Capitulo 7

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Lucian se encontraba en el despacho junto a Dante revisando la carga que había entrado desde el Atlántico. La idea de Sophia había funcionado a la perfección y no había existido problema para aquello.

- Creo que deberíamos reducir el cargamento para el próximo viaje – dijo el mayor de los Novicov.

- Ya me he encargado de eso – respondió Dante.

- Desde ahora manejare esto, como lo hacía antes de retirarme del negocio.

- Me parece lo mejor, los traficantes confían más en ti. ¿Qué hay con el problema de la policía?

- Estoy trabajando en ello – dijo Lucian mientras ojeaba un sobre-. Sebastyan me está ayudando conoce a un buen fiscal que puede quitar de medio la investigación. Lo más importante es que mi padre no se entere de este problema.

- Creo que eso va ser imposible – dijo el padre de ambos mientras entraba en las oficinas. Ambos hermanos se levantaron de las sillas y se quedaron gélidos.

Mishenka se acercó hasta ellos e hizo a un lado una de las sillas.

- ¿No me invitan a mirar cómo va el negocio? – enarco una ceja el padre. Ya tenía conocimiento de todo lo que estaba ocurriendo.

- Padre, no queríamos causar malentendidos.

- Las cosas importantes como estas Lucian se comparten en familia, ya deberías tener claro eso.

- Lo sé – susurro él.

- ¿Cuál ha sido el motivo por el cual la policía te busca? Sobre todo, ¿cómo es que tu fotografía aparece en el periódico? Esto ha sido un grave descuido de tu parte, tu madre está a un paso de tener un infarto.

Lucian se quedó unos segundos en silencio, Dante decidió darle espacio a ambos para que discutieran lo que estaba sucediendo. Lucian le comentó todo a su padre sin omitir detalles, aquello para Mishenka era como revivir una historia pasada. Lo comprendía a la perfección y sabía que el sentimiento de odio y venganza no lo iban a llevar por un buen camino si no pensaba con calma las cosas.

- Te voy a decir un consejo – suspiro su padre-. Piensa antes de hacer las cosas de manera precipitada, eso sólo te llevara a destruir lo que tanto quieres proteger.

- ¿Cómo pensar con calma papá?, tú mismo me enseñaste a no dejarme intimidar por nada de lo que sucediera en mi vida, a asumir mis errores y es eso lo que estoy haciendo ahora.

- También te enseñe a mirar lo que tienes a tu alrededor. No estas solo en esto. Escucha Lucian voy a decirte algo que sucedió mucho antes de conocer a tu madre. Mi primera mujer murió en la misma casa que construí para ambos, estaba embarazada y yo no estaba allí para ella, yo si fui un cobarde que la deje sola, después de aquello deje que nada más que el odio y la venganza entrasen en mi vida, y entonces conocí a Lauren. Lauren estaba lastimada al igual que yo, había sufrido mucho y ambos nos complementamos de nuestro dolor. Tanto Sophia, como Laurent y Penélope, son mujeres que llegan a tu vida y le dan un rumbo diferente, son frágiles y dulces. Pero eso no las convierte en débiles. Si Sophia me llamo fue porque se preocupa por ti, porque ve más allá de la venganza. Entonces actúa sensatamente hijo o te aseguro que nada saldrá bien.

Aquello había dejado pensativo a Lucian, jamás su padre se había sincerado de esa forma con él, debía aprender a manejar sus acciones y su temperamento o de lo contrario echaría a perder su vida. Recuperar a Sophia le había dolido más que cualquier herida de bala atravesar su piel, no iba a arriesgarse a que sucediera lo mismo.

(......)

Alexandrina se encontraba dándole indicaciones a la chica que sería la nueva administradora, a pesar de que Damián le había prácticamente suplicado que no dejara el bar, ella había tomado una decisión y nada la iba a cambiar de parecer. Ambas se encontraban dialogando cuando una rubia apareció de la nada. Se trataba de la prometida de Damián.

Sangre RusaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora