8. Pecado impoluto

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¿Por qué quieres olvidar?

Por favor, intenta recordar,

Deseo mientras cálidas lagrimas

Fluyen cayendo por mis mejillas.

Por qué, mientras temblamos,

¿Nos buscamos el uno al otro?

Porqué yo quiero sostenerte una y otra vez

En mi abrazo.

Blue flow - De Haibane no Renmei

Lo más sabio, y probablemente lo menos doloroso, era simplemente destruir sus recuerdos: enfrentar al ángel sin vulnerabilidad alguna; como había hecho tantas veces; como buscó liberarse de sus sentimientos siglo tras siglo, tras milenio de forma ...

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Lo más sabio, y probablemente lo menos doloroso, era simplemente destruir sus recuerdos: enfrentar al ángel sin vulnerabilidad alguna; como había hecho tantas veces; como buscó liberarse de sus sentimientos siglo tras siglo, tras milenio de forma infructuosa. Un ciclo que parecía desgarrarlo con cada reinicio.

Pero esa aquella debía ser la solución, ¿o tal vez tenía que arrasar con los recuerdos de ambos? A lo mejor esa era la forma de librarse de su amor; de ese sentimiento que, representaba a veces, una carga llena de tierna devoción.

Serían perfectos extraños, no habría entonces un nuevo reinicio porque con eso sería el fin definitivo. No sería como en otras ocasiones, donde se daría un tiempo, con sus recuerdos una vez más manipulados, y se adentraría al sendero de una rutina, en apariencia superflua, con Aziraphale.

Sostuvo su teléfono con expresión compungida tras la llamada del ángel, con la amargura tan palpable que su garganta parecía cerrarse con la hiel de sus emociones. ¿Por qué le daba tantas vueltas a sus pensamientos? Simplemente, la solución, de momento, podía ser tan simple como poner sus manos sobre su cabeza, y navegar cortando recuerdos en su mente.

Sus manos le temblaban paralizadas: estaba aterrado. No podía hacerlo, su cuerpo no le respondía.

Todo era diferente, en esta ocasión estaban de su lado. ¡Habían detenido el apocalipsis! ¡Engañado a las dos fuerzas que dominaban la tierra y el destino de la humanidad! Al fin estaban juntos, al fin...después de tanto, estaban libremente, dentro de lo que podían, al lado del otro.

A pesar de que se sentía ser rechazado nuevamente por Aziraphale, quién, seguía esforzándose en mantener su título de ángel.

A lo mejor, había sido un poco injusto; pero se había esforzado tanto por ambos...

Con ese pensamiento, se dio cuenta que terminaba amándolo sin importar que hiciera.

Y sin embargo, comenzaba a comprender la posición de Aziraphale: el mismos se había sentido así toda la eternidad, perdido en un rol en el que no era del todo bueno (irónico que fuera el demonio más creativo, pero el menos malicioso, incluso entre los pocos que realmente nunca habían sido genuinamente crueles).

Los buenos pecadores  [Good Omens] [Ineffable Husbands]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora