Young Blood.

Cap.7 Zac (II)

Hola :) Esta es la segunda parte del capitulo anterior. Me toco dividirlo porque en estos dias he escrito mucho, asi que bueno, se fue mas de lo que pense. Muy pronto subire otro capitulo, solo me falta editarlos, espero que les guste.

JO

-Bueno, por lo menos no voy a estar semidesnuda con el.- baje las ventanas, tenía mucho calor, pasaron veinte minutos y Zac no llegaba. ¿Por qué mierda se tardaba tanto? Vi un chico moreno, alto y muy musculoso, lo sé porque vestía una camisa blanca un poco ajustada, pantalones negros ajustados y unos converse blancos. Era de verdad muy lindo; sus ojos eran marrones oscuros y su cabello color ceniza. Realmente quería llamar su atención, pero me daba un poco de vergüenza, yo nunca había hecho esto, pero quería saber que pensaban los chicos de mí y quería no se... Tener algunas aventuras, nunca ha pasado nada emocionante en mi vida, quería que eso cambiara. Salí a "ponerle la gasolina a la camioneta", recordé lo que me dijo Zac, diésel no gasolina. Me baje de la camioneta y metí en el traga billetes el dinero que me había dado. Tome la cosa de la gasolina, no sé cómo se llama; pose muy sensual y hacia los mismos movimientos que hacia Lía cuando quería llamar la atención de un algún chico.

-Hola ¿Qué tal?- alguien dijo a mis espaladas, me gire rápida y sensualmente, mi cabello suelto me ayudó mucho, creo; ¡Si! Mi súper táctica (copiada de Lía) había funcionado.

-Hola.- sonreí y comencé a enrular una punta de mi cabello con mis dedos.

-¿Necesitas ayuda?- su voz era serena y muy ronca.

-No gracias, yo puedo hacerlo sola.- esto de coquetear con alguien que no conoces es interesante.

-Qué pena, yo enserio quería ayudarte.- me miro de arriba abajo, en sus ojos había perversión y lujuria, me gusto, pero me dio un poco de vergüenza.

-¿Te gusta mucho lo que ves?- me atreví a preguntar después de haberlo pensado varias veces.

-Sí, y mucho... ¿Te gustaría...-

-¡Jo!- grito Zac. Mierda.- ¿Qué haces amor?- ¿Amor? Maldito infeliz.

-Mmmm... Nada, estaba llenando... Bueno no importa ¿Me compraste lo que te pedí?- le dije para cambiar de tema, estaba en realidad muy incómoda.

-Si amor- dicho esto me beso muy apasionadamente, sé que fue apropósito. Todo el que nos viera pensaría que éramos novios y necesitábamos un motel; me agarro muy fuerte el trasero y me acerco mucho a él, estábamos tan cerca que pude sentir su erección creciendo en mi abdomen bajo. Lo peor de todo es que no era que yo no pudiera quitarlo de encima, era que no quería.

-Bueno... Yo me voy. Gusto en conocerte Jo.- dijo el chico moreno alejándose de nosotros.

-¡Mierda Zac!- bufe- Eres un hijo de puta... ¿Ese numerito era realmente necesario?

-No sé, pero ese chico se ve que de verdad solo quería follar contigo y no quiero que nadie se aproveche de ti o te haga daño.- me sonrió con sorna y me hizo un guiño.

-¡Maldito bastardo!- espete.

-Toma, ahí está lo que me pediste.- dijo ignorando mi insulto, ¡Lo odio! Subió a la camioneta y la encendió, me quede a un lado de la puerta con mi orgullo destrozado, no podía no subirme, porque no tenía nadie que me llevara, tenía mucha rabia, estúpido Zac.

-¿Qué esperas para subir, una tarjeta de invitación?- dijo con sarcasmo.

-No idiota, estaba pensando.- solté, al mismo tiempo que abría la puerta y me subía a la camioneta. Abrí la bolsa y saque unas papas pringles y una soda, no sé cómo supo que eso me encantaba. Después comerme un par de papas, saque la ropa y vi que era un mini short de jean, un crop-top rosado y unas sandalias del mismo color. Esto parecía de puta.