Una Mirada basta 《ItaSaku》DETENIDO

Los Amo a los Dos

Que intriga...
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- Yo te explicare dobe, se a lo que se refiere- la voz de Sasuke inundó la oficina y Sarada sintio como perdía el alma.

-¿Papá? ¿Que haces aquí?- Sarada quería contener las lágrimas, noto como la traición había herido a su padre adoptivo.

Al Hokage se le borró la sonrisa del rostro al ver a la pequeña tan afligida y a Sasuke con esa ira que hace años no le veía. Se acercó a la niña y limpio una lágrima que rodaba por su barbilla.

-Sasuke ¿qué está pasando?- el Hokage hablo con seriedad dirigiéndose a su amigo.

Antes de que Sasuke pudiese hablar la pequeña ya le había susurrando a la pequeña campanilla entre sus dedos. De pronto todo estalló; se escuchó el choque de metales y cuando el humo formado se disipó la imagen quebró el corazón  de Sarada: la katana brillaba amenazante en la garganta de Itachi y la espada corta de ANBU cortó el aire antes de llegar al cuello de Sasuke.

La escena dejó mudos a los presentes, Himawari se había ocultado detrás de su hermano y en un ágil movimiento Boruto atrajo a Sara detrás de su cuerpo. La tensión se podía cortar y el aire se estaba volviendo asfixiante.

-Ya decía yo que esa inteligencia no era tuya teme, de veras- Naruto rompió con el cristal de incomodidad que se había formado en su despacho y les sonrio a los hermanos que aún se amenazaban con sua armas.

Sarada gimio y en menos de un segundo Itachi la tenía entre sus brazos y Sasuke limpiaba las lágrimas que bajaban descontroladas por su rostro; se miraron avergonzados y luego miraron a su pequeña hija: su cuerpo tenía leves temblores y no paraba de llorar y pedir disculpas.

-Per...perdón... yo. Yo solo... quería... tener un ... hermanito- Sarada se abrazo aún más al cuerpo de Itachi y el mayor la estrechó de forma protectora.

-Pequeña Sarada-chan, tus padres son libres de volver, ambos son héroes de Konoha y se les dará su lugar en la misma- Naruto tenía una voz neutral y trato de tranquilizar a sus hijos que veían la escena con temor e inseguridad.

-Gracias Hokage-sama. Estoy a sus ordenes- aún con la niña en brazos Itachi se arrodilló como el orgulloso ANBU que era con el rostro bajo.

Sasuke chasqueo la lengua y la puerta se abrió de golpe: Sakura casi cayo al suelo de la impresión si Shikamaru no la hubiese detenido de el brazo. La mujer miró a su hija en brazos densu padre y después miró a Sasuke con los ojos vacíos y el orgullo roto, sintió que las piernas le fallaban.

-Sakura-chan, cálmate. Itachi es un héroe de la aldea, el puede volver cuando quiera- Naruto ya se estaba fastidiando de decir lo mismo tantas veces-Lo haré oficial por la mañana- finalizó el Hokage.

Los tres Uchiha salieron del despacho seguidos de la pelirrosa que a pesar de estar triste por Sasuke su corazón rebosaba de felicidad al saber que el hombre que amaba había sido perdonado. La niña buscó su rostro y le estiró los brazos.

-Ven princesa, creo que ellos necesitan hablar, ¿quieres decirles algo?- Sakura acariciaba su cabello y la pegó a su pecho.

- Los amo a los dos, no peleen por favor. No lo soportaría- la niña jugueteaba con sus deditos índice y tenía la mirada gacha.

Los dos hombres caminaron a la puerta, estando afuera se dirigieron a la salida de la aldea. El silencio entre ambos se había transformado el un ruidoso momento de incomodidad y Sasuke no pudo soportarlo más, la frustración el dolor de.perderlo habían sido su calvario todos estos años; se lanzó a brazos de su hermano y dejó que las lágrimas salieran libres de sus ojos.