Alexandrina despertó con los brazos de Damian rodeándole la cintura, inmediato se levantó de la cama, tomo sus cosas y salió de la habitación.Damián la había traído a su Penthouse, ella no podía olvidar el hecho de que él se hubiera acostado con Gia en la misma cama que ahora estaba durmiendo.
- ¿A dónde vas? - pregunto él cuando la escucho intentar girar la perilla para salir de allí.
- Déjame ir, no puedes retenerme a la fuerza.
- No te estoy teniendo a la fuerza, pero no voy a dejar que te vayas en medio de la noche con este frío. No es lo mejor para una mujer embarazada.
- Prefiero soportar el frio que quedarme contigo en la misma habitación en la cual tuviste sexo con esa mujer - gruñó molesta mientras intentaba una vez más salir de ahí -. ¡Abre de una maldita vez!
- No lo voy a hacer, aunque quieras que me vaya y te deje sola no lo voy a hacer - Damián acorto la distancia entre los dos y se acercó a ella quitando un mechón de su cabello.
- ¡No me toques!
- Te heriste al caerte - dijo el alemán mientras pasaba sus manos por la herida leve que tenía en la frente-. Me volvería un loco si alguien te toca.
- Déjame Damián por Dios déjame, ¿no ves que me lastimas?, solo he aprendido lo que es la tristeza a tu lado - Alejandrina lo golpeo en el pecho mientras las lágrimas caían de sus mejillas-. Mis ojos lucen hinchados de tanto llorar por ti, tus decisiones y tus actos me hieren en lo más profundo, quisiera ser feliz al menos un día de mi existencia.
- Lo serás, lo prometo - Damián limpio sus lágrimas con sus dedos-. Te haré feliz, cada segundo de mi existencia.
- Ya no puedo creer en tus promesas - Alexandrina lo alejo y justo cuando le dio la espalda él giro su cuerpo y la beso.
- Cree en esto entonces - condujo la mano de ella a su corazón-. Late de esta manera desbocada cada vez que te tengo cerca, incluso a la distancia mi corazón y mi alma siempre te han pertenecido. Créeme esta vez.
Alexandrina cerró fuertemente sus ojos y se llevó las manos al vientre.
- Esta vez a quien no debes defraudar es a él. Te creo, porque veo el arrepentimiento en tus ojos - sonrío ella.
(....)
Lucian marcó al número telefónico de Dante, pero cada una de las llamadas iba a buzón. Dejo de lado el móvil y unos segundos después Dante regreso la llamada.
- ¡¿Que mierdas te sucede a ti que no tomas mis llamadas?! - gritó Lucian a traves del celular.
- Estaba ocupado con un nuevo negocio.
- ¿Qué negocio? ¿Dónde estás tú?
- En PortoFino.
- ¿Qué haces en Porto Fino? Dije que todos atacarian cuando diera la orden.
- He encontrado la forma perfecta de entrar en la mansión de los Fontana sin sospechas, los tengo prácticamente en mis manos.
- ¿Qué hiciste esta vez? ¿A quién mataste?
- No me he manchado las manos en lo absoluto, los Fontana conocerán de lo que somos capaces. La venganza será tan dulce que no sospecharan que han jugado con las llamas del mismo infierno.
- Dante ¿Que has hecho? Dímelo en este instante.
- Espera pronto noticias de mí querido hermano. Nada se quedará sin ser vengado, atacaré en su parte más débil, los destruiremos al punto en que no quede nada que los recuerde.
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Sangre Rusa
Teen FictionSeis años atrás Lucian Novicov perdió el rastro de la única mujer por la cual ha perdido la cordura. Abandonar el negocio de la mafia no fue algo fácil, dejar atrás la vida y el hombre que alguna vez fue se convirtió en algo casi imposible. Decidido...