ISLA DE SOLTEROS | COMPLETA ✔️

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Al regresar a la cabaña me encontré con Olivia y Sammy en la puerta.

― ¿Cómo estás? ― Pregunta la primera.

― Bien ― Miento.

Entramos y les cuento una parte de lo que sucedió.

― Bueno, pero no es tan grave ― Cierro los ojos y escondo la cara en la almohada ― ¿Vamos a la fiesta de ahora?

― No quiero Olivia ― Comento, emitiendo un sonido de queja.

― Pero dijiste que estabas bien ― Recrimina. 

― Creo que el helado que comí me sentó mal porque me está empezando a doler el estómago ― Miento de nuevo.

― Pobrecita ― Reconozco su sarcasmo y más su mirada de desaprobación.

― Sí ― Sigo en el papel.

― ¿Me prestas tu baño? ― Pregunta Sammy, siendo indiferente ante la situación.

Es demasiado tierna y a veces le cuesta entender cuando alguien miente o no con respecto a un tema.

― No tienes que preguntarme ― Sonrío señalándole la puerta.

― A mí no me engañas ― Retoma el tema cuando Sammy entra al baño.

― No tengo idea de qué hablas ― Alzo los hombros con desinterés.

― ¡Maldición! ― Grita Sammy.

― ¿Qué te sucede? ― Olivia gira la cabeza hacia la puerta y Sammy la abre haciendo una pésima cara.

― El baño se dañó o eso creo ― Informa mirándonos ― Estaba bajando la palanca, pero el agua no se iba y después me di cuenta de que subía hasta que se derramó por todo el suelo ― Saca la lengua haciendo un gesto de asco y suspiro cansada al tiempo que me pongo de pie. Voy al baño, pero coloca las manos en mi pecho deteniéndome ― No vayas... ― Me empuja lejos ― Hice número dos y dudo que quieras verlo.

‹‹Claro que no quiero››

Esto es lo último que me faltaba para terminar de tener un día horrible.

― Supongo que tendré que ir a la recepción ― Menciono de mala gana.

― Vamos contigo ― Sammy le hace un gesto a Olivia para que se levante de la cama y juntas salimos de la cabaña.

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Todo se veía demasiado pulcro cuando llegamos.

Hablamos con la recepcionista y le comentamos lo que paso.

Nos hizo esperar unos minutos y después apareció el Gerente del Hotel, el mismo sujeto que estaba en la playa aquella vez que me perdí con Allen en la Selva.

Fue amable, disculpándose por el problema en la cabaña ya que algunos de servicio fueron a revisar el inconveniente.

La recepcionista estuvo revisando en la computadora cabañas desocupas para poder trasladarme a otra.

Cuando encontró una sonrío y me entrego las llaves, diciendo:

― No había disponibilidad en la Zona en la que estabas, así que estarás en otra un poco apartada de la de tus amigas.

― Eso no es un problema para mí ― Muevo una mano quitándole importancia.

― Perfecto ― Comenta el Gerente involucrándose en la conversación ― Cualquier cosa que necesiten ya saben dónde encontrarme. Disfruten la Isla chicas.