Para el chico que amo.

C A P I T U L O: 20

Pasar el día con mi padre fue grato, hablamos de todo y de cómo va su empresa, qué estos meses ha crecido un poco más. Decidí terminar los días de clases y todo sigue igual, muchos, pero no tantos me hacen comentarios inapropiados, los chicos del equipo no se ven molesto por mi orientación siguen siendo ellos los mismos amigos del equipo. Sebastián sigue siendo el mismo egocéntrico de siempre pero al menos ha dejado su rivalidad con ser el capitán.

Me parece justo ya que finalizamos el primer semestre, ¿Para que le servirá ser el capitán de la escuela, cuando puede ser titular en la universidad?.

Mis amigos siguen estando conmigo, Arya y Sebastián son... Si. Bueno, son muy bonita pareja, hemos visto facetas de Sebastián que jamás nadie pensó ver. Derek y Sheryl están muy unidos, nunca se separan, siempre hacen todo juntos. Gael y Maddy son muy tiernos hacen lo mismos que Derek y la rubia.

Andrew. Andrew y yo estamos bien, aún que obviamente no le hemos dicho a mis padres de nuestra relación. Bueno sólo mi padre, él de verdad se esfuerza mucho cómo para decirle “Papi te presento a tu yerno”. Pero estamos bien con eso, salimos siempre nos vemos todos los días y nuestros padres están tomando la decisión de vacacionar juntos y me agrada esa idea.

—¿Se imaginan a nuestros padres juntos en la misma cabaña?.

Miro a Sheryl que hace gesto de escalofrío sobándose los brazos y todos reímos.

—¿No te agrada la idea de estar conmigo en vacaciones navideñas?— Derek pone ojos de corderito haciendo pucheros— yo tenía un traje de Rudolf para mostrarte lo.

—Por Dios chicos, mucha información—. Chillamos todos en coro.

—Awwwww bebé serás mi Rudolf ¿Te puedo tocar la naricita?.

Y con esto todos salimos corriendo de la cafetería, mientas Sheryl y Derek lloran de la risas por nuestras reacciones.

Ya no me siento ahogado o agobiando, respiro tranquilo. No niego que si es algo molesto que te suelten miradas discriminatoria o algunos que otros comentarios pero me siento bien con eso.

—Cómo la llevas hermano.

—Sinceramente, bien.

—Eso es bueno, pensé qué... Bueno. Pensé que tú papá se pondría loco con eso de tu orientación.

—Yo igual, pero ya vez. Dejo a un lado su orgullo y solo hablo conmigo. No sabes cuánto alivio sentí ¿Sabes?

Maikol tira piedritas lejos de las banca donde estamos sentados, observando la nada.

—Y ¿Cómo la lleva Derek?.

Me sorprende un poco que lo pregunté porque él nunca lo hace, y ya a pasado tres meses de lo sucedido con Derek.

—Bien — miento. Nunca hablamos de lo qué realmente le sucedió en ese bosque, sólo sus familiares y amigos más cercanos sabemos la verdad. Así que no me siento mal en no decirle la verdad a Maikol.

—Y... ¿Aún no dan con el asaltante?.

—No, aún no. Suponemos qué estaba alcoholizado u drogado, porque la verdad no sabemos quién fue el que hirió a mi hermano.

Maik sólo asiente y sigue lanzando piedritas a lo lejos, haciéndolas rodar en el asfalto. En eso llegan los chicos con vasos y vasos de helados, nos dan uno a cada uno y sólo disfrutamos de nuestra salida del primer trimestre. Sólo nos quedan seis meses y nos iremos de este infierno llamado escuela.

Todos se fueron y quedamos nuestro grupito de “Los inadaptados”, comiendo helados y hablando de nuestras vacaciones.

—Te extraño.

Miro sin entender lo que mi novio me dice y veo que su semblante no es del chico feliz, carismático y coqueto.

—Pero me tienes enfrente de tí ¿Cómo me vas a extrañar?.

—Es qué estos últimos meses no estamos juntos, y todo eso de que te expusieron en toda la escuela y yo no estuve.

Sé a qué se refiere, sé que en esas semanas no estuvo para mí pero lo entendía a la perfección, su tía enfermo y el estuvo con ella cómo su donador de sangre. Por eso no estaba conmigo.

—No es tu culpa que no estuvieras aquí, tu tía te necesitaba más que yo, ella estaba muy mal y tú eras su cura.

—Eres tan bueno para mí, no te merezco.

Veo en sus hermosos ojos esmeralda algo de tristeza, y no quiero que piense qué él es culpable por algo que tarde o temprano pasaría.

—Bebé mírame— le exijo, y él levanta sus ojitos viéndome directamente a los míos—. Fué bueno no tenerte conmigo en esos días, y no lo digo en mal plan. Necesitaba estar solo y así enfrentar todo esto, si, me decían y aún dicen comentarios feos. Pero, mira todo lo bueno que ocurrió. Mi papá me aceptó y sigue siendo el mismo de siempre, eso es bueno.

Él me mira y su hermosa cara se le va hiendo la tristeza—. Si tú hubieses estado aquí sería diferente las cosas, porque no sería capaz de enfrentar nada solo. Porque estarías tú ahí sosteniendo me.

—Pero, tu papá tardó un mes en notarlo, y en ese mes tú solo salías necesariamente a comer, veías clases y te volvías a encerrar en tú cuarto.

—Pero lo notó, y si me ví perdido en ese camino donde no sabía qué pasaría, pero me encontré y él también. Así que quita esa cara y disfrutemos todo cómo si no hubiera un mañana.

—Te amo tanto Jeral Andersson.

—Y yo a tí Andrew Grey's.

Se pega a mí y recuesta su cabeza en mi hombro, hablamos y hablamos con nuestro grupo y sin pensarlo se nos pasó la noche, salimos de la heladería y todos tomados de la manos menos Andrew y yo. Obviamente aún nadie sabe de lo nuestro. Pero aún así éramos felices.

Hasta que sonó mi celular.

Número privados en línea.

********: Espero la estés pasando bien con "tu novio".

Yo: ¿quién eres?.

********: La pregunta aquí es, ¿Tú novio te ha hablado de mí?

Miro a Andrew y al segundo suena su celular. No sé da cuenta pero leo lo que dice y dice exactamente lo mismo me dijo a mí.

Todo en él queda frío y su celular se les cae de las manos, Gael y Sheryl al verlo toman a su hermano de los hombros y la rubia el celular.

—¡Maldito hijo de puta!.—grita la rubia.

—¿Que está pasando?

Pregunto con el hilo de mi voz pero todos me ignoran menos mis amigos y Sebastián.

—Lo siento, tenemos que irnos.— dice la rubia quién se despide de su novio mientras que Maddy y los demás se alejan sin decir una palabra.

—¡Que carajos fue todo eso!—. Sebastián luce igual de sorprendidos que nosotros y se queda viendo como pendejo el auto mientras de aleja de nosotros.

—No lo sé.

Claro que lo sé, no soy estúpido. Es su ex.

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Hola mis bellos ❤️ por fin aparecí. Espero estén bien 😘.

Espero les guste el capítulo. No se olviden de votar y comentas mis amores ❤️.