Relato De Un Escritor ❥ SooKai

✎ Capítulo 20

Uno de los últimos momentos

Desde ese día me consideré un estúpido por no haberme dado cuenta de toda la mierda que se vendría, si tan sólo hubiera prestado más atención a las personas que me rodeaban no estaría escribiendo este relato. Pero como siempre dicen, de los errores se aprende y este fue mi mayor error en toda mi vida.

Así lo consideraba y aún en la actualidad.

Recuerdo el momento exacto de cuando nos descubrieron. El pequeño y yo besándonos apasionadamente en su habitación, sí, le digo pequeño porque me sentía ya muy culpable de decir su nombre pero estábamos ahí. Jongin y yo sentados en su cama comiéndonos la boca como si el mundo se fuera a acabar, y vaya que se iba a acabar cuando la señora Kim nos vió.

De tan sólo recordarlo me producía nervios y mucho miedo en el cuerpo.

No había nadie en casa así que subimos rápidamente, Jongin me llevaba tomado de la mano como siempre y una vez que entramos cerró fuertemente la puerta. Al parecer estaba muy acelerado y quería que fuéramos al grano. Me miró sensualmente y se acercó hasta besarme bruscamente haciendo que diera cortos pasos hacia atrás hasta lograr sentarme en la cama.

Por toda esa intensidad se notaba que Jongin tenía fogosidad, estaba muy dispuesto a que lo hiciéramos.

Ni siquiera me importó si alguien venía, no hasta ciertos segundos después. Intentaba separarme pequeños segundos pero Jongin no me dejaba, me tenía tan aprisionado a su lado que salir de ahí se me hacía imposible.

—Espera Jongin, vas muy rápido...— Dije tomándolo por los hombros, me miró algo dudoso.

—Es que ya no puedo aguantar más... Estoy aburrido de toda esta mierda, solamente quiero estar contigo.

—Lo sé, pero sabemos muy bien que es algo que no debería estar pasando ahora mismo... D-Deberíamos parar un momento.—Cuando dije eso me miró algo cabreado con una ceja levantada. Al parecer Jongin no estaba entendiendo el punto que quería recalcar.

Si algo malo pasaba nos iríamos juntos al agujero oscuro, ya saben a ese agujero llenos de problemas y no podríamos seguir juntos.

—Al carajo.—Respondió rápidamente nuevamente besándome desprevenido.

Por dentro mi ser me decía que debía parar y llegar hasta ahí e irme pero por fuera era como si no importara y debía continuar.

Lástima que no hice caso a tiempo.

Abrieron la puerta, era su madre, nos vió. Sentí como un nervio se pasaba de entre las puntas de mis dedos a la cabeza ¿Cómo podía salir de ese embrollo?

Tenía los ojos bien abiertos y la boca casi en el piso. Por obviedad asustado me hice a un lado mirándola afligido, Jongin no me soltaba la mano. De hecho me la apretaba aún más, estábamos igual de nerviosos y jodidos por los dos lados.
Nadie articulaba palabra y tampoco quería hablar porque era evidente del cagazo que habíamos creado. Típico, vas a casa de tu novio, se besan un día cualquiera y ya su madre los pilla en la habitación.

¿Más mala suerte podía tener?

Seguramente Chanyeol se hubiera reído en mi cara en ese momento. Y Baekhyun pues... De brazos cruzados negando con la cabeza.

—...Que... ¿Q-Qué significa esto?— Me daba tanta vergüenza ver la expresión en su rostro, es que de verdad parecía muy asustada. Incluso más que yo en ese momento pero no cabía dudas se estaba formando la típica escena.

—¡¿Quién es él?!— Volvía a decir alzando la voz ya un poco más cabreada.

—Él es la persona que me gusta mamá. Sorpresa.— Respondió Jongin sin pudor. Giré mi cabeza para mirarlo y ni siquiera lucía triste o asustado, estaba enojado. Su ceño fruncido lo decía todo.