y en medio de camas de hospital, cirugías por realizar y sencillas consultas médicas; se encontraba un atractivo médico cirujano, observando aquella maldita máquina expendedora que no le permitía comprar una simple agua embotellada.
ah, pero luego l...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Jimin se agachó con cuidado y se sentó en el frío suelo con lentitud. Últimamente sus articulaciones dolían como el infierno, pero él se lo atribuía a los bruscos cambios de temperatura.
Diablos, estoy envejeciendo. Pensaba.
Con un profundo suspiro observó su vacío departamento. Decenas de cajas se encontraban regadas por toda su sala, todo estaba pulcramente empaquetado.
ㅡ Bueno, creo que es hora.
Con una mueca preocupada y manos temblorosas, tomó su teléfono y llamó a su revoltoso novio.
ㅡ Bebé ㅡ
ㅡ ¡Hola Minnie!, ¿Qué necesitas nene?
Jimin suspiro con fuerza. ㅡ Necesito que vengas a mi departamento, por favor, es urgente.
ㅡ Iré enseguida. ¿Ocurre algo malo?
El morocho sonrió con tristeza y sujetó su teléfono con fuerza. ㅡ No, dulce corazón. Apresúrate.
La llamada finalizó con un preocupado Yoongi y un muy ansioso Jimin. Éste último estaba esperanzado sobre que todo estaría bien, después de todo el amor entre él y su preciosa pareja era fuerte.
¿No?
(...)
El blanquecino se estacionó fuera del edificio donde vivía su novio. Con piernas temblorosas inició un inquietante camino al elevador. Una vez que seleccionó el piso donde residía Jimin le tocó esperar.
¿Sobre que querría hablar Jimin? Es decir, las cosas entre ambos estaban demasiado bien para ser verdad. Se respetaban, se divertían y se amaban entre ellos. O eso es lo que Yoongi percibía.
¿Acaso se cansó de mi?, ¿Éste será el fin de nuestra relación? Yoongi sintió sus gatunos ojos cristalizarse, con renovada preocupación limpió sus ojos con rudeza. Claro que no Yoongi, Jimin te ama y no te dejará... al menos aún no.
El pitido del elevador le sacó de sus tristes pensamientos, con aparente confianza, Yoongi emprendió camino a la puerta de su pareja.
Formó un puño con su delgada mano y llamó suavemente a la puerta. El sonido de cosas siendo arrastradas y un par de quejidos se escucharon de fondo.
ㅡ ¡Ya voy!
El blanquecino suspiró profundamente.
ㅡ Yoongi, cielo, pasa pasa.
El mencionado entró con cautela al pequeño departamento y el pánico lo absorbió por completo.
La mediana sala estaba repleta de cajas, las paredes que antes estaban adornadas por retratos de ambos, ahora se encontraban desnudas. Ni si quiera se encontraban las cortinas colocadas.
Al parecer tiene prisa. Pensó Yoongi.
ㅡ ¿Q-Qué es todo esto?
Jimin caminó hacia la cocina y tomó una botella de agua mineral de una pequeña nevera portátil.
ㅡ Creo que es bastante obvio hasta para ti, Yoongi.
ㅡ Claro.
El morocho observó a su pequeño novio, éste tenía sus pequeños ojos cristalizados y un imperceptible puchero adornando sus adorables labios.
ㅡ ¿Y, a-a dónde irás?
ㅡ Me han dicho que Australia tiene hermosos paisajes. Y bueno, he investigado un poco y pedí un intercambio allí. Así que bueno, creo que tendré que perfeccionar mi inglés, ¿no crees?
Yoongi sintió sus lágrimas mojar sus enrojecidas mejillas. ¿Eso era todo?, ¿Se iría así un más? Todo lo que habían pasado juntos estaba siendo tirado a la basura frente a sus narices. El hombre al que le entregó su corazón y pensó que lo cuidaría, lo estaba pisoteando ahora mismo.
Con ira en sus venas, Yoongi caminó con fuerza hacia el morocho. Jimin abrió sus ojos en demasía cuando sintió la fuerte palmada en su mejilla.
ㅡ ¡ERES UN IDIOTA PARK JIMIN!
Jimin tocó su mejilla con confusión, ¿qué demonios?
ㅡ Vete. Vete y no vuelvas más, no quiero volver a verte en mi vida. Espero que allá seas más feliz. Adiós.
¿QUÉ DEMONIOS? Con confusión y extrema preocupación, Jimin tomó el antebrazo de su pareja, quien estaba casi fuera de su departamento.
Esto no se supone que saldría así.
ㅡYoongi, bebé, escúchame por favor.
El más bajito negó con rudeza. No quería escuchar nada de ese mentiroso controlador.
ㅡ Nene, no me iré a ningún lado-es decir, lo haré pero sólo será para estar más cerca de ti.
ㅡ Si estár más cerca de mi significa mudarte a otro puro país, tienes una visión muy abstracta del concepto de cercanía.
Jimin sonrió con sorna y abrazó a su pequeña pareja. El blanquecino trató de huir de su agarre, pero simplemente la calidez que emanaba del cuerpo del morocho le debilitaba inmediatamente. Se sentía tan protegido y cálido que dolía.
Sus pequeños ojos se encontraban irritados y cristalinos, lágrimas secas se pegaban a sus sonrosadas mejillas.
ㅡ Sólo estaba bromeando, pero has sobre reaccionado. La verdad es que me mudaré a tu lado. Seré tu nuevo vecino sexy.
Yoongi giró sobre su eje y encaró a su idiota novio. Frunció el ceño observando con detenimiento el atractivo rostro de su pareja.
ㅡ¿En verdad, en verdad?, ¿No me mientes?
ㅡ Verdad, verdad. No te miento, precioso.
Yoongi asintió en silencio y retomó camino hacia fuera del departamento de su novio. Jimin miró a su pareja con confusión y caminó detrás de él.
ㅡ ¿Ahora a donde vas?
ㅡ A mi casa. Ya sabes, hasta no ver no creer.
Jimin se detuvo aturdido por el comportamiento del blanquecino. Observó cómo éste entraba en el elevador.
ㅡ Pe-pero te he dicho la verdad.
ㅡ Me hiciste llorar. Estás en abstinencia Park.
Jimin abrió sus ojos en demasía. Sus regordetes labios se abrieron formando una "o" cómicamente.
ㅡ ¡NO!
Yoongi sonrió burlesco mientras las puertas del elevador se cerraban frente a él.
