CLANNAD

capitulo 4- vamos a buscar amigos

Capitulo 4- vamos a buscar amigos

Nagisa salió de la sala del consejo escolar.

-¿Cómo ha ido?- preguntó Okazaki de inmediato, acercándose.

-Estoy en problemas- dijo ella con voz suave.

-¿Qué han dicho?- estaba muy preocupado.

-Han dicho que cualquier reclutamiento de personal esta prohibido.

-¿Qué demonios es eso?- preguntó con decepción.

Se dirigieron hacia el comedor mientras hablaban y se sentaron a una mesa.

-Como el club de teatro esta cerrado ahora mismo, no debería haber ningún tipo de actividad, por lo tanto no pueden dar permiso para poner panfletos de reclutamiento- explicó.

-¡¿Pero que tipo de tontería es esta?!- gritó Okazaki dando un golpe a la mesa. Nagisa se hecho hacia atrás en su silla, asustada. -¿Y simplemente les has dicho “esta bien”?

-Hice lo que pude- contesto ella. –Pero me dijeron que las normas eran las normas- dijo con la mirada hacia abajo.

Okazaki tamborileaba con los dedos sobre la superficie, en parte enojado y también pensando en que se podía hacer.

-No te rindas- dijo levantándose de su asiento. –Todavía tiene que haber alguna forma.

-¿Tu crees?- preguntó sin esperanza.

-Si. Y si no la hay, la crearemos nosotros- contestó, volviendo a sentarse. –No te deshagas de tu sueño solo por una tontería así.

Nagisa sonrió encantada: -Okazaki-san- suspiró.

En una esquina alejada, un Sunohara divertido y curioso los observaba con mucha atención.

Por la noche, Sunohara decidió aclarar su duda.

-¿Estas saliendo con aquella chica del club de teatro?

Se encontraban en la habitación de Sunohara como siempre, sentados a la mesa. Okazaki sostenía al gato de Misae en sus brazos. Cuando escucho esto se sintió decepcionado, pero no supo la razón.

-Es muy raro que te involucres con las cosas de los clubs, pero de ser así, te entendería- continúo su amigo, un poco aburrido.

Okazaki no sabia porque, pero no quería contarle a su amigo lo bien que la pasaba al lado de esa chica insegura y tierna, a lo mejor porque ni el mismo era capaz de explicarlo, así que decidió mentir después de pensarlo un poco.

-A decir verdad, su familia tiene una panadería- dijo en tono bajo. –Y los bollos que prepara su madre están muy buenos. Te volverás adicto con solo dar un bocado. Si te haces amigo de ella, podrás comer todos los bollos que quieras.

Ahora Sunohara escuchaba con mucha atención.

-¿En serio?

-¿Por qué si no iba a involucrarme con el club de teatro?

-Ahora que lo pienso, tienes razón. Parece ser muy aburrida y seria- dijo de nuevo aburrido.

-Deberías pensar en como vengarte de Sakagami Tomoyo- le aconsejo Okazaki. -¿Verdad?- le preguntó al gato. Este maulló en respuesta.

-Mira que eres pesadito- dijo Tomoyo en voz baja y agacho la cabeza, como si estuviera cansada. Al parecer, con ver a Sunohara era suficiente para hacerla sentir de esa manera.