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Huída

Consejo: pueda que el capitulo anterior haya sido modificado, revise para no perderse de nada.

Al salir de la habitación del conserje fuimos a la biblioteca, hacía las computadoras. Era de los pocos lugares que la policía no investigaba a fondo, todavía. Luke se sentó en la computadora 13, y empezó como a...descargar cosas.

-¿Qué haces?-pregunté.

-Transfiero la información, datos obb, datos de aplicaciones, multimedia, audio, disco duro...

-Ve al grano.

-Transfiero todo a un mi drive para analizarlo. Junto con el pendrive que te dio Dylan.

Entendí lo que acababa de ocurrir. Estuvimos ahí esperando a que todo se descargue como por unos 10 minutos, el estaba golpeando con la gema de los dedos el escritorio.

-¿Qué piensas de lo que te dije hace un rato?-dijo, sin despejar la mirada de la computadora.

-Me sorprendió. No lo esperaba, menos de alguien como tú-dije, no iba a dejar que supiese todo lo que me intrigaba. Era como un libro abierto, un misterio que escarbar y resolver.

-¿Por qué alguien como yo?-respondió, mirándome confuso-¿no me consideras alguien común, normal y corriente de una personalidad tan especial como cualquier chico de 17 años?

Su sarcasmo me molestó.

-De hecho, eres imprudente, mayor, descortés, orgulloso, molesto y fastidioso. Cualquier persona no te soportaría.

-¿Me consideras mayor? Son solo dos años más de experiencia ¿Orgulloso? ¿Acaso no te enfada que tenga la razón? Y por si no lo sabias, molesto y fastidioso son casi lo mismo.

Estaba por responder, pero justo termino la descarga.

En ese momento me puse a pensar donde estaba la bibliotecaria, últimamente no aparecía por aquí. Algo andaba mal.

Luke mencionó que lo siga y que guarde el mayor silencio posible.

Caminamos, en silencio, bajando las escaleras. Un par de policías nos miraron con curiosidad, yo evadí su mirada.

-¿A dónde van?-Nos preguntaron.

Guarde silencio.

-Me olvidé algo abajo-dijo Luke.

-Los acompañamos-afirmó un policía.

Luke puso una mirada escalofriante. Tomó mi mano, atrayéndome hacia él.

-¿No tienen acaso trabajo que hacer?-preguntó Luke, su tono se puso sarcástico-no queremos ser una perdida de tiempo. No creo que a su jefe les guste mucho que malgaste su tiempo.

El policía asintió, reconsiderando lo que había propuesto, intercambiaron miradas y se fueron.

Suspiré. Todavía tenía la mano de Luke sobre la mía. Me liberé y el me miró amablemente. No entendí el gesto.

Cuando llegamos al sótano, la puerta estaba cerrada. Luke maldijo.

-¿Ahora qué?-dije.

-Espera, tengo una idea. Pero puede ser peligroso. Aléjate un poco.

Retrocedí como dos metros.

En ese instante Luke miró para todos los alrededores, y sacó de su bolsillo una navaja.

Con ella, des aflojó los tornillos de la cerradura, y a la manivela la sacó.

Retrocedió unos pasos y pateó la puerta, donde la abrió por completo.