Capitulo 15

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Tres días después.

Azul

Habían pasado tres días desde aquel momento. En cuanto había dicho aquello último, Harry simplemente negó con la cabeza y se fue.

Niall fue muy amable y me contuvo cuando no pude contener mis lágrimas. Él era muy buen amigo solo eso. No lo veía como algo más y lamentaba no corresponder sus sentimientos. Él me había confesado que se sentía atraído hacia mí pero le dije como me sentía respecto a Harry y comprendió a la perfección.

No hablé con nadie en esos días a excepción de Anastasia y de Elise y Penny que me consolaron y me decían todo el tiempo que yo no había tenido la culpa de nada pero yo estaba convencida de que si era mi culpa.

Harry no se puso en contacto conmigo en ningún momento y yo tampoco con él porque quería darle su espacio, no quería estorbarlo.

Eran alrededor de las siete y media de la tarde y el sol se estaba ocultando dejando una hermosa puesta de atardecer, el cielo anaranjado brillaba sobre el calmado mar que estaba a unos cuantos pasos de mí.

Otra vez me encontraba en aquella situación de atracción de volver a mi hogar, estaba tan convencida de querer volver a casa pero no me atrevía, por alguna extraña razón tenía miedo y no sabía de qué. Tal vez de perder lo poco que había construido aquí, en la tierra de los humanos.

Solté un suspiro segura de mi decisión y quité mis sandalias playeras y mi vestido veraniego quedando solo en un bonito bikini rosa.

Caminé con pasos lentos y temblorosos hacia la marea, mis pies ya se mojaban.

Un paso más y mis pies ya se encontraban cubiertos por el agua.

Otro más y no veía mis talones.

Otro y el agua estaba a unos veinte centímetros sobre mis pies.

Seguí dando pasos largos y el agua me llegó hasta por arriba de las rodillas, podía sentir que en cualquier momento mis pies iban a ser remplazados por mi cola.

Cerré los ojos y me dejé llevar por el agua y me adentré un poco más al mar, el agua estaba por mis muslos.

— ¿Azul? —escuché un grito detrás de mí. Abrí mis ojos rápidamente y me di la vuelta para distinguir una silueta masculina parado en la orilla de la playa—. ¿Azul eres tú?

¡Por las almejas! ¡No podía ser! ¿Que...que hacia él aquí? Me quedé congelada en mi lugar sin poder moverme. Estaba tan sorprendida que no me di cuenta que había dejado de respirar. Di pasos apresurados hacia tierra nuevamente.

Cuando pisé nuevamente la arena seca, no pude evitar evaluarlo fijamente por miedo de que él fuera solo una alucinación mía.

— ¡Gracias a todos los mares! Al fin te encontré. — ¡Mi hermano! Mi hermano me tenía envuelta entre sus brazos y yo no podía creerlo. Sin dudarlo correspondí su abrazo fuertemente y no pude evitar que lagrimas salieran, no entendía por qué lloraba. ¿No se supone que uno lloraba cuando estaba triste? Esas cosas de humanos nunca las iba a entender.

— ¡Cleon! —Él se separó de mí y limpio mis lágrimas.

—No sabes lo que te llevo buscando, pequeña medusa. No tienes ni idea de lo preocupado que estaba, había pensado lo peor.

— ¡Lo siento! ¡Lo siento tanto! Yo no quería irme...pe-pero comencé a nadar y...

—Shh...—él me calló y me volvió a abrazar—. Está bien. Por favor cálmate —acarició mi cabello lentamente intentando calmarme.

Blue Mermaid |H.S|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora