6. ✅

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Christopher se confundió al despertar en la misma posición. El abrazando a Joel, Joel aferrándose a él. Estaba tan confundido. ¿Qué demonios fue lo que pasó anteriormente?, ¿había estado soñando?, diablos.

Estuvo a punto de despertar a Joel, pero lo único que logró fue acariciar sus rizos. ¡Vamos, es adorable cuándo duerme!.

Sus mejillas carmesí, labios carnosos y casi del mismo tono que sus mejillas, pestañas largas y onduladas, rizos cayendo sobre su cara y su barba que a critica de Chris, le hacía ver aún más tierno.

- Chris... - susurró éste.

- Mh... - dijo queriéndole decir que prosiga. Hubo un silencio.

- Creo que te amo... - murmuró entre ronquidos, haciéndolo inaudible para el castaño. El cuál solo se dignó a fruncir el seño.

Chris confundido, sólo cerró sus ojos y intentó volvir a dormir como el otro chico, que en realidad si estaba consciente.

En minutos, Christopher dormía profundamente. Joel aprovechó para salir de su agarre. Al momento de querer levantarse, el castaño lo apretó más, juntando sus cuerpos. No hizo nada en contra de esta acción.

[...]

- Joel, basta. - rió el castaño tratando de alejar al menor.

- Oh, creí que eras más divertido. - se sentó en el regazo del contrario, haciendo que se ponga rojo. - ¿porqué...? - lo recalculó. - ¡Chris, no en esa manera!. - le pegó levemente en el hombro.

- Si, claro. - rió. Pero comenzó a reír más fuerte cuando comenzó a sentir cosquillas en su panza.

- ¿Qué haces?, ¡no, no!. - trató de zafarse cuando Chris comenzó a hacer lo mismo. Cayó boca arriba en el sofá, mientras Christopher se tiraba sobre él.

Ambos no paraban de reír.

[...]

Christopher no contestaba las llamadas, tenía el teléfono apagado. Los chicos estaban preocupados por ésto. Llamaron más de mil veces a su amigo, pero su buzón de voz sonaba en su lugar. Richard caminaba de un lado a otro totalmente nervioso, Erick trataba de mantener la calma con ayuda de Zabdiel.

- No contesta hace más de una hora, una hora, una hora... - hablaba el moreno.

- Seguramente fue de fiesta. - dijo Zabdiel normalmente.

- ¿¡A las diez de la mañana!?. - se exaltó Erick.

- Oye, conoces a Chris igual que yo. Cualquier hora es perfecta para ligar varias. - volvió a masajear los hombros del ojiverde. El cuál admitió que el rubio tenía razón.

[...]

Segundos que parecían horas haciendo contacto visual entre ambos. Sólo querían congelar ese momento, pero ninguno de los dos mencionó nada. Chris sobre Joel, Joel sonrojado pasando sus brazos por el cuello del mayor.

- C-Chris... - habló. - permiso. - puso sus manos en el pecho de Chris, tratando de alejarlo. Pero éste acercó más sus rostros. El menor se quedó con la cara peor que mil tomates juntos.

Sus respiraciones chocaban, Chris con su vista fija en los ojos del menor. Poniéndole más nervioso. Se acercaron mutuamente, haciendo pequeños roces con sus labios. Chris acabó con la poca distancia, uniendo sus labios en un beso lento.

- ¿¡Christopher!?. - tres voces totalmente reconocibles hablaban desde el otro lado de la puerta. Joel se separó con lentitud.

- ¿Qué haces?. - preguntó el castaño confundido.

- Chris, están golpeando la puerta. - murmuró.

- Si, ¿algún problema?. - sonrió volviendo a unir sus labios, los cuáles volvieron a ser separados.

- Deberías abrir... - lo interrumpió.

- Les abriré cuando tenga mis debidas ganas. - sin esperar respuesta alguna; estampó sus labios con los del menor. Siendo correspondido al instante.

En un pequeño movimiento, Chris se encontraba debajo de Joel. El cuál lo atraía más hacía él tironeando de su camisa.

- ¡Chris!. - reconocieron la voz de Richard, pero igual que antes, ignoraron. Chris mordió levemente el labio inferior de Joel, haciendo que suelte un jadeo leve, aprovechando esto para comenzar una batalla entre sus lenguas.

Lentamente la camisa de Chris fue desapareciendo. Se separaron por aire, juntando sus frentes.

- Joel... - dijo Chris sentándose en el sofá, dejando al recién nombrado sentado en su regazo. - júrame que nunca vamos a olvidar esto. - unió sus labios enseguida, mientras Joel sonreía en medio del beso. El rizado comenzó a hacer movimientos sobre la entrepierna del mayor.

- ¿¡Christopher!?, ¡si estás ahí y no quieres abrirme vas a ver, pendejo!. - gritó quién parecía ser Erick. Los dos rieron en silencio.

- Uno aquí no puede hacer nada tranquilo. - rió Chris para enredar las piernas del menor en su cintura y subir las escaleras. Todo sin dejar de besarlo. Entró a torpes pasos en la habitación y lo dejó en la cama.

En un movimiento rápido, se deshizo de su jean y zapatillas, quedando en ropa interior. Joel se levantó de la cama y caminó velozmente hacía el castaño. Nuevamente enredando sus piernas en la cintura del otro y volviendo a besarle.

Ambos tenían en claro a dónde se dirigía todo.

[...]

- ¿¡Que hicieron qué!?. - gritó Yoandri. Johann se ahogó con su café.

- Si, eso. - aclaró Joel tranquilamente terminando de tomar su helado.

- ¿Estás diciendo la verdad?, Joel, es muy temprano, se hará tarde cuando quieras hablar. - dijo Yoandri sonando preocupado.

- Yoyo, no fue violación. - rodó los ojos. - yo le seguí el juego. - Johann volvió a ahogarse con café. - pero... no pasó al siguiente paso. Quedó en besos. - comenzó a masticar el cono del helado.

- Si. Ajá, como quieras. - dijo Yoandri golpeando la espalda de Vera. Joel rodó los ojos, los quería demasiado, pero a veces le daban ganas de matarlos.

- Te conozco. - pronunció Johann dejando el café de lado. - sientes algo por él. Estás cegado, y no lo admitirías. Además, eres muy estúpido para reconocer lo que sientes. - Yoandri le dio la razón.

- No soy estúpido. - murmuró. - y no siento nada por él.

- ¿Y porqué se siguen acostando?, ¿no se supone que ese tipo de revolques suceden una vez?. - dijo Yoandri con una sonrisa pícara, robándole el café a Johann.

- Es por diversión. - dijo encogiéndose de hombros. Sus amigos "le creyeron".

Si diversión. Espero.

24/7 || Virgato (EN EDICIÓN).Donde viven las historias. Descúbrelo ahora