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LJ (POV)

"Oh Padre dime ¿por qué las cosas van cayendo? Estoy debajo de ti, arrodillada, suplicando pero todo a mi alrededor corre con velocidad y tú pareces sólo una estatua más en la ciudad."


Salí del gimnasio bastante agotada, mi bolso colgaba de mi hombro y yo aún mantenía la tolla en mi mano. Sequé un poco mi rostro, al terminar de entrenar me había dado una ducha fría y colocado unos shorts negros rasgados con una blusa bastante suelta sin mangas, iba bastante corriente pero siempre me veía así al salir de aquí. Después de todo solo me dirigía a casa a cenar y dormir.
Mis ojos se posaron en la SUV azul estacionada frente a mí, solté un suspiro y sonreí negando con la cabeza.

-Papá..-murmure acercándome al auto y sacando de mi bolso, de entrenamiento, las segundas llaves. Todos los días mi padre salía del trabajo y traía el auto hasta aquí, lo estacionaba y luego caminaba hasta la casa y todo para que yo no tuviese que tomar transporte o caminar.
Subí al auto luego de cargar mi bolso en la parte trasera, me coloqué el cinturón y prendí la radio, sonreí al escuchar una de las canciones que más me divertían y le subí al volumen mientras comenzaba a conducir.
-When I give my heart again
I know it's gonna last forever
No one tell me where or when
I know it's gonna last forever -Canté dando pequeños golpeteos con mis dedos sobre el volante mientras giraba en una de las calles. Al hacerlo las luces del auto iluminaron brevemente el parque de la esquina y en medio de la oscuridad, el color rojo captó mi atención. Con cuidado y asegurarme de que no había ningún auto detrás de mí, me detuve en doble fila. 
No lograba ver bien desde lejos así que baje la ventanilla del auto y me sorprendí al ver a una chica tirada en el césped. Fruncí levemente el ceño, el cielo estaba horrible y cada vez el viento era más fuerte, claramente habría una gran tormenta. Subí nuevamente el cristal y observé mis manos unos segundos, tal vez necesitaba ayuda.. o tal vez era sólo una Yonki. 

-Vamos, Lauren, es hora de regresar a casa-dije para mí misma un segundo antes de que me encontrase a mí misma bajando del auto y caminando con cuidado por la calle hasta el oscuro parque.
Mi mirada divisó el objeto rojo que había llamado mi atención inicialmente, era su mochila y a medida que me acercaba a ella me sorprendía el echo de que realmente parecía una chica "bien" y no una Yonki. 

-Ho..hola..-murmuré algo dudosa, el cabello de la chica estaba sobre su rostro y por un momento pensé lo peor "¿estaría muerta?" pero luego de observarla un momento, de forma detenida, noté que su pecho subía y bajaba de una forma muy lenta, parecía más bien profundamente dormida.- Oye.. disculpa-volví a hablar en un tono más alto pero la chica ni se inmutó. "Y si realmente si está..."
A lo lejos un perro ladro de forma fuerte haciéndome sobresaltar y lo mismo le pasó a la chica que se sentó de un golpe, apoyando sus manos sobre la hierba y observando hacia el perro un momento antes de mirarme a mí y dar un pequeño salto en su lugar.
-Hola, lo siento no quería asustarte!-dije rápidamente dándo un paso hacia atrás sin querer que pensara que iba a violarla o algo así.

-¿Y tú quién mierda eres?-preguntó levantándose rápidamente y tomando su mochila antes de alisar su ropa.

-Yo..-me detuve antes de decir mi nombre- espera un momento, me acero a ver si estás bien y ¿me hablas de esa puta forma?-fruncí el ceño.

-¿Qué?-preguntó de pronto girándose de vuelta hacia mí, su rostro mostraba que por un momento la dejé sin palabras por mi reacción- no es mi culpa que sea una puta acosadora extraña.

-¿De qué mierda hablas? No te estoy acosando, no es mi culpa que te guste dormir en parques públicos en medio de tormentas-espeté molesta, vaya malagradecida, debí quedarme en el puto auto y que la jodieran.

Un rayo acompañado de un fuerte trueno cortó de pronto nuestra discusión y ambas nos giramos rápidamente hacia el cielo, estaba horrible y tenía que acomodar mi cabello a cada momento.

-Cómo sea..-murmuró y comenzó a caminar lejos, la observé un segundo y me giré hacia el auto, sólo a mi me pasaban este tipo de cosas.

Crucé la calle y subí al auto para colocarme en cinturón y encender el motor, prendí la radio y por último las luces dándo un respingo al ver a la chica parada justo frente al auto observándome.

-No tengo dinero y si lo tuviera, no tengo problemas en partirte la cara-dije en voz alta con la ventanilla abierta, esto es lo que se consigue metiéndose en las mierdas de los demás, terminas mal.

MANGATA | CAMRENDonde viven las historias. Descúbrelo ahora