HUG ME | KIM

12

Tarde un poco en ir a la salida ya que me quedé hablando con Namjoon sobre unos temas escolares, a Hoseok lo salude y se fue tan rápido puedo porque se vería con Yoongi en la esquina de la escuela.

El salir de la escuela, enseguida vi al amor de mi vida apoyando su cuerpo en una pared con una de sus piernas doblada hasta la mitad, de manera que su pie se apoyara también en la pared, el estaba con su celular. Al sentir mi presencia enseguida se acercó a mi.

—¿Lista para empezar el trabajo?–Su sonrisa me emboba.

—Lista—Dije segura.

En cuestiones de minutos llegamos a mi casa. Fuimos caminado ya que sus padres, al igual que los míos, estaban de viaje, le ofrecí ir en bus pero prefirió ir caminando.

—Si no fuera por la borrachera que me agarré el otro día hubiéramos venido en mi hermoso carro.

—No es malo caminar, supongo.

—¡Mi auto! ¡Mi hermoso auto! —Dijo fingiendo llorar—Pronto iré a buscarte, bebé, no te preocupes—Miraba el cielo como si de su auto se tratase, yo solo reía–Lo siento me agarro nostalgia.

—Entiendo entiendo.—Lo amo.

(...)

Entramos a su casa. La analice un poco más ya que no tuve la oportunidad la ultima vez que vine. Ella me invitó un poco de agua, luego fuimos a su cuarto a recoger algunos materiales para el trabajo.

—Me harías el favor de esperar abajo, necesito cambiarme.—Pidió.

—Claro.—Dije rápido y baje.

Por experiencia, las chicas usualmente tardan mucho en cambiarse, así que me puse a ver algunos cuadros familiares, especialmente, me detuve en observar uno familiar. Recuerdos invadieron mi mente.

Al parecer, ella no era ese tipo de chicas; en cuestiones de minutos bajo y me descubrió mirando atentamente los retratos.

—Estan interesantes las fotos— comentó al verme.

Diablos, alguien se puede ver tan simple y hermosa a la vez. Lucía una remera un tanto ancha, un pantalón normal y corriente acompañado por unas zapatillas vans. Se veía hermosa, era un look casual, perfecto para ella.

—Comenzamos—Dijo tímida ante mi mirada intensa.

—Claro, tengo algunas ideas en mente que pueden servir para el trabajo.—Comenté sacando de mi mente pensamientos perversos.

Sinceramente, compartíamos muchos gustos en esto de la química, nos gustaban los mismas temas y los mismos experimentos. Básicamente, hicimos un desastre; tuvimos que limpiar todo los líquidos que utilizamos. Terminamos eligiendo algo reciclable, es decir, estábamos en contra de la contaminación que hay en el planeta ¿y porqué no hacer un proyecto materiales reciclables? Rápidamente ella relacionó las botellas y demás plásticos con la química, me sorprendió lo rápido que piensa.

—¡Es perfecto!

—¡Me encanta! —Dije igual de emocionado que ella.

No negaré que ella hizo mayor parte del trabajo. Yo la ayudaba en algunas cosas simples como calcular la cantidad de plásticos y...observarla, eso no se si era una tarea pero no podía dejar de mirarla. Su cabello totalmente despeinada la hacía verse sexi, además, sus lentes que pocas veces utilizaban le daban un toque más lindo, aunque ya lo sea.

—¿Qué te parece?

Estaba tan concentrado mirándola que ni presté atención a lo que decía, por eso mismo, decía todo que "si".

(...)

La pura sinceridad es que la mayor la hice yo, sin embargo, el aportaba algo de su tonto cerebro, tonto y sexi. 

No me enfurecia ni nada, quede ser más genial que esto; El chico que me gusta esta en mi casa.

Por otro lado, me tomaba muy encerio este trabajo, pensaba en cada detalle y cada error que podía haber, quería aprobarlo ya que es uno de los proyectos finales del año.

Despues de unos largos minutos estando aplicando una cinta sobre un par de botellas, finalmente, me reincorpore, es decir, levanté mi espalda y mi visión. Taehyung, el mismo chico que yo conozco, me observaba fijamente. No me veía a mi misma pero sabía que estaba roja y que en cualquier momento estallaría de los gritos.

—¿Q-quieres algo de comer?—Interrumpí.

—No vendría nada mal—Movió de cabeza de lado a lado como reaccionado y luego sonrió.

—No tardo —Sonreí y me pare un busca de mis galletas favoritas junto a dos botellas de jugo de fruta.

"—Bien, si enseguida llego. Nos vemos en un rato, te amo."

Escuche salir de su boca antes de pisar el living, donde estábamos haciendo el proyecto.

—Lo siento, Tn, pero me tengo que ir, te recompensaré lo de las galletas.

—No te preocupes.—Sonreí levemente.

—Respecto al trabajo...—Lo interrumpi, sabia lo que iba a decir, no tenía caso.

—Ve con Abbie, yo me encargo de guardar las cosas y todo este desastre. Además, tenemos tiempo para terminarlo.—Asegure.

Era una buena opción no haber terminado el trabajo ya que eso significaba que íbamos a vernos más seguido y pasar más tiempo juntos: ruborizarme, quiero que este trabajo dure toda la vida.

—Gracias, te debo una.

Lo acompañé a la salida.

—Adios, fue increíble esta juntada.

Me moría. ¡Quería gritar! Controlate Tn, controlate.

—Pienso lo mismo, fue bastante divertida y productiva.

Me saludo con un beso en la mejilla y como acto segundo el se fue. Cerré la puerta y me apoye contra la puerta dejando caer mi cuerpo hasta el suelo, como siempre, tan embobada.

(...)

Vi como cerró la puerta y antes de empezar a buscar un taxi me quedé parado en la entrada mirando su puerta como si de ella misma se tratase.

¿Qué me está pasando?

Reaccioné y fui a la casa de Abbie.

Pronto se viene lo bueno y perdon la hora ):