Capitulo 3: No hay nada mas.
<< Las pesadillas no solo se encuentran en los sueños, quizás la realidad es la verdadera pesadilla >>
Taehyung
El hospital eran bastante grande, y lo mejor es que tiene un hermoso jardín en la parte de atrás, lleno de flores de todos los colores, me gustaban los colores.
Ya no más.
Este hubiera sido un lugar que me hubiera gustado visitar si me hubiera enfermado de alguna gripe o algo por el estilo, no así, no ahora, donde no puedo caminar. Donde no puedo pasear por mi propia cuanta por ese bello jardín sin que alguien tenga que empujar la silla de ruedas. De momento no podía hacerlo por mi cuenta, pues tenía una leve lesión en mi hombro, lesión que espero se cure mas rápido de lo que me dijeron los médicos.
Todavía no podía creer que esto me sucediera a mí. Pensar que hace dos semanas atrás estaba en los últimos ensayos para mi primera presentación. Estaba tan feliz, y ahora... bueno ahora no sé cómo sentirme exactamente.
Solo. Triste. Inservible. Esas eran las palabras que pasaban en mi cabeza cada vez que alguien me llevaba por los pasillos y las personas que estaban esperando a alguien me observaban con toda la lastima del mundo. No podía evitar pensar lo peor al verle las caras.
Yo tardaría bastante tiempo en recuperarme... tardaría mucho tiempo en volver a casa.
Yo solo quería bailar para liberar toda mi tristeza, pero ya no podía hacerlo. Me duele el cuerpo entero, y mi mente esta muy agotada. Todavía sigo dudando si algún día seré capaz de recuperarme por completo.
Al menos una de mis piernas serviría en unos seis o siete meses, cuando la fractura sanara... la otra ya no servia para nada, ni siquiera me dolía, era como si no estuviera allí, aunque claramente estaba.
Debería estar agradecido porque no me las hayan tenido que cortar, Jimin me dijo eso. Pero la verdad era que yo ya no podía agradecer nada. Ya no había nada mas que agradecer si mi sueño no podía ser cumplido.
Los enfermeros acompañantes pasaban conmigo una parte del día y normalmente me aconsejaban que intentara acercarme a alguien para conversar y pasar algún buen rato en compañía ajena. Pero habían pasado los días y no encontraba a nadie que me agradara lo suficiente como para entablar una conversación. Aunque algún que otro anciano se me había acercado, solo me contaban algo de su vida y los enfermeros iban enseguida a llevárselo para su habitación.
Y pues... yo tampoco tenía muchas ganas de hablar con nadie que no fueran mis visitas: Mis padres, mi hermano y Jimin. No quería ver a nadie mas. Aunque Jimin no había estado viniendo muy seguido últimamente, podía entenderlo a la perfección: estaba triste por mí y yo no podía permitirle que se sintiera de ese modo, fue culpa mía que ahora no venga, pero lo alejé por su propio bien. Me dolía no tenerlo cerca, pero será temporal, hasta que yo esté un poco mejor.
De momento debía enfrentarme a esto, solo. Como el adulto responsable en el que me estaba convirtiendo.
Me detengo a observar la televisión y cambiar de canal tras canal, ya me estaba aburriendo de ver la noticias. Las malas noticias para ser precisos, siempre en los noticieros hablan de cosas malas, es raro que saquen el tema de algo cultural o algo menos... sangriento. Al fin y al cabo parece como si la vida se tratara de solo asesinatos, secuestros y robos.
La puerta de la habitación en la que me encuentro se abre lentamente y por ella entra mi enfermero acompañante, Jung Hoseok, la sonrisa que me recibe todos los días desde que estoy aquí. Literalmente que este chico no para de sonreír nunca, a veces sospecho que lo hace para sacarme una sonrisa a mi también, pero en lo que voy de estadía aquí no lo ha logrado ni una sola vez. Él es joven y me ha dicho que todavía sigue estudiando para recibirse de medico mientras trabaja aquí como acompañante, tiene toda una vida por delante, con esa alegría sin dudas podría conquistar a cualquiera.
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Ending Scene -Taekook ✔
Roman d'amourLa depresión y la enfermedad había tocado la puerta de su corazón para quedarse allí hasta el final de sus días. Jungkook sufría de anorexia, baja autoestima y grave depresión... Ya no sabía cómo vivir, bueno a decir verdad, nunca lo supo. Por otro...