Basada en la canción 'We Don't Care' de Akon, esta historia se centra en una salida a un antro nocturno un Viernes en la noche entre tres mejores amigos. Noche en la que uno de ellos se verá inmerso en experiencias totalmente inesperadas y emocionan...
Kai levanta la cabeza de su almohadilla al escuchar los pasos de su amo bajando las escaleras con rapidez.
-Kai. Papá te dejará sólo unas horas. Estaré de regreso cuando menos lo imagines___su can hace un graciosísimo tic con su cabeza mientras permanece sentado tranquilamente.
-Es ahora o nunca___JungWoo abre el estante de su cocina en busca de una caja de croquetas para perros. Vierte un poco del contenido en el platillo de Kai mientras este come con ansias.
-Tu lo tienes tan fácil amiguito. Sólo tienes que esperar a que te alimenten y duermes cuando y cuanto te plazca. Y ya después si eso,se te busca una compañera y desahogas tensiones___Kai dejo de comer para mirar a su desdichado amo y por un momento a JungWoo le pareció que este le había fruncido el ceño. Instantáneamente hizo una carcajada dejando ver esa preciosa sonrisa que sólo ángeles pudieron haber moldeado.
JungWoo se encontraba en posición de squat delante de su fiel compañero cuando de pronto escucha el sonar de un claxon. Era la señal. Donghyuck estaba fuera y no debía hacerlo esperar. La paciencia no caracterizaba al menor.
Rápidamente toma su teléfono y tarjeta de crédito que descansaban en la mesa de la cocina; pero sus llaves...no estaban.
Cielos. Donde están? Estoy seguro que estaban aquí? No puedo salir sin mis llaves___hablaba en voz alta consigo mismo. Suele hacerlo cuando está nervioso.
Era desesperante. JungWoo buscaba frenéticamente sus llaves por toda la habitación mientras el claxon sonaba una y otra vez, en ocasiones continuamente.
-Hyuck-ssi me matará___su aguda vocecilla literalmente temblaba.
En un instante de resignación decide poner de vuelta la caja de croquetas en el estante y escucha un sonido que era música para sus oídos en ese preciso instante. Mira en el interior de la caja y como en efecto su maso de llaves estaba dentro y gracias al sonido del choque entre ellas pudo notarlo. JungWoo se deja caer en el piso a literalmente abrazar la caja y respirar profundamente, nunca preguntándose como llegaron allí. Pronto después el sonido del molesto claxon lo hizo reaccionar.
-Cielos! Donghyuck! Lo olvidaba.
Kai se siente decepcionado y cubre su cara con su patita.
-Nos vemos muchacho. Sé un buen chico, si?
Kai se despide haciendo un característico tic.
Conozcan a Kai:
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