Sangre Rusa

Capitulo 2

Sophia decidió contarle todo a Lucian aunque en el fondo tenía miedo por lo que fuera a suceder. Le asustaba la forma en que el reaccionara.

- Cuando me pediste que me fuera de tu lado sucedieron muchas cosas - dijo tomando un suspiro-. Mis hermanos y yo nos mudamos a un apartamento pequeño, estaba muy mal por lo que había sucedido entre tú y yo, mis días eran horribles. Una noche simplemente salí buscando alejarme de mis propios pensamientos para cuando reaccione me encontraba caminando sola por un callejón de la ciudad. En ese momento un auto negro salió de la nada, cruzándose en mi camino un hombre de traje bajo de allí y me obligó a subir con él. No tuve más opción, eran muchos

- ¿Quien es ese maldito sujeto? - cuestiono Lucian sintiendo la sangre hervir.

- Su nombre es Zadaquiel, es el administrador y dueño del sitio en el que estuve todos estos años.

Lucian la dejo seguir hablando, quería saber todo acerca de las razones por las cuales la había encontrado en esas circunstancias. Quería saber más del imbécil que la tenía en su poder, no le perdonaría la vida.

- Zadaquiel me obligó a trabajar para él por todos estos, sirviendo tragos en las mesas, atendiendo a los clientes y en ocasiones siendo el centro de entretenimiento de muchos hombres. Tenía que usar ropa provocativa para llamar su atención, vi cosas que jamás podré borrar de mi cabeza. Después de tres semanas descubrí algo que iba a cambiarlo todo - Sophia respiro profundamente era la parte más difícil que le costaba revelar de su vida, pero lo iba a hacer, ya no quería cargar sola con el dolor de esos seis años-. Estaba embarazada - su voz se hizo añicos en ese instante.

Lucian se quedó gélido, jamás había imaginado tal cosa. Un hijo de ella y él. Un hijo entre ambos, en ese momento escuchar aquello lo hizo sonreír.

- ¿Tenemos un hijo? - pregunto sonriendo.

- Yo... - la chica se rompió en llanto, aquello era lo peor de todo. Perdimos a nuestro bebé - dijo finalmente. No sabes cómo lo siento...

El ruso quedó en silencio algunos segundos mientras asimilada lo que había escuchado. Sophia había perdido al bebé, el escucharlo de sus labios era doloroso, escuchar la forma en la que su rostro cambio en ese segundo le hizo ver el profundo daño que había en su vida.

- Dime, ¿Cómo sucedió? - sintió en su garganta crearse un nudo, se estaba conteniendo de no llorar al verla contarle en lágrimas aquello.

- Zadaquiel no lo sabía, lo mantuve oculto por mucho tiempo, estaba asustada de lo que pudiera hacer, así que cuando lo descubrió, enloqueció y se cegó por la ira. Discutimos aquel día, no iba a dejar que mi bebé naciera en ese asqueroso lugar. Pero él era más fuerte que yo, estaba en desventaja, me golpeó cuando dije que me marcharía me arrojo a una de las mesas impidiéndome salir del bar, caí inconsciente al suelo y para cuando desperté estaba sangrando.

Lucian se contuvo de no enloquecer, aquello había sido como gasolina que encendió el hombre que había dejado aquel mundo atrás, lo que le estaba confesando Sophia parecía sacado de una película de horror. Su cargo de consciencia por dejarla ir era muy grande. Perdió la oportunidad de conocer a su hijo, pudo haber estado allí cuando este tipo la golpeó, pero ella había pasado por todo aquello sola.

- Tenía cuatro meses, los médicos no pudieron hacer nada por más que se los suplique - susurro ella presa del llanto-. Lo amaba, no sabes cuánto lo amaba - Lucian la abrazó consolándola. Sophia estaba muy mal emocionalmente, no hallaba las razones para que ella sufriera de esta manera. Habían lastimado y herido a lo que más amaba en el mundo.

- Estoy aquí, está ha sido mi culpa - limpio sus lágrimas con su dedo-. Nadie nunca más se atreverá a hacerte daño, te lo aseguro.

- Jamás deje de amarte - susurro ella manteniendo sus ojos fijos en los de él.