Piece of me {GAY} {M-PREG}

Capítulo 12

El vampiro no tuvo tiempo de reaccionar a lo que estaba viendo, esos niños lo habían tomado por sorpresa, estaba en su palacio, en su hogar y estaba a punto de ser asesinado.

— Creo que es papá — murmuró el híbrido, detrás de su hermano el Doxy — Tiene el mismo olor que mamá en su sangre — jugó con sus dedos — ¿Puedo tocarlo?

— ¿Hermano? — Calix se le adelantó al híbrido — No puedo creerlo, hermano — sollozó — Estás vivo.

— ¿Calix? — Se puso de pie con el vampiro envuelto en su cuerpo — Estás tan grande, no puedo creer lo fuerte que estás.

— Te extrañé tanto, creí que me moriría sin verte otra vez — sollozó.

— No, eso jamás — lo dejó en el suelo —Han pasado diez años desde que nos vimos.

— Pensé que no te acordarías de mi cuando me vieras — limpió sus mejillas — Te amo, tanto.

— También lo hago...

— ¿Papá Anker? — El Doxy jaló su túnica — Lamento lo que hice, fue sin querer.

— Yo lo hubiese matado si tuviera ese poder — Anker puso los ojos en blanco cuando escuchó la voz de Aarón — Así que...

— No me gusta, me da miedo — dijo Calix, colocándose detrás de su hermano — ¿De quién es hijo?

— Es mi hijo mayor — dijo el hermano de Ares, algo tenso — Llevo diez años aquí, y nunca he visto una conversación seria entre estos dos. Que no te sorprenda verlos discutir en pleno pasillo en las mañanas... O mejor dicho, a cualquier hora del día.

— Bien... así que eres nuestro padre — dijo Eros, colocándose frente a él — Si que eres muy guapo.

— Lo ves por primera vez y es lo primero que se te ocurre decir, pedazo de...

— Ezio, no termines esa oración — dijo Ares — Él es Anker, su padre... por el cual preguntan tanto.

— No creo que los muertos puedan tener hijos — dijo Aarón, colocándose frente a él — ¿Seguro que son sus hijos?

— Lo mataré, yo si lo mataré — Ares levantó su mano, y Aarón fue colocando en el techo ahogándose hasta con su propia saliva — Repite lo que acabas de decir, Aarón.

— Nada, no dije nada...— tosió.

— Eso creí — cuando estuvo cerca del suelo, lo dejó caer de forma brusca — No vuelvas a decir que mis hijos no son de Anker, porque no me importará el que seas mi sobrino. Con mis hijos que nadie se meta y tampoco con Calix.

— Ya entendí — se puso de pie, tosiendo todavía — Me iré a mi habitación, que tengan un horrible resto del día.

— Ares — su hermano tomó su brazo — Déjalo, es así por mi culpa.

— Eso no le da el derecho de querer pasarse de la raya — gruñó — No porque tenga un padre abusivo eso no le hace justicia pasiva — suspiró — ¿En donde dormiremos?

— ¿Uh? — Anker pestañeó — Mis empleados los llevaran a sus aposentos, si necesitan algo... estaré en los míos... — con pasos torpes, caminó lejos.

Su cabeza era un lio, no entendía nada de lo que estaba pasando y mucho menso que tenía tres hijos con Ares, se suponía que debían de ser dos y no tres. El hibrido que estaba detrás, se mantenía alejado lo más posible de él, como si le temiera, el único que saltó en su llegada fue su hermano.

Al menos, la última guerra no se había realizado, ver a los lobos y a los vampiros unidos encontrar de los de su misma raza, fue algo que no creyó ver jamás en su vida.