"Alguien nos controla" Esas simples palabras me aterrorizan. Si alguien nos controla, significa que tambien controla a los zombies y que es capaz de matarnos con un simple movimiento.
Mirando a mis manos, aun cubiertas por la sangre de mi hermano, me doy cuenta de que todos tenemos el mismo destino. Morir entre sufrimiento. Nadie puede salvarse de eso, nadie...
-oye!- oigo a Luke al lado mio, agitando mi hombro.
Levanto la cabeza, viendo su cara preocupada, seguida por la de Sam. Delante mia, veo a mi hermana. Cass esta devastada ,no para de llorar mientras abraza a Josh, quien intenta ocultar su tristeza ,manteniendose firme. Leo y Leila están mirando aterrorizados la escena, sin decir ninguna palabra. Vuelvo a mirarme las manos, viendo como una lagrima se escapa de mis ojos.
- Caine- eso es lo unico que oigo de parte de Orsay, quien se une al shock.
Levanto la cabeza, mirandola, dejando de lado las unicas lagrimas que derramare por mi hermano. Mi cara cambia en una fraccion de segundo, volviendola seria y fria. Lo ocurrido hace minutos ya no existe. Mi cabeza solo piensa en matar todo lo que se interponga en mi camino.
- necesitamos armas - me levanto rapidamente y me voy sin esperar que nadie me siga, acelerando el paso.- no me sigais.
Cierro las vallas,para que no vengan mas zombies y ando firmemente hacia el centro comercial.
..................
La única tienda de armas se encuentra en la zona más oscura del edifico. Los escaparates están teñidos de negro, por lo que tardo un tiempo en localizarla. La puerta negra está cerrada con pestillo. Doy una patada al cristal negro del escaparate , cerca de la puerta, haciendo un agujero tan grande como para meter un brazo. Me protejo el brazo derecho con la chaqueta y lo meto por el hueco.
A tientas, encuentro el pestillo, que se resiste a abrirse. Empiezo a retirarme , pero de repente noto algo agarrándome. Me empuja hacia la puerta, aplastándome y golpeándome. Intento soltarme, cortándome con el cristal de escaparate , soltando un grito alto ,que llama la atención a una horda de zombies. De un tirón, consigo soltarme y coger lo primero que encuentro en el escaparate.
Saco el brazo rápidamente y doy al primer zombie con el objeto. Observo como su cabeza cuelga del cuello, partido por un hacha. "Espera, espera, espera... ¿¡Un hacha!?" La cojo con las dos manos, asegurándome de no tirarla y voy hacia el zombie más cercano. Cuando estoy cerca, levanto el hacha y doy un salto, inclinándome hacia delante , partiéndole por la mitad. Los últimos tres zombies aceleran en velocidad y se acercan en círculo, intentando rodearme. En cuanto están a poca distancia, estiro los brazos y doy un giro. Los primeros dos zombies reaccionan tarde y se parten por la cintura. El tercero lo esquiva a una velocidad inhumana y se tira hacia mí. Yo me agacho y le intento partir la pierna, pero hay algo metálico por en medio. Cuando vuelvo a mirar al zombie, veo que la mitad e su cuerpo, que asoma por los agujeros de la ropa, es de un metal color negro. Asustada, me alejo corriendo, pero el zombie me alcanza con suma facilidad. Se abalanza sobre mí, dejándome boca arriba. Intenta morderme el cuello , pero lo protejo con mi hacha. Al no poder morderme , intenta atacarme por otro lado. Veo la oportunidad tan clara como el cielo, "es ahora o nunca". En un ágil movimiento , muevo el hacha, cortando la superficie del cuello. Lo golpeo varias veces, hasta que se parte con un gran crujido. Me lo quito de encima y me levanto, mirando hacia la tienda. La puerta está abierta desde dentro por razones desconocidas. No pienso en ello y entro sin cuidado.
Dentro no hay ningún arma de fuego, lo que me llama mucho la atención "¿ habrán llegado otros supervivientes antes que yo?" Lo único que hay son armas de cuerpo a cuerpo hechos de madera vieja.
Cuando me muevo para mirarlas de cerca, oigo un sonido procedente de la sala de " solo personal autorizado" . Me acerco con cuidado, pero al ver lo que hay dentro, me quedo asombrada. Toda la habitación está llena de brazos y cuerpos metálicos, como los del zombie anterior. Me acerco a el escritorio, mirando hacia lo que parece ser una hoja. Paro al ver que se trata de las normas de los militares en perfectas condiciones. Llena de pánico, doy un paso atrás, clavando la vista en la sombra que se refleja en uno de los cuerpos metálicos.
- Eres ágil- dice alguien detrás mía. Antes de que tenga tiempo para girarme, noto una aguja clavándose en mi cuello- Te necesito para mi plan.
Un hambre empieza a corroerme el cuerpo, volviéndome loca. Me doy la vuelta , viendo que no hay nadie. Mi cuerpo empieza a cambiar y dejo de notar la hacha de mi mano. Una única frase me invade la cabeza obligándome a avanzar, " tengo que despedirme". Pero no me doy cuenta de que está ocultando a otra totalmente contraria. " Es hora de comer".......
Todavia sigo viva, o eso creo. Puedo controlar mis movimientos y, al parecer, solo puedo aguantar varias horas antes de convertirme en zombie. Me miro a las manos, viendo que se estan pudriendo poco a poco, agrietando mi piel, haciendo que grite , emitiendo sonidos horribles.
Empiezo a caminar, como hacían los otros zombies, pero no con el mismo objetivo. Debía encontrar a mis compañeros, al menos a uno de ellos para despedirme, y para que me mataran y acabaran con mi dolor. Pasada media hora, lo veo. Luke está a cinco metros de mi, parado de pie,con una escopeta. Me acerco a el, y con el primer paso, el se percata de mí. Me apunta con su arma y yo retrocedo. Al verme, duda, bajando la escopeta y acercándose
- Astrid?- se para dos metros de mi , y coloca la escopeta en su espalda.
Las lagrimas me empiezan a caer por las mejillas, pero yo ya no las noto. Me acerco a la pared cubierta de barro que hay a mi derecha, y escribo allí mis ultimas palabras, las que nunca me había atrevido a escribir: " te amo ".
Al leerlo, Luke se sorprende.
- yo también- me envuelve en un abrazo y me besa apasionadamente, y yo , con mis ultimas fuerzas, se lo devuelvo.
Y entonces, lo pierdo. Mi cuerpo empieza a moverse solo, y muerdo a Luke, desgarrandole los labios. Él se aleja de golpe y chillando de dolor, llevándose las manos a la boca. Me acerco rápidamente para acabar con él, chillando a mi cuerpo para que parare, pero no puedo hacer nada. Me intenta alejar con las manos, pero lo único que consigue es un gran mordisco en el brazo. Saca la escopeta y me apunta, pero ya es tarde. Su cuerpo empieza a dejar de funcionar, y la suelta, rompiendo el cañon. Sus ojos empiezan a volverse nubosos y sus heridas dejan de sangrar.
Empieza a andar al igual que yo, buscando comida, uno al lado del otro, tocándonos los hombros, y gracias al ultimo gesto de cariño de Luke, también dados de la mano por el resto de nuestras podridas vidas.******
WIII! Fiestaaa!!!! Se acabo, al menos para Astrid y Luke. Dentro de poco subiré el epílogo -pero Annie, siempre dices pronto y al final tardas 99999999999 años!- ya, ya , eso es verdad, pero al final lo subo, no?- bueeeeeno-.
Este cap me a enseñado que.... que.... Que no se puede escribir una muerte teniendo a tu hermana al lado , diciendo " necesita ESENCIAAAAAA!!!" XD
Denle a me gusta si no entendisteis nada acerca el tío de la aguja :D. Byes~

ESTÁS LEYENDO
El virus
ParanormalAstrid vive en un pueblo normal, con gente normal y casas normales, pero todo cambia cuando las persona empiezan a faltar a clase por una enfermedad y la obligan a seguir unas normas de los militares que nadie entiende. Pero lo bueno es que a causa...