Tuve una pesadilla.
De esas que suelen tener ciertas escritoras cuando la inspiración no sale a relucir.
Uno de esos momentos tétricos, en los cuales una se siente bloqueada ante un abismo de total dolor, y desesperación.
Era un mundo aparte, oculto en lo más profundo de la tierra, donde caí precipidamente con una especie de vestido rosa, este lugar solía llamarse; "el mundo de las rosas" un lugar donde se podía volar hacia el mañana, donde había tantas rosas, de tantos colores que me parecía increíble, habían duendes, enanos, hadas, sirenos y sirenas en los pequeños lagos, habían muchos animales tiernos, y campesinos trabajando para llevar el sustento a su familia, alegres como si fuera un mundo de total armonía. Pero cuando llegue por cada paso que daba destruía por alguna razón ese mundo, ahora
los animales comenzaron a hablar y su pelaje, y su semblante ya no era "el tierno" que había divisado hace un rato, ahora se apreciaba muerto, pero en vida. Las personas se empezaron a arrastrar por la tierra tal cual unas serpientes desesperadas, y de un túnel oscuro salió una horrible bestia la cual comenzó a ponerse una corona para si misma que en letras decia: "El rey" era horrible, por lo cual se le dio por nombre: "La desesperación" esta era una especie un poco rara con cabeza de conejo, cuerpo de hombre, cola de gato, y con diez tentáculos, y en sus tentáculos seis bocas que decían que el era mi nuevo rey, "La desesperación".
Yo, estaba asustada, veía tantas cosas las manecillas del reloj pasando súper rápido, como si no hubiese tiempo, como si todo fuera incierto.
En mis demenciales fantasías decido, salir corriendo hacia un bosque, en el cual las rosas se fueron marchitando, y solo quedaban sus tallos llenos de espinas, con los cuales me herí la piel, solo podía ver mi cuerpo lleno de sangre y espinas al final del recorrido, seguí corriendo, corriendo, y parecía que corría a la nada, no había escapatoria.
Hasta que encontré un pequeño lago, y en el lago un nuevo amigo era un sireno, bello, fornido, rubio, con una gran aleta, el cual me dijo: "cuando tengas fe en tu corazón, y creas en tí misma, podrás vencer a la desesperación".
Pero al oír esas palabras le dije: ¿Como puedo yo vencer a "La desesperación", con solo uno de sus tentáculos me rompería la cabeza, de que estas hablando?
A lo cual el respondió: "estas hablando con un sireno, ¿que puedes esperar?.
Fue entonces cuando decidí cambiar el futuro del reino de las rosas: emprendí mi viaje nuevamente a ese castillo, donde me encontré con muchas cosas, muchas tormentas, un reino para el cual la lluvia se había acabado, solo había tinieblas, y no había un mañana, seguí caminando, hasta observar un gran palacio torcido, con grandes rejas, y grandes rosas negras, con las espinas más filosas que te puedas imaginar, he allí en frente unas letras "Gastrus desesperación" por lo que comprendí que ese era el reino al que pronto iría a enfrentarme con una bestia, la cual estaba segura de iba a matarme.
Al entrar dije con una voz temblorosa, porque lo que estaba viendo era horrible: "Yo te desafió por la paz de este reino, por las rosas, por los campesinos que ahora junto a sus familias se arrastran en la tierra, por un mundo donde siempre salia el sol, y en las nubes se apreciaba el mañana, yo te desafió por la lluvia, te desafió y quiero todo esto a cambio, si logro vencerte" La desesperación con una sonrisa maléfica acepto mi reto, empezó a golpearme, a cortarme, a lanzarme espinas, hasta que llegue a un punto en el que quise morir, ya que mis ancestros preferían la muerte antes que las tinieblas, luego recordé las palabras de aquel sireno; "cuando tengas fe en tu corazón, y creas en tí misma, podrás vencer a la desesperación".
Cuando recordé esto levante lo poco que quedaba de mi,y creyendo en mi misma dije; "Yo soy la Reina de las rosas, este reino me pertenece y tu lo has destruido, yo creó en mi, y en que puedo vencerte" luego tome una espada, con la cual pude cortar tres tentáculos a aquel rey diciendo:
¡Viva el reino de las rosas, por siempre, aún en mi ausencia, ellos tendrán rosas, lluvia, el sol, paz, y sobre todo el mañana, por los siglos de los siglos, que así sea"
Cuando dije esto, Desesperación exploto, y dejo el reino lleno de malas vibras, malos deseos, espinas, materia negra, por lo cual tuve que limpiarlo con la pureza del alma de aquellos campesinos que se arrastraban por el suelo, finalmente volvió el mañana, y ahora el reino de las rosas es un paraje de paz, rosas, y sobre todo un lugar en el que llueve suavemente, de vez en cuando.
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Relatos de una enferma mental
KorkuAdvertencia: Si eres sensible te recomiendo que no leas este libro, porque lo que he escrito no será algo que sea placentero a tu mente, y no se como esta misma procesará la información de esta historia, podrías tener traumas psicológicos, tus noche...