Un novio de mentiras

22. Vᴇɴᴛᴀ ᴅᴇ Pᴀsᴛᴇʟᴇs.

Viernes.

Me preparaba para la venta de pasteles que comenzaba a las 6 de la tarde, habíamos quedado con Lluvia de que ella haría el pastel, obvio que el jurado haría preguntas de cómo lo preparamos, Lluvia nos prepararía para responder de una forma natural, ella había sido nuestra intermediaria con Harley, quien estuvo de acuerdo con todo.

Sobre mi madre, cada vez se le nota a la barriga, al parecer ya tenía más meses de lo que imaginábamos, y si, le conté de que había perdido mi celular, no tenía ni idea de donde lo vi por última vez ¿se enojó? Demasiado, tanto que dijo que no me compraria otro, después de tantos regaños acerca de la responsabilidad dijo que tal vez lo pensaría, Sebastián intervino mucho en el momento que mi madre me regañó una vez más por la pequeña y para nada importante pelea, con Harley, y pues con mi celular perdido, esperaba que no le sirva de nada al que lo encontró, estaba muy segura que nadie podría descubrir mi nueva contraseña, eran muchos números que recordaba bien.

La sudadera fina y blanca quedaba bien con mi vestido amarillo, que era un poco chiquito pero muy cómodo y recogí mi cabello de forma natural.

Mi madre estaba recostada en el mueble, aun no se olvidaba de todo lo que había hecho en el mismo día, su cara lo decía todo, admito que rompo récords en perder, extraviar y descuidar celulares.

***
El lugar estaba atestado de alumnos y padres de familia, alcancé ver desde la lejanía mi puesto, Lluvia lo había decorado de colores muy vivos, estaba muy bonito, los pasteles se veían deliciosos.

-Hasta que al fin llegas, tengo que irme, si me ve la directora ayudándolas, me meteré en problemas. - Harley estaba al otro extremo de la mesa, con su celular. - recuerda, si preguntan cómo hiciste el pastel diras-

-Que es un pastel dulce con zanahoria machacada y mezclada en la masa. La zanahoria se ablanda en el proceso de cocción, y la tarta suele tener una textura densa y suave.

-Este pastel siempre gana, adiós. - se despidió dejándonos sola.

-Hola chicas, quiero una porción. - Keyla, mi compañera de clases, dijo mientras buscaba dinero en su bolso. - es bueno verlas juntas y que no estén agarrándose del cabello. - seguramente se dio cuenta de su comentario, pues nuestras miradas hacia ella no están muy buenas.- Mmm, dejé mi dinero en el carro, ya vuelvo.

Se alejó tan rápido como le era posible.

-Perfecto, ahora perdemos clientes por tú culpa. - Harley fue directa.

-Lamento decirte que también fue tu culpa.

-Har-Harley, que lin-linda estas.-Carls un chico tímido, que siempre me pasaba las tareas, dijo un poco avergonzado, sus mejillas lo delataban. Él era lindo y tierno.

-Carls vete si, tu existencia me desespera.

No necesitaba estar un par de horas para saber de que manera trataba Harley a los chicos que no le interesaban, era realmente dura y egoísta.

Después de varias ventas, solo quedaba el pastel que probarían los jueces, que estaban a una mesa de nosotras.

-Oh, aqui están, moría por probar el pastel que hicieron juntas. - dijo la directora recalcando la palabra "JUNTAS" que tan obvio era?. - primero ustedes señores.

Miró a un señor calvo y mayor, el se acercó y saludo amablemente, le dimos pastel a todos, eran dos jueces y la directora, que aún no sabía si su voto también era válido e importante.

Parecía que eramos la última pareja, ya que se despidieron y fueron a su mesa, empezaron a charlar, escribieron algo en un papel, lo metieron en el sobre y lo enviaron con Tim, el señor que se encargaria de dar a conocer los primeros lugares.

-Buenas noches a todos. - miró el sobre de forma divertida. - en este sobre están los nombres ganadores, para decir verdad probé muchos de estos pasteles y estaban deliciosos.-abrio el sobre, mientras todos estábamos atentos. - el primer lugar es para Mónica y Axel, felicidades chicos, ese pastel de arándanos estaba muy bueno, el segundo lugar es para... Cris y Tammy, felicidades. - cruzaba mis dedos, sin darme cuenta lo mucho que quería ganar. - el tercer lugar es para Astrid y Harley, felicitaciones chicas. - todos sabían de nuestra pelea, así que nos miraron curiosos, querían ver nuestro abrazo de victoria, Harley simplemente se giro y comenzó a recoger todas las cosas.

-Astrid.-mi vecino, me habló.

-Hola.

-Querrías acompañarme un rato afuera, por... favor. - Esta vez el egocéntrico chico no estaba, solo había un chico interesado en alguna cosa que no sabía.

-Lo siento, estoy ocupada con esto.

-Harley es una buena chica, creo que puede con eso sola, cierto Harley. - Harley asintió sonriendo, algo que me sorprendía.

-Claro.

Seguí a mi vecino un poco desconfiada, desde que conocí a Julian supe que mejor estaría distanciandome de él. Ni siquiera sabía porque acepte a ir con él.

-Estás muy callada.

-Es porque no hay mucho en común entre nosotros.

-Eso es porque siempre me rechazas.-porque no me gustas. - creí que si estábamos, lejos de tanta gente podríamos hablar mejor.

Miró detrás y luego se acercó de improvisto, sus labios eran demandantes, sus manos me tomaban del cabello, groseramente.
Me aparté, furiosa, siempre le había dejado en claro que no me gustaba, de ninguna manera.

-No vuelvas a hacer eso, la próxima vez te daré un golpe.

Me aleje de él, sin importar nada, observe que Eric, a quien no había visto en varios días, justamente en enfermería, desde esa mañana habíamos perdido contacto por muchas razones, lo alcancé.

-Hola, perdido.- pensé que no voltaria, hasta que lo hizo, parecía irritado e incomodo por algún motivo que desconocía.- necesitaba hablar contigo.

-Si, de hecho tengo que irme.

-Oye, que te sucede?

Tomé su mano para que no se fuera, pero la sacudió de forma bruzca.

-TÚ, ESO PASA.

Gritó, ganando varias miradas de padres de familia.

-Si, necesitas hablar conmigo, podemos hacerlo en otro lugar. - antes, mi antigua Astrid, lo hubiera mandado a la mierda, pero la nueva Astrid, había cambiado, de cierta manera era verdad, y estaba tratando de ser amable.

-Se terminó, feliz?. - se marchó sin permitirme preguntar, aquella decisión me había descolocado, lo admito, habían muchas dudas en mi cabeza, acaso el ya hablaba con Harley? Eran amigos?.

Lo seguí, una vez más, solo necesitaba una explicación, no me gustaba, claro que no, esto solo era un trato...
Llegamos al estacionamiento, cerca de su carro.

-Estas bromeando? Eso es todo? Ni amigos?. - quería interrogarlo, necesitaba saciar mi curiosidad.

Antes de subirse a su carro, busco mi mirada, ambos nos observamos, su mirada era triste y afligida, mis ojos suplicaban que no se fuera.

Pero él solo subió a su carro, cerró su puerta tan duro, que se podía escuchar hasta mi casa. El chirrido fue lo último que escuché de él.

Algo en mi corazón se estremeció, me había fijado, que todo este tiempo me había estado enamorando, no quería admitirlo, no cuando te propones a no hacerlo, pero igual lo haces, es muy difícil admitir algo que negaba, mas cuando estoy al tanto de lo orgullosa que podía llegar a ser.
No tenia una mínima idea de porque todo había acabado, sin explicaciones.

Tal vez el único error, fue mío, desde el principio teníamos clarisimo que esto era una tregua, un trato o como sea, la única certeza en todo esto, era que había roto mi propia regla.

Enamorarme.

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Quisiera ser un asiento de coche para cargarme esas nalguitas. ^o^
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