-abre los ojos lentamente viendo un techo borroso y desconocido. Voltea su cabeza lentamente intentando encontrar algo que le resultará familiar. Mientras recuperaba su vista notaba un hermoso escenario de flores amarillas bailar con el viento- Yamabuki -susurra y pequeñas lágrimas bajan por sus ojos-
-veia a una chica de cabello negro sonreír. Luego veía a un niño llorando y gritando algo. Mientras agitaba sus ropas llenas de sangre-
¡¡Otosan!!
-abre los ojos sorprendido y se levanta bruscamente- Mi hijo! -intenta levantarse pero su cuerpo no obedecía, en ese momento sintió una mano suave. Usando una hermosa gentileza en acostarlo de nuevo, estaba lleno de sorpresa que su cuerpo obedeciera a ese gesto. Miro hacia el lado que provenía, viendo a un joven de cabello verde a amarillo. Sus ojos afilados pero gentiles como el ámbar lo miraban fijamente-
Debes descansar, apenas te recuperas -dice suave casi en un gentil susurro-
Quien?...eres?... -susurra débil y ve a esa persona cerrar sus ojos después de esa mirada tan fija-
No es necesario -toca la frente del contrario y saca una botella de sake- Con esto podrás recuperarte por completo
-alza una ceja sin comprender y da un sorbo al sake servido. En ese momento sintió que recuperaba sus energias. Pero a su debida velocidad, luego alza su mirada sin verlo de nuevo. Mira por todos lados intentando encontrarlo. Hasta verlo sentado en el pasillo donde estaban las flores yamabuki que bailaban en el jardín. Sentía que lo conocía pero recordaba bien, además que poco a poco llegan sus memorias. Desde que era un bebé hasta su día de morir pero sobre esa persona que estaba solitaria no podía recordar. Es como si alguien estuviera bloqueando sus memorias-
Mantente tranquilo, pronto te recuperaras y volverás con las personas que te esperan -susurra sacando una pipa negra con los metales de color oro comenzando a fumar- <<Aki...>> -entrecierra sus ojos con dolor mientras expulsaba el humo hacia el cielo nocturno-
++++
Abuelo: -abre los ojos sorprendido observando los ojos del contrario ser amarillos que cambiaban a púrpura. El color de antes y el cabello ser blanco puro de nuevo- A-Aka, es enserio? -dice con más dolor, no esperaba que la primera persona que amó. Allá tenido un hijo con él, su primer hijo que lo vio tantas veces pero nunca supo que era suyo-
Aka: Lo siento....-susurra con dolor mientras extendía su mano hasta tocar el rostro de su amigo y amor-
Abuelo: -toma la mano de Aka mientras más lágrimas bajan por sus mejillas. Recordaba que en la era Edo Kiiro se sacrificó en la batalla salvando a su hijo. No esperaba que ese hijo protegía a su hermano menor- Kiiro...¿lo sabía?
Aka: Si...siempre lo supo...y siempre te admiró... -sonrie levemente- A pesar que no lo reconocías como hijo hasta hoy. Siempre te a visto como su figura paterna a pesar que estabas lejos. Siempre lo haz inspirado, no era un niño que expresaba sus sentimientos. Pero...siempre estuvo ahí....cuando supo sobre el nacimiento de Rihan no te culpaba. Se sabía la historia de nosotros y desde entonces protegió a tu hijo y al suyo. Siempre estuvo ahí para todos como la sombra que era
Abuelo: -suelta risitas mientras sus lágrimas se detenían lentamente- Realmente llevaba mi sangre, ¿eh?
Aka: -sonrie levemente y se sorprende al recibir un beso de nuevo- Nu-Nurarihyon -pero es callado con otro beso-
Abuelo: Crees...que...lo pueda ver? De nuevo? -dice triste y nervioso, pero mostraba una calma en los ojos-
Aka: -lo mira fijamente mientras se sentaba y lo abraza con una ligera sonrisa- Algún día lo verás de nuevo -susurra en el oido del contrario en medio de la oscura habitación con los pequeños rayos de la luna-
++Al día siguiente++
Rikuo: -abre los ojos viendo el techo de su habitación y en ese momento. Frunció sus ojos al sentir un dolor punzante en su pecho. Fue tan horrible pero fugas, aún así le dio tiempo para suspirar de dolor. Mira de reojo notando su mitad durmiendo en su cama-
-abre lentamente los ojos viendo a Rikuo viéndolo fijamente. Se sorprendió que cubrió la cara de este- Odio eso... -dice molesto aunque lo decía para ocultar su vergüenza-
Rikuo: -una ceja le tiembla por esta acción que para su concierne le era molestosa. Suspiro para calmarse y alejo la mano lentamente mientras se sentaba. Hasta que la puerta fue abierta bruscamente-
Tengu: Joven amo! Le a llegado una carta del clan Oni! -dice alterado pero se detiene casi congelado viendo las miradas penetrantes de los dos-
Rikuo: -suspira silencioso- Damelo -extiende su mano sobre su mitad. El cual se cubría de nuevo, tenía un cansancio extremo. No sabía si era por lo que le estaba sucediendo a los dos o era una cosa que desconocía-
Tengu: Aquí tiene -entrega de forma respetuosa y se va tan pronto sale de la habitación-
Rikuo: -abre la carta y comienza a leerla pero al final suelta un bufido- Quieren retactarse
Y tú quieres aceptar? Te conozco bastante bien como para saltar al lado "seguro" -dice burlón mirando a Rikuo pero sólo miraba seriedad-
Rikuo: E aprendido que no puedes ser blando todo el tiempo, me lo haz enseñado -deja a un lado la carta del clan que estaba en contra de ellos- Traigan papel y tinta -dice en forma de orden-
-mira a los pequeños yokais traer un pequeño escritorio a la cama. Dejando papel y tinta recién echa en el escritorio. Viendo al mismo escribir rápido en el papel- Cuanto tiempo le darás antes de la batalla?
Rikuo: Dos semanas, no sabemos que nos sucederá -termina dibujando el logo de la familia en la portada y mira de reojo- Tengu!
Tengu: -aparece rápidamente al ser llamado- Si joven amo?
Rikuo: Entregalo -dice entregando la carta y verlo volar rápidamente. Pero puso su mano en su pecho al sentir un dolor más profundo que el anterior-
Estas bien? -pregunta alzando una ceja pero ve la mano de Rikuo levantando la mano dando a entender que si-
Rikuo: No te preocupes -dice intentando ocultar su dolor en su voz. Mira el espejo que estaba al final de su habitación pero frente a su cama. Veía su rostro transformarse como el de su mitad. Su cabello cambiando de color rápidamente. No sabía por qué pero sentía que todo iba muy rápido. Se deja caer otra vez suspirando pesadamente-
Eres un horrible mentiroso -dice burlón-
Rikuo: Me lo dirás muchas veces hasta que se grabe en mi celebro? -dice con una ligera sonrisa y ve la puerta abrirse. Notando que era Aki con un kimono blanco sencillo-
Aki: Ya pensaba que era raro no verlos fuera -sonrie levemente y se sienta cerca de las cabezas de los chicos. Pero no esperaba que ellos se acomodaran muy rápido en sus piernas- E-Eh? -los mira sorprendido pero al verlos que poco a poco se quedaban dormidos. Como si su ser fuera un completo consuelo, suspira y acaricia las cabezas de los chicos sonriendo levemente-
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El susurro de los cerezos
Hayran KurguDesde los tiempos antiguos los humanos han temido a los yokai. El que tenia el liderazgo y poder de gobernar el Desfile Nocturno de los Cien demonios. Es llamado el Comandante Supremo de los yokai. Pero tenia otro nombre para sí. El Señor de Pandemo...