Capitulo 25 - Happy Birthday...Mr. Lee

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Serví dos platos de ramen con carnes de cerdo asada, acomode las servilletas y los cubiertos y estaba a punto de dirigirme a buscar algo de beber cuando la puerta se abrió. Salte en mi lugar esperando ver a mi novio. Me pase la mano por mis húmedos cabellos con nerviosismo. Había tomado un baño y me había cambiado tan rápido como pude y comencé a hacer la cena. El tiempo se me fue volando.

—Hae -escuche que dijo desde la puerta.

—¿Que tal está la señorita Young? -Pregunte balanceándome en mi lugar.

—Bien, ella solo había peleado con Tae y todo fue un malentendido. En realidad bastante...- Cuando llegó a la cocina se quedó estupefacto-...absurdo.

Sonreí con inocencia, la delgada tela de mi camiseta blanca era prácticamente transparente y mi pantalón tan justo que podía imaginar porque sus ojos me recorrían de arriba a abajo. Respire profundo, me erguí y comencé a avanzar moviendo mis caderas de lado a lado.

—Happy Birthday to you. -Cante usando un tono que esperaba sonara tan sensual como lo escuchaba yo.

—Hae...- Tragó saliva y pude ver su manzana de Adán moverse ante la acción.

—Happy Birthday...Mr. Lee. -Deslicé mis manos por sus hombros hasta abrazarme a su cuello y sonreírle con coquetería. —Happy Birthday my love.

—Me acerqué hasta que unimos nuestros labios en un beso lento. Sus largos dedos en mis caderas y los míos jugando con sus cabellos.

—¿Cenamos? -Pregunte y él asintió en respuesta con una enorme sonrisa en sus labios y la felicidad reflejándose en sus ojos.

La cena fue rápida, ambos teníamos hambre así que nos zampamos la comida entre miradas y sonrisas juguetonas. Una vez que terminamos Hyuk lavo los trastes mientras yo buscaba algo para brindar por un año más de vida. En específico intentaba encontrar una botella de vino sin alcohol pero no hallaba nada.

Me decidí por Champagne y fresas, en las películas parecía funcionar. Saqué dos copas y las coloqué en la mesa junto a un bol de fresas, él ya casi terminaba ahora estaba secando los platos.

Tenía un tipo de papel dorado en la tapa de la botella así que lo jale hasta deshacerme de él, afloje los alambres que cubrían el corcho retirándolos. Tome con la mano izquierda la botella y con la derecha el corcho jalando la primera hacia atrás y el segundo hacia arriba. Se me soltó un par de veces sin éxito así que lo giré y jale al mismo tiempo.

Empezando a aflojarse repetí el procedimiento hasta que por fin salió con un chorro de la espuma tras el, se mojo la mesa, las fresas, las rosas en el centro y mis brazos. Un "¡Ahh!" Asustado salió de mis labios tan alto que Hyukjae se giró para ver lo que me paso, tres pasos y él también se mojó. La cocina estaba pegajosa e iba a empezar a oler a alcohol y yo acababa de desperdiciar una botella posiblemente cara de champán. Sonreí con inocencia. Es un alivio que en el trabajo no me hubiese pedido hacerlo en algún evento o hubiese sido despedido y no estaría aquí con él, riéndonos mientras lleno las compas y le lambo los dedos. Lo único que mi paladar siente es el alcohol.

Ambos empapados y con una sonrisa en el rostro tomamos las copas y brindamos.

—Por el señor Lee. -Grite, guiñándole un ojo haciendo que se ruborizara.

—Por el señorito Donghae. -Chocamos las copas y reí avergonzado ante lo de señorito.

—Gracias a usted, no lo soy. -Me empine la copa acabándomela de un trago, carraspee intentando quitarme la molestia de mi garganta y tratando de no hacer gestos.

Su sonrisa se congeló y fue desdibujándose de sus facciones con lentitud los ojos se le abrieron de par en par y parpadeo como si viera a un fantasma. Giré para ver a mis espaldas por si acaso, pero no había nada. Volví mi rostro a él y se estaba poniendo pálido, me estaba asustando. ¿Le caería mal el champán?

Moderation [En Edición]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora