3- Perdedor.

266 27 2
                                        

Quizás con el tiempo debería haber mejorado, quizás debería haber empeorado. Pero no. Solo estaba ahí, estancado. Era un espectador mas de su propia vida. Aún así, aún podía escoger. Aún podía formar parte de sus decisiones.

-¿Crees que seremos mejores amigos para siempre, Richie?- Preguntó un chico pequeño de cabellos castaños mientras comían juntos.

-Por supuesto, Ed's. Sabes que no te voy a dejar escapar tan fácilmente.- Dijo empezando a reir de manera leve, abrazando a su amigo con fuerza. El mas pequeño rodó los ojos y correspondió a aquél abrazo sin rechistar. Era bastante evidente que se querían, no solo como amigos, si no como algo mas, que ni ellos sabían identificar.

De todas maneras, no solo era mas cercano con Eddie, si no con todo el grupo. Bill y el solían pasar tardes enteras juntos, iba a su casa y jugaban con su hermano pequeño, Georgie. Tenían pequeñas fiestas de pijama bastante frecuentemente, donde jugaban hasta tarde o veían alguna película. A veces en grupo, o solo ellos tres, depende del día.

Stan y él salían a pasear y miraban animales. Solo los observaban en silencio para no asustarlos, luego solían ir a comer y hablaban de lo bonitos que eran las crías de tal animal o lo interesante que era la forma de comunicación de algún pájaro.

Ben y el hablaban de temas profundos y tenían conversaciones bastante mas inteligentes de las que esperarías poder tener con Richie Tozier. Al parecer, podía ser serio si quería, pero eso quedaba entre Ben y él. Normalmente hablaban de temas controversiales, daban sus opiniones y compartían sus puntos a favor o en contra el uno con el otro. También hablaban de las emociones, aunque ahí era Ben quien se expresaba, pues Richie con suerte y podía diferenciar si estaba feliz o triste. Era agradable estar con Ben, le traía paz y tranquilidad, le daba confianza.

Mike estudiaba en casa, por lo que al principio no sabía ni que existía, pero descubrió que el y Stan tenían una gran amistad, y decidió presentarlo al grupo. Ahí fue cuando lo conoció y se hicieron amigos. En si, al principio no hablaron. Estaba estudiandolo, analizando si era seguro estar con el o no, pero al final se dio cuenta que era un chico genial que tenía bastante iniciativa, y le apoyaba a el y a Bev en las ideas tan inesperadas que podían llegar a tener.

Y también se unió una chica al grupo, Beverly. A la edad de catorce años empezaron a fumar juntos, haciendo la promesa de que si uno decidía que debía dejarlo, el otro debía hacerlo también. Congeniaron muy bien desde el primer momento, y se lo que estáis pensando, pero no era eso. Ellos tenían una amistad real y fuerte. Podían sentirse seguros el uno con el otro. Hubo una temporada en la que Bev se estuvo quedando con Richie el tiempo en el que su padre era detenido, pues su madre ya no pasaba tiempo en casa, y su padre seguía sin dar señales de querer verle. Ella era la única persona que sabía lo que había vivido, ella era la única con la que se había abierto. Había sido así desde el principio, por eso cuando se dió cuenta de lo enamorado que estaba de su mejor amigo a los diecisiete, ella fue la primera en saberlo. Por eso, ella fue la única persona en la que pudo confiar para desvelar su secreto mas sucio.

Suicide boy. -Reddie-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora