Podrían los gemelos tener algo contra ti? -Preguntó Jimin, abrochándose el cinturón de seguridad.
-Que yo sepa, ni siquiera los conozco... pero quién sabe. Hay muchos vampiros jóvenes hambrientos de poder que podrían pensar que soy una amenaza -dijo Taehyung pensativo, tocando con los dedos el volante.
Iban camino al club que Jimin había sugerido, y Taehyung se estaba poniendo nervioso. Tan pronto como hubo una razón adecuada para alimentarse, los instintos de su soldado se aceleraron, y estaba temblando de tensión.
-Jason los llamó "viejo viejo" lo que significa más de tres siglos, en lenguaje de bebé vampiro. -Jimin sonrió un poco, tratando de aclarar la situación.
-Lo que no entiendo es, ¿por qué están amenazando a tus hijos y al refugio? Si me persiguen, quiero decir. -Taehyung giró a la izquierda, luego a la derecha en la siguiente intersección, según instrucciones de Jimin.
-No es un secreto que tengo el aroma de un Anciano en mí. ¿Tal vez pensaron que te convocaría si nos amenazaran? -Dijo Jimin, pero Taehyung podía decir que aún no estaba seguro del razonamiento.
-Creo que lo sabremos pronto...-murmuró Taehyung mientras estacionaba el auto a un par de cuadras del club.
La caminata fue tranquila y pensativa. Caminaron cerca el uno del otro, no del todo conmovedor, pero la amenaza mutua obvia y más probable había cambiado las cosas.
No había nada especial en el club; era un lugar promedio. Parecía tener más de las cosas que les gustaban a los humanos, por ejemplo, un televisor para deportes en un rincón, no en el bar como siempre, y una pista de baile; no es que el propio Taehyung se opusiera a bailar o mirar deportes, y por delicadeza a los patrones de vampiros, la música no era demasiado ruidosa. Eso fue un alivio.
-¿Necesito un trago, si no te importa? -Dijo Jimin, y por primera vez desde que salieron del restaurante, Taehyung pudo notar que estaba un poco nervioso por la nueva amenaza.
-Claro-le dijo Taehyung y lo llevó al bar.
El cantinero, un bar tender de aspecto nervioso con tatuajes, piercings y una sonrisa deslumbrante, fue directamente hacia ellos.
-Hola, Jimin, ¿lo de siempre? -Preguntó, mirando de Jimin a Taehyung. -¿Y tú?
-Sí, por favor, Rhys. Y tendrá uno en la trastienda. Jimin se sentó en el taburete de la barra y apoyó los codos en el mostrador.
-Oh...-dijo el camarero, levantando los ojos y mirando a Taehyung con una mirada mesurada.
Por un momento, Taehyung pensó que el chico también lo sabía. Las personas en la vida de Jimin parecían saber que alguien con quien había contado había estado jodido y que alguien había dado su sangre a Jimin cuando el humano no era lo suficientemente consciente como para pedirla o negarla.
Entonces Rhys fue a servir una bebida, una excelente elección en whisky escocés, si Taehyung lo recordaba bien, y lo puso delante de Jimin. - Aquí tienes.
-Gracias, hombre. -Jimin tomó un pequeño sorbo, apenas un gesto, al principio. Luego, con un movimiento agitado de su muñeca, arrojó la bebida e hizo una mueca. El estremecimiento que recorrió el cálido cuerpo del humano hizo que Taehyung pensara en otras formas en las que solía estremecer a Jimin.
Taehyung esperó a ver si Jimin quería otra bebida, pero ya estaba mirando a la multitud.
-¿Estás de crucero por mi cena? -Preguntó Taehyung, divertido.
-Podría también. Conozco a muchos de los habituales y puedo alejarte de los codiciosos. -Jimin se encogió de hombros casualmente, y le hizo una señal a Rhys para que le dijera algo.
