CLANNAD

Capitulo 10. El desafío de la superdotada

*-¿Qué serán estas luces?- se preguntaba el pequeño robot mientras observaba esas pequeñas luces danzando a su alrededor. Su cabeza sobrepasaba por muy poco la yerba del campo en el que se encontraba, donde no se podía observar nada más a lo lejos, solo mas extensión de terreno. El sol resplandecía, dándole un color  amarillento a la vegetación. –Estoy seguro de que no he visto nunca nada así- mientras seguía observando, trato de retener una pequeña luz con su mano, pero esta paso de largo. De pronto escucho unos pasos acercándose y volteo hacia donde provenía, era la niña, esa niña de vestido blanco y largo cabello.

-¿Te parecen raras las luces?- pregunto con su dulce voz. El robot asintió lentamente con su cabeza, provocando un rechinido. -¿Y el cielo?- el robot negó. -¿Y la tierra?- volvió a negar. -¿Solo las luces?- asintió. -¿Por qué será?- se preguntó a ella misma.

-Para ella, que ha vivido aquí toda su vida, las luces eran lo natural. “! "!Seguro que son sombras!”, pensó el robot. –Pero una sombra siempre conlleva un objeto que la proyecta. Entonces… ¿Qué son?

-O sea, que para que esto te parezca raro, debe de haber otro paisaje que será el natural para ti- aventuro la niña. Él asintió.

-Intente hacer memoria. Estaba en un mundo diferente hace tiempo… o quizá en el futuro más lejano. Todavía queda el rastro en mi memoria de que una vez estuve allí-. *

Una nueva mañana comenzaba. Cada uno hacia las actividades correspondientes, unos trabajando, otros de camino al instituto, unos que se quedaron dormidos, cada uno a la expectativa de que sería ese día.

Okazaki caminaba de camino al instituto cuando se encontró a una Nagisa muy sonriente.

-Okazaki-san, buenos días- saludo.

-Nagisa, ¿Qué haces?- pregunto sorprendido. –Llegaras tarde.

-Te vi de refilón, así que te espere para que fuésemos juntos. ¿Hice mal?- pregunto al ver la expresión confusa de Okazaki.

-No, para nada, pero… bueno, vamos- contesto con una sonrisa.

-Sí.

-No conseguimos miembros… - comento Okazaki mientras emprendían la marcha.

-Ya ves.

-Quizá deba ir a hablar  con ella.

-¿Ella?- pregunto Nagisa con curiosidad. Estaba a punto de contestar, cuando escucho un ruido cada vez más fuerte.

-¡Apártate, Tomoya!- fue demasiado tarde cuando volteo y vio como Kyou se le venía encima con la moto. No logro apartarse lo suficientemente rápido. -¡Tomoya!

-Okazaki-san, ¿estás bien?- pregunto muy preocupada Nagisa, quien se había arrodillado a su lado. -¡Aguanta!

-Ey, Tomoya-kun… - lo llamo Kyou con su característica voz, pero no recibió respuesta.

-¿Okazaki-san?- llamo Nagisa, preocupada.

-Parece que está bien- dijo Kyou sin emoción en la voz, encendiendo su motocicleta.

-¿Y te vas sin más?- pregunto muy molesto Okazaki, levantándose un poco.

-Estoy de broma- explico la chica de cabello morado.

-Nagisa, ¿estás bien?- pregunto Okazaki con preocupación.

-Sí, estoy bien- contesto.

-Ya veo- comento Kyou con suspicacia.