Nos despedimos Sara y yo de Jeremías antes de irnos de su casa y partimos juntos hasta que nuestros caminos se separen, Sara se veía intrigada por lo que pasó anteriormente, permanecimos en silencio por un rato hasta que se atrevió a preguntarme.
- Ryan.
- ¿Qué pasa?
- ¿Puedo saber que pasó entre Emmanuel y tú en ese juego?
Me puse un poco nervioso, lo reflejaba en mis movimientos. - Es difícil de explicar - Contesté.
- Explícame, por favor - Suplicó Sara.
Respiré profundo y me dispuse a explicarle todo, cada sentimiento que tuve cuando estaba entre esos 2.7 segundos que parecían largos minutos, lo que pensaba en ese momento y el por qué no podía moverme. Ví a Sara pensante, estaba procesando todo lo que le expliqué.
- Entonces, no pudiste resistirte a tu primer beso con un chico - Mencionó.
- No, fue algo tan impactante - Dije -. Me hizo perderme en el espacio, como si no hubiera nada a nuestro alrededor, solo él y yo.
- ¿Te gusta Emmanuel? - Preguntó.
- Sin embargo - Dije para esquivar un poco la pregunta de Sara pero a la vez iba a profundizar más mi explicación para contestarla -. No pude evitar notar que faltó algo, los sentimientos que tuve no fueron tan fuertes como los que sentí con alguien más.
- ¿De qué hablas?, contéstame - Replicó Sara -. ¿Te gusta Emmanuel?
- Es a lo que quiero llegar - Respondí -. En realidad... me gusta otro chico.
- Hm... Entiendo. Perdoname por haber arruinado la idea de tu primer beso con esa persona - Mencionó arrepentida.
- Eso no es lo que me preocupa, Sara.
- ¿Entonces? - Preguntó confundida.
- Es Emmanuel.
Sara lo pensó por un momento. - Creo que entiendo, te preocupa que Emmanuel esté empezando a sentir algo por ti, ¿cierto?
Di un fuerte suspiro y asentí con la cabeza - ¿Qué puedes hacer para no hacerle daño a una persona que no merece tal cosa?
- No sé, es una situación muy complicada, tampoco quiero ver a Emmanuel sufrir por amor, después de todo lo que pasó.
- ¡Así es! No quiero que reviva sus tiempos de sufrimiento - Dije cubriéndome la cara con las manos.
- Trataré de ayudarte - Mencionó Sara antes de detenerse en una parada de autobús -. Aquí me quedo, nos vemos más tarde, Ryan.
- Está bien, hasta luego - Dije mientras me alejaba de la estación. Caminé en silenció a casa, pensando en el enorme conflicto en el que me metí, el camino se me estaba haciendo muy corto gracias a todo lo que tenía en la cabeza, casi al cruzar la calle me atropellaba un auto por estar tan distraído en mis pensamientos, reaccioné en el momento que escuché los neumáticos derrapar en la calle. - ¡Fíjate, animal! - Gritó el conductor enfadado.
- Perdone - Respondí y continué mi camino.
Trataba de encontrar una salida a este problema, sé que Emmanuel está sintiendo algo por mí o al menos eso es lo que ví cuando me besó, pero a mí me gusta Ángel. - "Pero, ¿y si Ángel no siente nada por mí?" - Pensé -. "Estaría rompiendo el corazón de alguien por absolutamente nada".
Llegué a casa, saqué la llave de mi mochila y entré, todavía no llegaban mis padres, suponía que se les hizo tarde en su trabajo. Dejé la mochila en mi habitación, me cambié de ropa, está vez por una playera blanca con mangas rojas y unos pantalones cortos más cómodos, y me recosté en la cama a revisar mis redes sociales en mi celular. Miré la hora, ya era la 1:30 pm. Tenía un hambre así que me preparé unos huevos revueltos, sabía que cuando mis padres no llegaban a la hora, significaba que tardarán mucho más en salir del trabajo, de dos a cuatro horas más, en estos casos es como vivir solo, ya estaba acostumbrado.
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Los dos caminos del amor
Storie d'amoreUn chico llamado Ryan se inscribe en un nuevo colegio privado en su ciudad, el más costoso y de lujo que existe. Allí, tendrá que luchar contra su timidez y hacer nuevos amigos, pero algo repentino sucedió. Una enorme confusión invade su cabeza cuan...