JUNGKOOK - I

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Seokjin ha vivido tres años de sufrimiento, donde lloraba todas las noches y se abrazaba a si mismo para lograr tener algo de calor en la fría noche. Se relaja de una forma en que parecía estar en el paraíso, solamente respiraba tranquilo sin voltear con miedo hacia atrás.

La amada libertad que siempre soñó se hace realidad, después de tres años y algunos meses viviendo sodomizado bajo múltiples manos y profundas miradas al final pude respirar sin que duela.
Kim Seokjin sonríe con alegría a su público, es la primera vez que siente verdadera honestidad al observar a los fanáticos. La vida no puede ser mejor.

Que hermoso percibir de su alma, cada día es un nuevo comienzo donde entierra las malas experiencias y libera su cuerpo. Ahora, todos los demás integrantes lo ignoran siempre y cuando no haya una cámara presente, fingen molestarlo y jugar con él por simple compromiso, haciéndolo más miserable de lo normal. Aunque gracias a eso tuvo la oportunidad de acercarse a otros artistas, teniendo "amigos". Pero el gusto no le demoró mucho tiempo.

Muchos meses tonteando y sintiéndose como una persona normal cobraron su parte. Varias veces quedaron para salir, estos de forma extraña le terminaban cancelando, una vez hasta lo dejaron plantando junto a muchas bebidas. En ese momento no sabe que está mal, puede que Seokjin se culpe por ello.

Todas las personas con las cuales se relaciona terminan abandonándolo de una u otra forma, se volvía tan desafortunado recordar.
No había mejores amigos los cuales hablar, reír o tan siquiera sentirse querido. Ha sido privado de muchas cosas, tantas que a penas puede nombrar algunas sin marearse.

Seokjin intenta sonreír frente al espejo, practicando su falsa personalidad para seguir teniendo un público a su lada. Sin embargo a veces cree que las cosas son diferentes, demasiado para que sus manos puedan sostenerlas.

"¿Podemos salir hoy? ¡Tengo un día libre!".

"Lo siento, no puedo hoy".

"Perdón, en serio no puedo".

"Estoy ocupado".

Se miraba patético rogar por algo de atención, sus mensajes eran una clara prueba de ello. Poco a poco comenzó a alejarse de esas personas que llamó amigos, teniendo muchos contactos en su celular pero ningún mensaje que no sea relacionado al trabajo.

¿Por qué?

Le duele, eran un gran apoyo para caminar sobre la cuerda floja.

El mayor ha aprendido con el tiempo ha ser más independiente, muy pocas veces conservaba con otros artistas más allá de su obligación de hacerlo. Todos se alejan, no hay sentido acercarse a ellos.

"¿Hyung?".

La voz dulce y ya cambiada del menor del grupo le llama la atención, suspira y voltea el rostro para responderle.

"¿Pasa algo?" Alza sus cejas curioso "Te noto algo tenso, puedes decirme lo que quieras, tu hyung se hará cargo de ello".

Puede pasar los años, sin embargo Seokjin siempre lo miraría con esos ojos risueños llenos de amor, no algo romántico. Ese era un tema que Jungkook últimamente le molestaba, no tenía sentido, ser mimado por el mayor del grupo como su favorito debe ser lo mejor.

¿Por qué?

"¿Podemos ver una película mañana? ¡Es nuestro día libre!" Los ojos del menor brillan y una radiante sonrisa se instala en su rostro, una faceta más que suma puntos.

"Está bien, Jungkookie" Suelta con amabilidad, le gusta pasar tiempo con su menor.

El estómago de Jungkook se revuelve sin explicación, agradece a Seokjin y sigue su camino. Frunce el ceño mientras camina hasta su habitación, suspirando al no ser capaz de tomar las riendas.

𝑻𝒐𝒙𝒊𝒄 | ʙᴛs》 Vᴇʀ.I《Donde viven las historias. Descúbrelo ahora