Epílogo

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Aunque muchos de sus recuerdos continuaban regresando, uno que todavía no llegaba era el de su aniversario con JinKi. Ni uno solo de los tres aniversarios que habían pasado juntos le llegaba a la mente. Y era frustrante. Aunque ellos no cumplían ni un año, ni un mes siquiera de ser pareja, JongHyun quería hacer algo especial para el mayor, y no quería hacer algo que ya había hecho antes.

Y no iría y le preguntaría a JinKi.

Fue por ello que hizo algo especial, pero no tan ostentoso. Ni bien planeado, a decir verdad.

—¡He regresado! —gritó JinKi, cerrando la puerta y sacándose los zapatos—. No había helado de vainilla así que traje de chocolate. ¿No adelantaste la película? Te mataré si lo hiciste, JongHyun.

El mayor dejó las compras en la mesada y empezó a sacarlas, pero cuando el escritor no le respondió se acercó a la sala. JongHyun estaba sentado en el suelo, frente a la mesa de café y en ella había una pequeña caja de regalo.

Eso era extraño.

—¿Jong?

El menor se giró desde su lugar y lo miró con una sonrisa.

—Ven, hyung.

El mayor obedeció. Rodeó el sofá y se sentó al lado del escritor, quién todavía sonreía, pero, en vez de calmarlo, lo estaba asustando. Miró a todos lados, sus dedos tamborileando en sus rodillas mientras esperaba a que el otro dijera algo. Cuando no hubo nada, parpadeó varias veces seguidas.

—Ah... ¿Todo bien?

—Eh... —El menor se pasó las manos por el cabello antes de exhalar pesado, asustando más a JinKi—. Bueno, esto es para ti. —Tomó la pequeña caja sobre la mesa y la dejó frente a JinKi—. Llevo algunos días pensando en ello, sobre todo por lo que significa esto. —Empujó suavemente el objeto—. Pero hoy es veinticinco de mayo, y me gustaría... —Bufó exasperado, y tomó la caja poniéndolas en las manos de JinKi—. Por favor, ábrela.

Sorprendido, y todavía asustado, obedeció. Solo tenía que levantar la tapa y al hacerlo el contenido le robó el aliento.

—¿Qué...? ¿Estos...?

—Son anillos de pareja —completó el escritor, sonriendo nervioso—. He estado pensando en ellos desde hace unos días. Sé que no llevamos mucho tiempo juntos, pero yo en verdad te amo, JinKi, y no quiero pasar más tiempo sin ti.

El mayor miró a JongHyun, sorprendido, pero feliz.

—Quiero que hoy, veinticinco de mayo, siga siendo nuestro aniversario —comentó, tomando un anillo y jugando un poco con él—. Quiero pedirte que seas mi pareja de nuevo, hyung. Que seas mi novio —habló con tanta emoción que sus ojos se cristalizaron.

El mayor rió también emocionado, y se elevó en sus rodillas para abrazar al hombre a su frente. Lo amaba, lo amaba más de lo que alguna vez pensó que amaría a alguien, y era verdad que no tenían mucho tiempo juntos, pero el amor de ellos estaba presente. Era mutuo, podía asegurarlo.

—Claro que seré tu novio de nuevo, JongHyun. —Se alejó y acunó su rostro—. En esta y todas las vidas que viva, siempre seré tu novio.

JongHyun rió en lo que se enjugaba una lágrima que había caído por el costado de su rostro.

—Yo soy el escritor aquí, pero tú eres el cursi.

En medio de risas, ambos se pusieron sus anillos, con sus trémulas manos y sus pechos llenos de felicidad. Ese anillo con filos negros en el exterior era la promesa de su amor, la demostración ante el mundo que eran el uno del otro, la afirmación, para cada uno de ellos, de que se amaban.

—No olvides de nuevo tu amor por mí, JongHyun.

El aludido sonrió algo melancólico, pero con los ojos cargados de amor.

—No lo haría de nuevo, vida mía. —Acunó su rostro y lo acarició con el pulgar—. Pero si lo hago, por favor, recuérdame cada día que eres el amor de mi vida...

—...Y recuérdame cada noche, entre caricias y besos, que no existe amor en otro lugar que no sea entre tus brazos.

El escritor rió por lo bajo.

—Te has aprendido el diálogo.

El mayor se encogió de hombros.

Recuérdame se volvió mi libro favorito.

JongHyun eliminó la distancia entre ellos y pegó sus labios a los de JinKi, compartiendo un beso lleno de sentimientos. Sabía que un beso no bastaría para demostrarle cuánto lo amaba, pero ese beso podría ser el inicio. De cualquier manera, él se aseguraría de pasar toda su vida al lado de ese hombre para demostrarle que su amor era más fuerte que una amnesia momentánea. 



FIN



***




Notas:

¡Y hemos llegado al final! 

Ah, cuando recién lo empecé a publicar veía lejos el día en que publicaría este capítulo, pero aquí estamos. Han sido meses de trabajo con esta historia, desde que la empecé a escribir, que fue en enero del 2018, hasta ahora, diciembre del 2019, que el epílogo ha sido publicado.

Recuerdo que la idea me nació poco antes de dar un examen en la universidad, la partida de JongHyun era reciente, y yo realmente no podía concentrarme en nada. Pero tenía que escribir la idea que estaba rondando mi cabeza. Y este es el producto final. No está del todo igual a la versión original, como desde el cap trece está diferente, pero esta versión me gusta mucho más. La siento más realista.

No me queda más que agradecerles a cada uno de ustedes, mis lectores (entiéndase hombre y mujer; no sé si hay hombres, pero si no lo digo así los estaría discriminando), por haber estado en cada capítulo leyendo, votando, comentando, y compartiendo con nosotras este proyecto. Y digo nosotras, porque Yoruhara también es parte de este proyecto. Sin ella, quién sabe hasta cuando este fic hubiera estado guardado entre mis historias.

Lina, querida, millón gracias por tu apoyo y la fe que le pusiste a Recuérdame. Gracias por ser mi beta reader, y creer en mí ❤

Y, de nuevo, gracias a todos quienes leyeron, por permitir que Recuérdame llene sus espacios de ocio, o por hacer tiempo para leerla.




PD: Hay dos extras, que serán publicados los días correspondientes. Hasta entonces.

Recuérdame | JongYuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora