-Aquí tampoco está.- Habló Christopher.
-Erick, ¿estás bien?- Preguntó Johann. Él negó con la cabeza.
-Él... él y yo peleamos.
-¿Qué dices Erick?- Pregunté.
-Es que, hubo una situación que Joel vio, pero lo mal pensó, discutimos y se fue enojado.- Habló el ojiverde, aunque las lágrimas no dejaban de salir. -Quería pensar que lo íbamos a encontrar por aquí, pero me doy cuenta que todo es mi culpa.
-Nada es tu culpa Erick.- Le dije mientras tomaba sus hombros.
Volvimos al auto de Iván. -¿A donde vamos Yoyo?
-Al cementerio.
Todos giraron su vista hacia mi, pero es el único lugar en el que Joel podía estar. Siempre iba a hablar con su abuelo sobre sus problemas amorosos. Era el único que no lo juzgaba.
-No podemos entrar al cementerio a esta hora. Es tarde, de seguro está cerrado.- Me reprochó Iván.
-Buscaremos la forma de entrar y buscarlo.- Hable. -Si alguien no quiere llegar tan lejos que se quede.
Nadie emitió ningún sonido.
———————
Al llegar al cementerio utilizamos las linternas de nuestros celulares para iluminar el camino. Ubicamos donde se encontraba el cuidador y buscamos una forma de entrar. Por suerte los muros de este, no eran muy altos, así que con un poco de ayuda podríamos entrar.
Subí a los hombros de Iván y Erick a los de Zabdiel, ellos nos ayudaron a pasar para el otro lado ya que eran los más altos.
Ya adentro del cementerio seguimos el camino hasta la tumba del abuelo de Joel. Ahí dentro hacía demasiado frío y cada tanto sentíamos ruidos extraños, pero no había algo que nos detuviera de nuestro objetivo. El resto se quedó afuera, esperándonos.
Al llegar no observamos a Joel, pero logramos ver lágrimas en la tumba. Joel había estado en ese lugar hace instantes.
Tomados de la mano, Erick y Yo seguimos recorriendo dentro, hasta que por fin lo vimos.
Encontramos a Joel tirado en el suelo, exaltado.
-Joel, Joel, Joel, aquí estamos.- Le hable mientras desabrochaba los primeros botones de su camisa para que este pudiera respirar mejor.
-Joel, llegamos. Mírame por favor.- Habló Erick, pero Joel no quiso hacerle caso.
-Por favor Joe, sabes que él te ayuda a estar mejor.- rogué y este siguió mis súplicas.
-Estamos aquí para ayudarte, todo lo que necesites puedes pedirlo.- Habló muy calmado, y Joel empezó a hacer muecas, dando a entender que tenía sed.
-¿Agua? ¿Quieres agua?- preguntó y Joel asintió. Erick sacó una botella de su mochila.
-Hagamos lo de siempre, sigue mi respiración.- le pidió y Joel asintió.
-Inhala, exhala.- Dijo Erick, mostrándole a Joel cómo debía hacerlo y este siguiéndolo, hasta que por fin pudo tranquilizarse.
-¿Estas mejor?- pregunté y asintió. No me resistí y lo abracé. Erick se unió a nosotros.
-No me vuelvas a hacer esto.- le pedí. -Tenía mucho miedo de que me dejes.
-NUNCA estarás solo Yoyo, siempre estaré para ti.
Lo ayudamos a levantarse y sigilosamente salimos de allí.

ESTÁS LEYENDO
Irreal pero fantástico | Ivandri
FanfictionIvan: Típico jugador de fútbol americano, popular y amante del makeup por las noches. Yoandri: Nada popular, sin amigos, amante de Ventino y Tini Stoessel. Vecino y acosador de Ivan