Mis padres estaban trabajando y mi hermanito estaba conmigo, yo me estaba aburriendo así que saqué mi computadora para unirme con mis amigos a Roblox, pero recordé que a veces ellos no se unían porque estaban estudiando para las clases, entonces preferí jugar solo.
Me uní a un juego que me salía en recomendados, este no tenía portada, como aquellos juegos que son de baja calidad y que casi nadie asiste a estos, su descripción solo traía 3 puntos.
Convincente...
El título no decía nada, no tenía idea de cómo y por qué había 200 usuarios unidos con un juego tan bajo, este tipo de mapas no tenían nada de especial, ni la miniatura convencía; solo era una imagen blanca con 3 puntos rojos.
Entonces, me uní al juego a ver de que se trataba, al comenzar, salía un noob. Este tenía en la mano un cartel, lo leí y decía:
- Tal vez viniste a ver de qué trata, ¿cierto?
Entonces, atrás del usuario, había un personaje de rasgos un poco extraños: su piel era completamente negra, sus ojos eran rojos y su cabeza traía una especie de cuernos. Cada vez que me acercaba, se distorsionaba la imagen y hacía que la computadora funcionara más lentamente, después todo volvió a la normalidad pero, de repente, apareció un cartel que decía:
-Tal vez dudabas de quién era ese, ¿No?
Al terminar de leerlo, salió un pequeño corto.
En él salía el noob escondido en una parte del laberinto mientras el extraño empezaba a buscarlo. Se escuchaba su voz, yo no me lo podía creer, estaba perturbado, se escuchaba estática y después con una voz tétrica decía:
-Ven chico, no te haré daño...
No podía ver el nombre del extraño, ya que solo salían 3 puntos, así que me quedé viendo la escena, él estaba acercándose más levantando su cuchillo al desdichado usuario nuevo, y cuando este último quiso dialogar, el extraño salió corriendo hacia él y empezaron a verse su sangre y partes de su cuerpo tiradas en el suelo mientras palabras salían:
-DÉJALO, YA ESTÁ MUERTO, DÉJALO...
Al final de la secuencia, empezaron a verse usuarios desparramados en el piso y exclamando "¡Ayuda! Por favor! ¡No dejes que lo haga! ¡Por favor!", posteriormente se empezaron a escuchar gritos.
Después, mi computadora se apagó y, desde hace días, esta no enciende.
Ese tétrico grito me despierta todas las noches...
