Sonríe y pon tu mejor cara

El fin de la inocencia

Un suave rayo de luz besa mi cara por la mañana. Despierto con la mente nublada. Qué estoy haciendo en esta cama? Me quito las frazadas de encima. Mi camisa está empapada en sudor. No recuerdo si soñé anoche o si dormí en paz por primera vez semanas. Intento capturar el momento que se me escapa como el agua entre las manos. Y pienso en todas aquellas cosas en las que quiero creer. 

El teléfono suena, como si me llamara a la realidad. Temo que sean esos detectives de nuevo. Lo dejo sonar hasta que se activa la máquina contestadora.

- Hola, este mensaje es para Arthur Fleck. Mi nombre es Shirley Woods y trabajo para el Show de Murray Franklin. No sé si está al tanto, pero Murray pasó el video de su acto en el show recientemente y ha tenido una gran acogida entre nuestros televidentes. Murray me pidió que lo llamara para ver si…

Me levanto. Contesto.

- Quién es?

- Oh, hola, soy Shirley Woods y soy secretaria del Show de Murray Franklin. Hablo con Arthur?

- Sí…?

- Hola, Arthur. Bueno, como le decía…hemos recibido muchas llamadas y comentarios sobre su acto y Murray me pidió que me contactara con usted para ver si quisiera venir al programa como invitado.

Qué?? Ésto no puede estar sucediendo. Murray me quiere en su programa? Debo seguir con fiebre. Me pellizco el brazo y me toco la frente. Necesito saber si esto está pasando o si es una alucinación.

- Murray me quiere en el Show de Murray Franklin? 

- Sí, no es genial? Murray quisiera conversar con usted y que quizás nos presente algo de su acto. Le parece bien?

- Sí…suena genial... 

- Podemos fijar una fecha ahora mismo? Está disponible el próximo jueves?

No sé que significa todo esto. Otra ilusión? Ya llevo tantos días sin tomar mis medicamentos. Es posible que eso me esté afectando. Camino por esa línea que me divide en alguna parte de mi mente. Hay un filo en los límites donde todo es dudoso, todo es borroso pero real. Jajajajaja, es una locura…yo en el Show de Murray Franklin. Ahí estaré.

La habitación del hospital está bañada de luz. Es el primer día de sol en Ciudad Gótica en mucho, mucho tiempo. La camisa que me puso Sophie anoche, o que me la puse yo mismo, no lo sé, me la he dejado puesta. Estoy sentado junto a la ventana y observo la figura inmóvil de Penny mientras fumo. No me importa fumar en este lugar. La verdad, ya nada me importa. Por momentos parpadea y parece querer despertar, pero vuelve a caer dormida. 

Jajajajajaja, Penny…voy a contarte una historia. Hace mucho, mucho tiempo….había algo que me hacía sonreír. Y supe que si tenía la oportunidad de hacer reír a las personas, quizás les podría dar un poco de alegría. Recuerdas lo que me decías? Que mi propósito era llevar risa y alegría al mundo? No recuerdo si lloré cuando leí aquel libreto en Arkham…era una fabulosa comedia, sabes? Un gran guión. Creo que reí tanto que morí. 

- Jajajajajajaja.

Enciendo otro cigarrillo, llenando la habitación de humo. Te molesta que fume aquí? Pues al diablo, Penny. Vete al diablo!  

Penny despierta. Abre sus ojos y me reconoce. 

- Hola Penny…Penny Fleck…siempre odié ese nombre…

No necesito decirle más que eso. No necesito pronunciar palabras. Mis ojos lo dicen todo. Y si pudieran hablar, gritarían!!!

Odié ese nombre desde que era pequeño y nunca supe por qué. Pero ahora entiendo. Ahora lo veo todo claramente. Penny… no recuerdo que jamás me festejaras un cumpleaños o una Navidad. No recuerdo que me llevaras a jugar a un parque o que me leyeras un cuento antes de dormir… Tenías tiempo solo para tus novios. Todos esos hombres horribles que te hacían daño, tú los amabas??? Eso es amor?? Un día trajiste a aquel hombre a la casa, lo dejaste vivir con nosotros y lo invitaste a dormir en tu cama mientras yo dormía en el sillón. Ese hombre que me lastimaba y me hacía llorar. Me quitó mi único juguete. Y tú preferiste ignorarlo… 

Acaso no veías las heridas sobre mi cuerpo cuando me bañabas? No veías la sangre en mi ropa cuando me cambiabas? - Te caíste, Feliz. Debes tener más cuidado cuando juegas…- eso es lo que decías. Te engañabas a ti misma. Y qué bien lo hacías. PENNY!!!! Ese hombre me golpeó, amarró mis manos al radiador y me dejó así durante días, con frío y con hambre!! Yo era solo un niñito!! Destrozaron mi infancia!! CÓMO PUDISTE PERMITIRLO???

Y ahora que soy grande…no me ves llegar a casa cansado y golpeado, temblando de frío?? No. Nunca me preguntas cómo estoy, cómo estuvo mi día. Me ves triste y nunca me das un abrazo, nunca un beso. Crees que por estar enferma el mundo gira a tu alrededor? Pues yo también lo estoy!! Yo también sufro!! Dormí toda mi vida en el sillón para que tú estuvieras cómoda!! Qué conveniente fue para ti que yo lo hubiera olvidado todo. Oh, Penny, cometiste la peor traición de todas!! Abusaste de mi cariño!! 

Tú solo piensas en ti, en ti y en Thomas Wayne. Y si dices la verdad y Wayne es mi padre, qué cambia? Nada cambia. Quizás él sea mi padre y me haya abandonado, pero quien dejó que me hicieran daño fuiste tú. Eres igual a él. Mientes. Siempre mentiste. Debí leerte entre líneas, Penny…

- Recuerdas que me decías que mi risa era una enfermedad? Que había algo mal en mí? No lo hay. Ese es mi verdadero yo. 

Sonríe y pon tu mejor cara…eso me decías, recuerdas? Jajajajajajajajajaja. Esconde tu dolor detrás de una máscara…camufla tus lágrimas entre tu risa…eso me enseñaste. En lugar de ayudarme, me obligaste a sonreír.

- Feliz…- dice Penny con una débil voz, como si hubiera escuchado todas mis acusaciones silenciosas. 

Jajajaja…Feliz…ese maldito nombre que me pusiste. Me manipulaste para callar tu propia conciencia, para lavarte la culpa de las manos. Fui un títere colgado de un solitario hilo al que tú me encadenaste. Me convertiste en este bufón. Nunca me escuchaste llorar?? No?? Pues lo hice a diario. Y lo sigo haciendo. Si no lloro por fuera, lloro por dentro, pero lloro cada maldito día de mi desgraciada existencia.

- Feliz…jajajaja. No he sido feliz por un solo minuto en toda mi puta vida.

Me pongo de pie y me acerco a su cama. 

Ya no quiero escucharte. Todos tienen una historia que contar, no es así? Pues bien…tú ya tuviste la oportunidad de contar la tuya y nunca, nunca hubo una sola palabra honesta. Ahora es mi turno. Has escuchado decir que el fuego es el único amigo del diablo? Pues bien, el único amigo de un payaso es la risa. Espero que te guste mi chiste…verás que hasta al mismo Satanás le gustará…

Retiro la almohada, dejando caer su cabeza sobre el colchón. 

- Sabes qué es gracioso? Sabes qué me hace reír realmente? Solía pensar que mi vida era una tragedia…pero ahora me doy cuenta de que es una puta comedia.  

Presiono la almohada sobre su cara. Ni siquiera parpadeo. Lo hago con calma y con frialdad. Su resistencia es débil y silenciosa y no toma más de un minuto hasta que se apaga…Penny se ha ido. 

Matar es bueno y de ningún modo difícil. Aquí es donde se equilibra finalmente la balanza. Si he pagado una pena y he servido mi condena, aquí está entonces el crimen que faltaba para justificar esa cadena perpetua a la que me sentenciaron al momento de nacer.  

Tiro la almohada. Me apoyo en el marco de la ventana, miro al cielo y suspiro. Un rayo de luz entra por las persianas y cae sobre mi cara. Hay un sabor distinto en mis labios. No lo sé explicar, pero lo siento…lo sé. Este es el fin de la inocencia…