27: Explicaciones con Cecil. n.n/

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Ai, despertó. Después de aquella noche,en la que llego místicamente a la carta que debía leer, su cuerpo por fin se sentía con energías. Incluso, sus ojeras habían desaparecido.
Una parte de la carta decía que despertaría a las 6 de la tarde, cosa que sucedió.
Con algo de pereza, Ai salió de su habitación, arreglado y, listo para irse a la academia Saotome, cerró la puerta.
Antes de salir completamente del Máster Course, hizo algo de tiempo, pues en la carta se mencionaba que Cecil estaría cerca de las 7:30 p.m. esperándolo. Comió un plato de comida que encontró en el refrigerador. Era para el, y seguro era un detalle de Masato, pues la nota que indicaba lo mencionado, tenia su letra. Una vez hecho aquello, salio directo a su destino.
En el camino a la academia, en la que estudio una vez, logró ver miles de personas. Cada una tenía una expresión distinta.
Algunos iban tan contentos como niños al recibir una excelente noticia, tal como que irían a comer o les regularían algo. Otros, iban tan enfadados como alguien que tuvo una pelea. Y, otros tantos, no tenía una expresión en especifico.
Sin embargo, Ai logró ver como otros pocos estaban tristes. Debían tener bastantes problemas. Mikaze, por un momento, se pregunto: “¿Así me veo yo?”.
Es cierto que tenía ciertos problemas, y a veces se preguntaba mucho las cosas. Cuando empezó todo lo de aquel deseo, la principal causa de sus preocupaciones era: «Interrumpirá mi trabajo», «¡Será incomodo estar trabajando de esa forma!».
Sin embargo, al pasar el tiempo, sus pensamientos fueron cambiando, a tal punto de que su preocupación de como trabajaría paso a: «Si hago esto, los lastimaré», «No quiero perder la “amistad” que tengo con ellos».
La forma en la que Ai había cambiado, se debía a los sentimientos que fue viendo en sus kouhai's, y en sus compañeros de grupo.
Antes de iniciar el mes, se les dio una semana antes. En esa semana, tanto STARISH como QUARTET NIGHT eran libres de hacer y comer lo que quisiesen. Esto, gracias a la inmensa donación de un fan de ambos grupos. Ai logro ver como algunos solo pedían un plato sencillo, y otros un manjar para compartir con otros. Al final, esa semana fue divertida y entretenida.
Ai, sin darse cuenta, estaba dentro de la escuela.
Había estado dando vueltas, mientras pensaba todo aquello.
Sus ojos se toparon con los de un joven. Era el fanboy.
Este, rápidamente, escapo.
Ai, lo siguió, por que su cuerpo lo mando a hacer aquello.
—Esto...Mikaze-senpai..—dijo el fanboy, al sentirse acorralado, pues fue a chocar directo con una pared—Vale, la idea no era que usted supiera que aun soy de la academia y que aparte soy idol.—dijo, entre risas—Y, ¿A que se debe su visita a la academia?—preguntó.
—Vine a buscar a Cecil. Dijo que vendría aquí, y esas cosas—dijo Ai, agarrando su celular. 7:20.—Y, debo irme.—
El fanboy, de nombre Yuki, soltó una risita. Ese joven de nombre Ai Mikaze no era realmente todo un robot. Que bueno que Yuki era un primo de Cecil, y por ello tenia el conocimiento necesario sobre la magia que utiliza.
Ai, fue rápidamente hacia el pequeño lago que se encontraba en los alrededores de la academia.
Ahí estaba, el joven que le explicaría todo sobre lo que sucedía con el deseo.
—Mikaze-senpai—dijo, Cecil. Su mirada se encontraba en el cielo, el cual empezaba a oscurecerse.—El cielo es muy lindo, ¿No?—Ai, asintió—He de suponer, que no has venido hasta aquí solo para hablar. Digame, ¿Que desea saber?—Cecil, controlaba muy bien la magia que el mismo se había aplicado sin saberlo.
—¿Como afecta la magia a los demás?—preguntó Ai. El, estaba mas interesado en lo que sentían otros, que en lo que sentía el.
—¿Como los afecta?, pues..Depende. Algunos ya sentían algo hacia usted, Mikaze-senpai. Los que no, le debían tener algún tipo de afecto. De ahí, la magia solo los hace confundirse. Piensan que el afecto que tenían era amor.—contestó Cecil.
—¿Cuánto tiempo durara?—preguntó Ai. Debía saber la respuesta a todas sus dudas. Y no dudaría en preguntarlas.
—Sabía que preguntaría eso. Es algo difícil de explicar. En un inicio, la magia de la estrella duraría hasta que usted se decidiera por uno de nosotros. Pero, un..—Cecil dudó sobre lo que diría.—Un miembro de la realeza de Agnapolis me explico como podía cambiar eso. Actualmente, solo durara 4 días mas.—mintió. Sin embargo, a el no le gustaba no ser sincero, por lo que dijo la verdad—En realidad, duraría 3 días—La razón de su mentir era por que él deseaba que Ai eligiera a alguien.—Eso sí. Si no eliges a alguien, algo podría suceder. Yuki no me dijo que pasaría exactamente—y, había delatado a su amigo. Lo que decía, era cierto. Podía existir una consecuencia, pero desconocía de la veracidad de lo dicho por aquel joven.
Sin embargo, Ai no le presto importancia a eso.
—¿Por que el decir 4 días en ves de 3?—
—Bueno, si eliges a alguien en el cuarto día, siendo este el día en que ya se esfumo la magia, podrá saber quien estaba verdaderamente enamorado de usted—dijo Cecil. Era así y a la vez no. Pero el tenia su razón para ocultarlo. Quería la felicidad de Ai. Aun si era por la estrella, la quería.
Ai, por su parte, no preguntó mas. Quería hacerlo, pero la forma no le llegaba. Tal vez, eso era lo necesario.
Ustedes, lectores, saben la información que Ai no sabe. La deje por algunos capítulos.
—Gracias por eso.—susurró Ai, y, se fue nuevamente al Máster Course.
                      |•♥•|
—Bien hecho, Aijima—felicitó Yuki, el fanboy—Lograste decir unas cuantas mentiras...—reprocho, con sarcasmo.
—Es por su bien..—dijo el moreno, rodando los ojos. Tenia alguien igual de molesto que Camus.
—Bueno, tal vez. Sin embargo, no esta bien mentir. A ti también te aplicaré una estrella si sigues mintiendo.— dijo, con algo de gracia.
—¿Cuales eran las consecuencias?—dijo Cecil, cambiando el tema.
—Ah, eso. Solamente era una exageración mía. Mikaze-senpai es alguien muy bueno, a mi parecer. La única “consecuencia”—dijo, haciendo comillas con los dedos en aquella palabra—Eran que Mikaze-senpai no podría ser feliz junto al que amara. Es decir, si amaba a alguien, cualquiera, no seria correspondido.—dijo, como si nada.
—¿Eso no es mucho?, quiero decir, ¡Podría causarle una depresión!, y más si lo estas haciendo humano con tu magia.—exclamó Cecil.
—Bueno, también me vería forzado a interrumpir esa magia—habló Yuki, antes de caer dormido.
—Magia que te consume mucho, Yuki—murmuró, Cecil, antes de llevar a su primo cerca de las habitaciones. Digo cerca, por que lo dejo en una banca. 

«Deseo erróneo» [Ai Mikaze x Starish, Quartet Night]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora