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el sol cegaba sus ojos, habían cabalgado desde hacia horas, era la primera vez que tenían expediciones en un tiempo tan cercano, Erwin había conseguido los permisos a base de alguna artimaña como siempre, pero no importaba a pesar de ser una expedición, la legión de reconocimiento tenia otro objetivo en mente, recuperar a su capitán de operaciones especiales y a su capitana del escuadrón medico. 

algunos soldados hacían de carnada para los titanes esto para que el resto de los soldados continuara  en la búsqueda de los capitanes, plan creado obviamente por el comandante, pero habia algo raro...

-ahí!- grito petra señalando el horzonte- ahí fue donde los vi la ultima vez

las miradas fueron atraídas a aquel punto fijo, un árbol y de el ondeaba un pedazo de tela.

hange fue la primera en arrear su caballo hacia aquel lugar. siempre imprudente penso moblit, seguida de ella el rubio comantante se acercaba a gran velocidad con el corazon latente a mas no poder.

no quería perder a su única famila, su protegia, tampoco quería perder a su mejor amigo, pero siendo honesto no soportaba perder a soldados de tan alto calibre, tan sumergidos estaban en sus miedos impidiendo que no se percataran de un titan que se acercaba velozmente a ellos para devorarlos, gracias a la rapida accion de mike esto no sucedio, mike los había salvado rebanado el cuello del titan.

-Erwin no seas idiota, no dejes que la preocupación nuble tu juicio.- riño el hobre alto

el comandandante lo miro sorprendido, sin decir nada, sus manos temblaban, ¿acaso tenia razon, estaba preocupado? solo eran dos soldados,  los soldados morian ¿que tenian en especial esos dos? en el fondo de su corazon lo sabia eran FAMILIA al igual que hange, al igual mike y alberth,

los soldados sobrevivientes se subieron en aquellos arboles gigantes con ayuda del equipo de maniobras tridimensionales, pero ya no era necesario los titanes parecían haber perdido el interés por ellos, ignorandolos siguendo su camino...

al llegar a aquel árbol, erwin tomo la tela entre sus manos

- es la capa de Isabel- dijo con seguridad

-como sabe que le pertenece a ella?-pregunto nanaba

- sencillo- respondio el comandante- yo fui el que le dijo que sujetara su capa a un arbol en caso de ser olvidada fuera de los muros... isabel esta viva y si ella lo esta también levi- termino con una sonrisa de orgullo

- genial, ¿si están vivos donde están?- pregunto alberth

- si yo fuera Isabel donde estaría?- se cuestino hange- pero hay algo que me preocupa mas ahora la actitud de los titanes no es la de costimbre...

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-hey mocosa, no seas floja despierta de una vez- la voz rasposa de levi resonó en aquella cueva

isabel apenas cubierta por la camisa de aquel hombre dormía tranquilamente, una sonrisa discreta apareció en los labios del mayor al recordar lo que la noche anterior habían hecho, soñó tanto con ese momento, tuvo que reprimirse demasiado pero valió la pena... valía toda la maldita pena.

la amaba

se levanto del suelo, y comenzó a buscar su ropa dispersa en el suelo de la fria cueva que habia sido testido de su amor, desnudo y sin un poco de pudor, se vestia frente a la que se convirtio en su mujer hacia apenas unas horas. ¿como alguien pude ser tan feliz? se pregunto. ¿como puede existir alguien capaz de hacerte olvidar todo?, fijo la mirada en la chica que se removia en el suelo, haciendo que su midada se enterneciera.

Por siempre y para siempreDonde viven las historias. Descúbrelo ahora