensando en que volverá, y todo será como antes, pero siempre termino defraudado al saber que ya ella se fue, si fue por otro hombre, en realidad hubiera querido que me lo hubiese dicho, al menos sabría que no la quise lo suficiente, o que simplemente el destino nos quería separar, y lo logró. Es sólo que el destino no es el que tiene el corazón roto, yo sólo digo.
Pasan los días y cada día es peor que el anterior, su sonrisa quedó grabada en mi mente, y no logro sacarla de allí, pero ese no es el mayor problema, mi mayor problema es que ella se metió en mi corazón y nadie podrá sacarla de donde está refugiado su recuerdo. Cada día trato de salir adelante, de ser fuerte y superar esto, pero poco a poco las lágrimas llegan sin más y no puedo contenerme, saco lo que tengo dentro, el dolor que no se acaba, y me maldigo por no poder sacarla de mi jodido corazón. Tengo un vacío emocional en mi ser, y de pronto todo esto es mi culpa, o tal vez es la suya. Aunque no sirve de nada culparla o culparme, me sentiría mejor si me hubiese dicho la verdad desde un principio, lo hubiéramos superado juntos. Hubiéramos luchado, yo hubiera estado allí.
Después de lo que hizo, sigo pensando en que ella es la mujer de mi vida, y no logró ni siquiera imaginarme tocando otras manos, o diciéndole que es lo mejor de mi vida a otra. Dime como quieras, masoquista o cursi, créeme que si tu amas de la forma que yo lo hago, entonces entenderás, o si eres de esos chicos que sólo buscan a una chica para una noche, terminarás mal chico, te lo digo yo. De lo contrario, si eres de esas chicas que sólo busca romperle el corazón a otro con celos, tu destino no es diferente. Siempre llega esa persona que nos emboba, que nos hace sentir especiales, que nos enamora, y a pesar de que siempre decimos que nunca seremos cursis, terminamos siendo unos poetas de primera. Aunque no siempre esa persona es la correcta.
“Estaba roto
Me sentía vacío sin vida
Sabía que nadie
En el mundo como yo
La querría nunca”.[1]
[1] Canción de porta: La primera vez (Con Gema), Álbum: Algo ha cambiado, 2014<3.
