Capítulo 18: Sonrisa

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No puedo creer lo que veo, Víctor está ahí presenciando, se ve tan relajado, platicando con ellos, actúa diferente, ni sus movimientos ni su peculiar estilo es el mismo.

Estoy pasmada, sorprendida y a la vez horrorizada, estuve tanto tiempo sin verlo que esto me parece irreal, me niego a aceptar que él sabe de todo esto.

Doy pasos hacia atrás, pero las piernas me tiemblan, primero Liam, y ahora ese chico, ¿Cómo es que las dos personas que me atraían están metidas en lo mismo?

Intento caminar de espaldas, pegándome lo más que puedo a la pared de la casa, tengo que ir lento si no quiero que me vean, quiero salir de este espacio ahora mismo.

De pronto siento como mi espalda choca contra algo, giro rápidamente para ver que es, y ahí al frente mío está un hombre. Me ve, me inspecciona. Mientras a mí se me van las palabras, no sé como es que hasta este punto aún estoy de pie, pues siento las piernas como gelatina.

-¿Qué haces aquí? Deberías estar con los demás ¿Quién es tu acompañante?- pregunta el hombre con un tono neutro.

Yo no soy capaz de responderle, al ver mi confusión hace un gesto extraño y me toma del brazo, me jala mientras camina dando grandes pasos, rápidamente llegamos hasta donde se está presenciando el juego.

Gracias a sus jalones y pisadas ruidosas, nos volvemos el centro de atención

- ¿Qué hace esa chica a tú lado?- Pregunta el mismo hombre que vi sentado en aquella sala, es el más veterano.

-La vi en la entrada del jardín, parece que estaba espiando - contesta el hombre que me sujeta del brazo

En estos momentos no sé que pensar, quiero hacerme fuerte, mantener la calma, pero es imposible, pues estoy a la vista de tanta gente desconocida.

Mi cuerpo tiembla, empiezo a sentir frío pero estoy transpirando a la vez, no sé que hacer, no se que harán ahora.

Todas las personas se encuentran expectantes

-¿Qué hacías ahí muchacha?- cuestiona el hombre sentado

-¡Contestale!- grita el que está a mi lado mientras presiona cada vez más fuerte mi brazo.

Víctor salta de su asiento, ocasionando que la chica que llevaba en sus piernas salga disparada hacia un lado

-Vasta Wembley, esa chica está conmigo. Solo la mandé por unas cosas a la mansión. Ya sabes, aún es tímida- comenta mientras pone su brazo en mi hombro

No me alejo de su agarre, no soy tonta, él está tratando de salvarme de esta situación

El hombre me mira por un momento más para luego observar a Víctor, da un asentimiento de cabeza
- Tenga mucho cuidado señor Víctor, le podrían robar a esta jovencita - dicho esto comienza a reír a carcajadas, lo extraño es que todos también lo hacen, no se ríen de él, se ríen con él, ¿cómo se les pudo hacer gracioso eso?

Mientras lo hacen Víctor me susurra en el oído que tome asiento a su lado, y es lo que hago, me quedo ahí fingiendo que soy su acompañante hasta que se termina la partida de ajedrez.

***

- ¿Qué haces aquí?- me cuestiona Víctor, entre dientes, se ha terminado el partido y la gente empieza a retirarse

-¿Que qué hago aquí?, eso mismo me pregunto, no sé que es este lugar, no estoy realmente segura de adonde debo ir ¿Tú que haces aquí?

-Eva, hablas muy rápido, así no logro entenderte- trata de acomodarse su cabello como si estuviera enfadado - Ven acompañame a un lugar más tranquilo, trata de relajarte- me dice y comienza a caminar tomandome del brazo, pero no de la forma que el hombre lo hizo, esta es la primera vez en mucho tiempo que alguien me toca de una manera normal, y no para jalónearme.

Entramos de nuevo a la casa, yo solo lo sigo, voy tras él sin decir una palabra, Víctor se detiene en una puerta que al parecer da hacia una habitación después de algunos segundos estamos dentro.

Esta habitación es diferente a las otras, esta tiene un estilo contemporáneo, no puedo dejar de observar a todas partes, es como si fuera la habitación de un chico, entonces lo entiendo... -¿Esta es tu habitación? - pregunto en un tono algo elevado.

El solo asiente.
-¿De verdad Víctor? ¿Tú también sabes de esto?
¡Al parecer varias personas lo sabían menos yo! Todo este tiempo creyendo e imaginándome otra cosa, las personas que quise y las que me gus- no termino de decirlo, suelto aire por la boca en acto de fastidio. Este no es el momento indicado para decirle que el me gustaba. -¿Y ahora, tu también vives aquí?- cuestiono en un hilo de voz mientras me dejo caer en uno de los sofás.

-No sé que te hayan dicho, y así no puedo entenderte, quiero que comprendas que las cosas no son fáciles, que aquí no puedes ir de un lado para otro, paseando por el jardín, al menos tienes que ir acompañada de alguíen.

¿Sabes quien te trajo?- me cuestiona

-Claro que sé, fue Liam- contesto, él me mira en un gesto extraño, al parecer no sabe de quien hablo.

-Liam, ¿no sabes quién es?- vuelvo a decile

El niega y camina de un lado a otro por la habitación, yo solo lo observo, lo inspecciono, parece perdido en sus pensamientos quedándose en completo silencio, así permanece por algunos minutos.

-Esto no me parece justo, no dejaré que también te hagan esto-
Su semblante cambia es como si algo que recordó le molestara.

Eso hace que me de curiosidad y antes de que pueda pensar quiero saber porque él está aquí

- ¿Por que estás aquí?- pregunto
El baja la cabeza, se ve triste y tan vulnerable, como si algo le pesara, le doliera.

No sé si es verdad, no tengo idea si está fingiendo, al final de cuentas no lo conozco, no sé nada de él, de su vida o a que se dedica, él solo es aquel chico atractivo que algunas veces me miró en esa tienda.
No sé que hacer, que decirle y ¿si mejor me quedo callada y dejo que se le pase?

No, no puedo. Las ganas de saber,de preguntarle que le ocurre son más fuertes, me levanto del sofá y me acerco a él

-¿Estás bien? - pregunto mientras trato de buscar alguna expresión en su rostro

-Podría estar mejor - contesta

No sé a que se refiere, pero ya no me atrevo a preguntar más.

- Eva, eres una chica excelente no entiendo que haces aquí - hace una pausa - No soporto ver como tratan a las mujeres ¿sabes? Ya me cansé, no quiero estar aquí, no quiero ser parte de esto.

Me quedo helada, una vez más él me confirma todo lo que Liam ha dicho, lo que me sorprende es que me haya confiado sus sentimientos, que sea tan transparente.

Tomo un suspiro largo y me lleno de valor - Escucha, yo sé que muy pocas veces nos vimos, que prácticamente no sabemos nada el uno del otro, pero creo que sabes mucho más que yo de todo esto, esos hombres te conocen, fingiste que yo estaba contigo.

-Ahora no puedo contestar tus preguntas, tengo que salir. Tu quedate aquí, no tardaré - dice dando unos pasos largos hacia la puerta.

Por primera vez tengo esa sensación de querer estar acompañada, no quiero estar sola ya estoy muy confundida y hasta ahora Víctor me transmite protección

-¡Espera! No tardes por favor - digo mirándole a los ojos

El exhala, -No te preocupes aquí estarás bien- me regala una sonrisa

Sale cerrando la puerta con cautela, solo quiero recordar que aquí estaré bien, después de días de miedo y confusión, su sonrisa me hace sentir paz.


•Nota de autor
Hola! ¿Cómo han estado mis hermosos lectores? espero que bien, Feliz Año Nuevo💙 les mando un fuerte abrazo, espero que les vaya muy bien en todo lo que se propongan, también que le den una oportunidad a esta historia. Y que nos sumemos más y me comenten que tal les parece.
Abrazos💙

Reviviendo El Ayer©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora