Hinata en el equipo 7

6 [la batalla entre ninjas]

El jounin parecía haber atrapado a su oponente. Todos los presentes observan con impresión la hazaña; aparentemente, el enemigo estaba derrotado. Pero la mirada de Hinata cambia de repente.

—¡Kakashi sensei, cuidado!— gritó la joven, algo agitada, mientras sus compañeros y maestro se ponían en estado de alerta.

Kakashi de inmediato saltó, mientras justo detrás de su posición anterior se hacía presente el asesino, que parecía enojado, mejor dicho, frustrado.

Zabuza se quedó quieto en su posición, girando la cabeza en dirección a los genin, específicamente a la kunoichi.

—¿Qué tipo de mocosa eres?— dijo cortante, con una voz seria y con aquella aura asesina. Esto asustó a la joven ninja, quien retrocedió un paso.

Tras un momento, una sonrisa se dibujó debajo de las vendas de Zabuza, quien miraba a los ojos a la chica, dejándola paralizada.

—Creo que tú serás un gran problema para mí. ¡Esos ojos no son comunes, se trata del byakugan!— exclamó el renegado, mientras acomodaba su arma para atacar, comenzando a correr en esa dirección.

Los genin, al ver eso, se pusieron a la defensiva, sintiendo como si el asesino fuera una bestia frenética e imparable que corría furiosa hacia ellos.

—¡CUIDADO!— gritó Naruto.

De inmediato, Kakashi apareció frente a ellos, y en un pestañeo los dos jounin ya se habían encontrado, ambos forcejeando. El ninja copia estaba sosteniendo el brazo armado de su oponente, que parecía llevar las de ganar en cuanto a fuerza bruta, sometiéndolo poco a poco.

—No está mal para un copión— dijo el renegado, quien tomó la delantera y, en un movimiento ágil, lanzó una patada contra el estómago de su oponente, el cual salió disparado hacia el agua, cayendo de pie sobre esta.

—Es fuerte— pensó el ninja copia, mientras veía a su adversario desaparecer de nuevo en la niebla.

Kakashi se fijó en la mirada de Hinata, notando que ya no parecía tan a la defensiva como hace un momento. Eso solo podía significar que el ninja de la niebla no los acechaba a ellos, sino que iba por él. Con esto en mente, se colocó con la guardia alta.

—¿¡Qué fue eso!?— gritó el constructor, bastante asustado. Sin embargo, los genin no le prestaron atención, estaban más atentos al peligro que a las quejas de su cliente.

—Ese jounin de la niebla es muy fuerte— pensó Sasuke, mientras miraba en todas direcciones y luego a su compañera para ver su expresión. —No parece estar tan a la defensiva. De hecho, su mirada está perdida a la distancia. ¿Qué estará mirando?

—¿Q-quién es él?...?— dijo la joven en voz baja, levantando la intriga de sus compañeros.

—¡NO DEBERÍAS BAJAR LA GUARDIA!— exclamó el asesino, mientras atacaba a Kakashi, quien, sin decir nada, solo se defendía de los ataques y esquivaba, cuando de pronto fue sorprendido por la espalda.

—¿¡Qué!?— exclamó asombrado el ninja copia al percatarse de que eran dos. El que estaba detrás de él lo pateó verticalmente, haciéndolo hundirse en el agua.

—¿Qué le pasa a esta agua? Es muy densa— dijo el peliplata, mientras su oponente hacía poses de manos.

—Idiota— burló Zabuza. -Suirō no Jutsu—

Sin más, Kakashi fue encerrado en una gran burbuja de agua, quedando inmóvil.

Hinata, sorprendida, se voltea, desviando la mirada de su otro objetivo. Los otros genin y el constructor se encuentran sor