Relato De Un Escritor ❥ SooKai

✎ Capítulo 18

Una palabra: Confianza.

|+18|

Durante unos días Jongin no me llamaba ni me enviaba mensajes, quería pensar que era por temas de la escuela. A lo mejor tenia muchas pruebas o cosas que estudiar, o simplemente no deseaba hablarme y ya. Aunque debo admitir que si fuera por la ultima razón me sentiría bastante triste. No quise molestarle así que seguía con lo mío, con mis actividades normales... Osea aburrirme solo en mi casa.

Era sorprendente como una persona como Jongin hacia mi vida mas interesante haciendo que me interesara por otras cosas peculiares. Durante ese tiempo no quería admitirlo, pero pequeñas cosas habían cambiado con respecto a mi personalidad, gustos y hasta mi manera de vestir. Comencé a llevar el cabello hacia abajo como si tuviera flequillo, cosa que jamás en la vida lo pensé. Ya que en mis tiempos de escuela solamente me peinaba de esta manera. Mi clóset cambió de ropa holgada y algo ancha a ropa un poco más apretada y de otros tonos. No escribía tanto de hecho, mi mente se encontraba ocupada en otras cosas... *cof cof Jongin*. Tampoco dibujaba ni iba al restaurante a comer y así como muchas de las cosas que hacia antes las dejé de hacer solo por aquella persona, aquel chico, mi precioso Jongin.

Estaba tan sumergido en los sentimientos que no logré darme cuenta a tiempo del gran error que iba a cometer.

Recuerdo perfectamente el día en que Jongin me mandó un mensaje, luego de tanto por fin se había dignado a hablarme al menos para saber que le pasaba. El mensaje era bastante corto y claro.

"Ven a mi casa por favor. Te esperaré 💖"

Sonaba como si me estuviera esperando por algo o planeando alguna cosa. Se leía muy sospechoso ¿Y si sus padres por fin aceptaban que yo estuviera con Jongin? ¿Y si Jongin tomó el valor de contarles? Bastantes preguntas parecidas rondaban mi cabeza pero todas eran erróneas, no se trataba de eso. Iba a ser algo aún mejor.
Me apresuré en llegar y una vez que estaba en la puerta sentía leves nervios. Mordí mi labio antes de dar un toque y cuando ésta se abrió un Jongin de cara roja me recibía. ¿Qué le había pasado? Parecía un real tomate cuando lo ví.

—H-Hola Jongin... ¿Estás bien?— Saludé tímidamente pero seguía mirándome extraño. Y notaba un sentimiento de vergüenza en él.

—Hola, no es nada, sólo la calor ahora pasa...

Una vez que entré el ambiente se sentía algo extraño e incómodo. Jongin parecía tímido y algo corto de palabras pero tampoco era un adivino y no entendía muy bien que le pasaba.

—¿Tus padres están aquí?

—Salieron como siempre pero creo que volverán pronto. De todos modos sólo quería estar contigo, me hacías mucha falta.- Se acercó a mí y me abrazó de una manera tan tierna que no dudé en rodearlo con mis brazos. Parecía que solamente quería estar conmigo y darme algo de afecto.

—Fueron algunos días pero realmente pensé que te habías enojado conmigo o algo ya que no me hablabas y nada ¿No estás enojado verdad?

—¡Por supuesto que no! Lo que menos haría es enojarme contigo, yo...- Quiso decirme algo pero dudaba en hacerlo así que supuse que debía darle un poco más de confianza y le acaricié la mejilla.

Pero fue algo tan inesperado que no pude reaccionar a tiempo. Jongin me besó de la nada y al principio no pude corresponderle pero luego capté lo que pasaba y le seguía el ritmo. Comenzaba lento y con cuidado, luego tomó la delantera con brusquedad. Al parecer se estaba conteniendo demasiado.

Quería seguir pero pronto recordé que los padres de Jongin volverían pronto y no iba a ser lo mejor del mundo si nos descubrían besándonos de esta manera. Y encima en su casa, el señor Kim me mataría tres veces.