𝐄𝐧𝐜𝐮𝐞𝐧𝐭𝐫𝐚 𝐋𝐚 𝐋𝐮𝐳 | Ben Solo

II: Asciende

Escucho como alguien lo llamaba, era la voz de un hombre que extrañamente se le hacía conocida.

—Ben, tienes que levantarte, tienes que pelear.

Aún en el suelo, se dio la vuelta para tratar de ver mejor a quien sea que le hablaba, aunque su vista era borrosa pudo distinguir la figura de un hombre en cuclillas a su lado derecho. Abría y cerraba los ojos para poder ver mejor y observo con más detalle a aquel hombre, era rubio con ojos azules y tenía una cicatriz sobre su ceja derecha.

El hombre le extendió la mano y le dijo: —Vamos Ben, de pie.

El muchacho tomo aquella mano y de nuevo intento levantarse, esta vez pudo hacerlo, pero aun sentía dolor en todo su cuerpo. Ya de pie, vio al hombre con más claridad y noto que un halo de luz azulada lo rodeaba.

Sabía quién era, jamás lo había visto pero sentía que la fuerza le decía quién era esa persona.

—¿Abuelo? —Era el, el hombre que había admirado una gran parte de su vida.

Anakin Skywalker le sonrió y dio unos pasos hacia atrás, cuando se detuvo Ben vio como otra figura se hacía presente al lado de su abuelo.

—Sé que te falle Ben —su tío le hablo con un tono de arrepentimiento. —Pero es hora de dejar morir el pasado y ascender.

—Dijiste que terminarías lo que inicie, asciende y hazlo.

Más figuras aparecieron, Ben dio una vuelta sobre su eje sorprendido al verlas.

Obi-Wan Kenobi, Ashoka Tano, Kanan Jarrus, Luminara Unduli, Mace Windu, Yoda, Qui-Gon Jinn, Aayla Secura, Adi Gallia, junto a su abuelo y a su tío, se encontraban alrededor de Ben.

—Estos son tus últimos pasos, Ben. Asciende y tómalos.

—Trae el equilibrio a la fuerza Ben, como yo lo hice.

—Se la luz, encuentra la luz, Ben.

Sabía a lo que se refería, debía llegar hacia arriba. Debía luchar contra Palpatine, contra el hombre que maldijo a su familia, contra aquel ser que lo había atormentado toda su vida.

Ben se dirigió hacia una de las paredes rocosas y comenzó a escalar.

—Cada Jedi que una vez vivió, vive en ti.

—Deja que te guié.

—Como nos guió.

Escucho como le hablaban mientras escalaba hacia la cumbre, cada una de esas palabras le ayudaba a no rendirse, a alzar los brazos, a apoyar los pies. Cada voz le hacía sentirse más fuerte.

—Siente la fuerza fluyendo a través de ti, Ben.

—Asciende, Ben.

—Asciende en la fuerza.

—En el corazón de un Jedi se encuentra su fuerza.

—Asciende.

—Asciende.