Tomás.
me desperté por la luz que entraba por la ventana, automáticamente me tapé los ojos y me quejé.
a los segundos pude abrir mis ojos y estiré mi brazo por la mesita de luz, buscando mi celular.
lo agarré y miré la hora, eran las 5 de la tarde, dormí banda.
tenía mensajes del duko.
dukardo
eee
tomate
cenfe
cerreo
cerrompió
cereal
cebolla
ahre mandaba cualquiera
pelotudo q haces q no contestas
con quien garchas puto
jajsjaJjsja mauro
q t pasa tarado
estaba durmiendo
ojalá estuviese garchando
y con jam:(
daaaa
así t quería agarrar puerco
e sale jodita hoy perri
bueno de una
voy a tu casa más tarde
sidale
decile a tu wachi si kiere ir
más vale q t la comas boludo
es q ella tampoco activa e
no soy solo yo
bueno
chau
a re forro ajsjaja
nos vemos en un toq
dale
deje el celular y me pare, me daba alta paja cambiarme ahora así que baje en cuero y boxers.
abrí la heladera y justo cuando iba a comer algo, tocaron la puerta.
¿quién mierda venía a joder a esta hora?
suspiré y acomodé un poco mi pelo, me dirigí a la puerta y la abrí.
ahí recién me di cuenta de que no tenía nada puesto, además de ropa interior.
—Jam.—me rasqué la nuca, nervioso.—¿qué haces acá?
su vista dio un recorrido por todo mi abdomen y después se centró fijamente en mis ojos.
si antes estaba nervioso, ahora más.
—no sé, estaba aburrida y dije, bueno, que mejor plan que ir a joder a mi querido Tomás.—dijo divertida y reí.
me quedó mirando fijo.
—bueno, ¿vas a pasar o te vas a quedar mirándome mientras te mordes el labio?—pregunté pícaro y por primera vez vi a Jamilah sonrojandose.
no aguante más y me tenté, me dio ternura verla así.
—dale gila, pasa.—me corrí dejándole lugar para pasar.
no dijo nada, pilla.
—bueno, ahí vengo, me voy a poner una remera por lo menos.—dije y me dirigí a las escaleras.
—si, por favor.—soltó Jam, más para ella misma que para mi. sonreí y subí.
entré a mi habitación y me puse una remera blanca, un pantalón marrón claro, un gorro azul que tenía y unas nike.
baje las escaleras y la vista de Jamilah se fijó en mi, nuevamente.
me quedó mirando de arriba a abajo, me ponía nervioso que me mire tanto y eso venía haciendo desde que llegó.
—deja de mirarme, loca.—solté y giré los ojos.
—¿por qué?—preguntó sonriendo, mientras que se acercaba a mi.
cuando estaba lo suficientemente cerca, pasó sus manos por mi abdomen y se mordió el labio, de nuevo.
me quedé estático, realmente no sabía que hacer.
en realidad si, comerle la boca.
pero si a ella le gustaba jugar conmigo, me va a tener que empezar a gustar jugar con ella también.
—¿te pongo nervioso, Tomi?—acercó su cara a la mía, pero la bajo en dirección a mi cuello. empezó a dejar besitos ahí, quise tirar mi cabeza para atrás para dejarle más acceso, pero no, tenía que contenerme.
—no.—respondí y tragué en seco. sentí su lengua en contacto con mi piel y me estremecí. cerré mis ojos, casi sin darme cuenta.
—mmm, ¿no?—preguntó y volví a sentir su lengua en mi cuello. mantuve mis ojos cerrados y un suspiro salió de mi.—esa, te gustó, eh.
terminó de decir eso y escuché sus pasos lejos. abrí mis ojos y estaba sentada en el sillón.
—ves como sos.—bufé.
Jamilah solo se dedicó a soltar una risita.
fui hasta la mesada y saqué morfi.
sentía todavía la atenta mirada de Jam, si me seguía mirando juro que iba y la chapaba toda.
—basta.—le dije.
—¿no te puedo mirar?—se cruzó de brazos.
—no.—solté seco, no me gustaba que me mire. bue, en realidad si, pero su mirada era muy profunda y, siendo sincero, preferiría mil veces que me mire cuando esté rezando.
negué con la cabeza tratando de borrar esos pensamientos, todavía no sé cómo estaba haciendo para no comermela.
—¿vas a la joda de hoy?—pregunté tratando de romper la tensión que se había formado hace varios minutos.
—¿a dónde es?
—en la casa de Mau.—me miró y la pensó un poco, terminó asintiendo.
—bueno, me tengo que ir.—se acercó para saludarme. miró mis labios y sonrió.
su vista se fijó nuevamente en mis ojos y dejó un beso en mi cachete.
—nos vemos a la noche, Tomi.—dijo para después salir de mi casa.
la re puta madre.
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hola quedó malísimo perdón
prometo q el otro va a ser mejor ahre
