Veneno

1.9K 217 28
                                    

Narra *******:

Fui a solicitar que se le llevara algo rico a la paciente para que fuera a cenar, después me puse a caminar, no podía acompañarla mientras ella comía, porque mi estómago me delataría que no había comido nada y no quería incomodar. 

 Sin saber a dónde ir, me senté en una de las bancas que había en los pasillos a esperar a que el tiempo pasara, estaba cansada, tanto física como mentalmente, como no había podido salir de la clínica, tuve que dormir aquí, y no había nada mas incómodo que dormir aquí, y, eso junto al hambre, enojo y sorpresas desagradables, ayudan al cansancio mental.

Apoye mi cabeza en mis manos, mientras que mis codos se encontraban sobre mis piernas y cerré los ojos mientras intentaba descansar, aunque fuera un momento.

Después de un pequeño momento, escuche unos pasos que se acercaban en mi dirección, pero, aun así, no abrí los ojos ni levante la cabeza. Los pasos se detuvieron frente a mí, y al tiro me prepare para escuchar la voz del gigantón diciendo alguna tontería. 

-Disculpa?-  me sorprendió escuchar aquella voz, la cual no era del gigantón, levante la cabeza, y me encontré con el chef egocéntrico. Se veía algo incómodo, pero antes de que le preguntara que es lo que necesitaba él hablo- me puedo sentar?

- …- no sabia que decir, tampoco tenía excusa para decirle que no, aunque no me agradaba la idea- adelante- respondí después de meditarlo un poco

Ambos estábamos en silencio, el silencio era muy incómodo, no sabía que decir, y tampoco sabía porque él se encontraba aquí 

-No me gusta ver a la gente comiendo ese tipo de comida, pero, perdón por haberla tirado a la basura, sé que tenías hambre- dijo de la nada, no sabia que responder, solo asentí con la cabeza- t..te traje esto- una vez dicho esto- saco un pocillo de comida de su mochila 

- gracias- dije mientras la tomaba, me sorprendió su acción, ¿Qué no me odiaba? Aunque no confiaba del todo en su acción. Lo quede mirando por un momento y el parecía no entender el porque- cual es el truco?

-que?- actuó como si no supiera que estaba preguntando 

- me lo vas a cobrar? Tiene algo extraño? Veneno?- lo mire amenazante

Mis preguntas anteriores al parecer lo hicieron enojar, al nivel que quito el pocillo de mis manos y lo guardo.

-Yo intenté disculparme por dejarte sin comida, fui a mi restaurante para cocinarte mi especialidad, para que después, de intentar se lo mas cortes posible, TU vinieras a pensar que yo seria capaz de ponerle veneno a la comida. Sabes, de verdad estaba intentando llevarme bien contigo, conocerte y comprenderte, pensé que de verdad estaba siendo demasiado injusto contigo y que te estaba juzgando de ignorante, pero me equivoque, eres una mocosa inmadura que no aprecia nada.- dijo molesto para luego comenzar a marcharce

Me quedé en silencio, no sabía que hacer, no se cómo la situación se invirtió y terminé de alguna forma siendo la culpable.

No se porqué comencé a sentir que está sería la única oportunidad para poder intentar calmar las aguas y hacer está situación un poco más agradable y, a medida él daba un paso más, esa oportunidad se iba desvaneciéndo lentamente.

Tenía dos opciones, tragar mi orgullo e intentar arreglar la situación, o dejar que está situación se mantuviera o empeorará, pero el mayor problema no era la decisión que tenía que tomar en ese momento, sino el sentimiento de culpa de haber causa está situación por solo insinuar que tenía veneno.

- Espera!- había tomado la decisión más obvia y racional, evitar más conflictos. Él, no se detuvo, solo me ignoro- Lo siento!- le grite al ver que ya estaba relativamente lejos y en ese momento se detuvo. No sabía que más decir, demasiadas ideas aparecían por mi cabeza como para escoger una, así que solo me quedé en silencio.

Volteó a verme como si fuera superior o es que así era su cara? Ya no estaba segura, ese hombre tendría otro tipo de expresión que no fuera esa cara egocéntrica?

- Lo siento porque? -dijo intentando que yo dijera algo más, enserio me iba hacer decirlo?

-Por decir que tu comida podría tener veneno - me sentía niña chica

- Y?- insistió para que agregara algo más

- Es solo por eso! No tengo nada más porque disculparme, no te intentes hacer el listo- le dije cruzando los brazos.

Al ver mi reacción, sonrió y se rió levemente para posteriormente comenzar a acercarse

- si que debes tener hambre como para pedirme disculpas - dijo riéndose en mi cara

- Eso no tiene nada que ver! Además, tampoco es que tuviera tanta hambre, es más, quédate con tu comida si quieres - mentí, estaba muriendo de hambre, pero todavía me quedaba algo de orgullo

- Ah? Enserio? De verdad estás segura de lo que dices? De verdad sabes quién soy yo?

- Si! Tengo más que claro quien eres tú

- y estás segura de que quieres perder la oportunidad de comer un plato de mi comida, gratis?- me dijo riéndose como si no creyera lo que estaba pasando

- baja el ego, por favor - antes de que pudiera decirme algo, mi estómago volvió a sonar, Aló? Orgullo? Dónde te fuiste?

- JAJAJAJJA- se comenzó a reír a carcajadas- dijiste que no tenía hambre

-Callate! El estómago a veces suen... -volvio a sonar mi estómago, generando que se comenzará a reír a un más- enserio?! Porque me traicionas maldito??-le grite a mi estómago

- toma- él había sacado el pocillo y me lo estaba volviendo a pasar

Cogí el pocillo y lo mire por un momento, para luego, volver a mirarlo a él, era raro verlo riendo y sonriendo, no le quedaba mal, se veía mejor sonriendo y riendo que con su cara de egocéntrico, es sorprendente saber que tiene otra cara que no fuera esa

- Que me miras?- me dijo sacándome de mis pensamientos- acaso me consideras atractivo?- su cara de ego había vuelto

-No, solo me sorprendió que fueras capaz de sonreír, pensé que los robots no podian- me comencé a reír después de terminar la frase, lo que había dicho, no era del todo cierto, si lo encontraba atractivo, pero no sé lo iba a decir solo para llevarle el ego.

Entrecerró los ojos, cualquier externo diría que estaba enojado conmigo, pero el aire en el ambiente, de alguna forma era diferente.

Luego me acordé del pocillo que tenía en las manos y lo entre abrí para observar que era lo que había en su interior.

- No te lo vas a comer?- me pregunto al ver lo que estaba haciendo

- Si, pero no sé si debo calentarlo

- Esta hecho para que te lo comas ahora, no tienes que hacer nada- me dijo algo frustrado, se notaba que estaba intentando tener algo de paciencia

- mmm.... Bueno... En ese caso...- me di la vuelta y me puse a caminar, sin que él entendiera que acababa de pasar

- a dónde vas?- me preguntó al ver que me alejaba

- a una mesa para poder comer tranquila, no vienes?

Él no respondió nada, solo caminó en la dirección en donde yo me encontraba, y yo continue mi camino.

No sabía lo que era el contenido del pocillo puesto que no lo alcance a observar bien, pero estaba segura que tendría que ser algo relacionado con Vegetales y/o legumbres.

Después de todo, yo sabia muy bien quien era él, él era el maestro de las legumbres, Kojiro Shinomiya, de la generación n° 79, y yo había sido de la generación n° 78, la generación prohibida.

El chef y la Doctora (Kojiro Shinomiya- Shokugeki No Soma)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora